Capítulo 12

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Nella

Hoy no iré a la universidad, el profesor de la clase de hoy nos da 2 materias y dijo que no iría así que tengo el día libre, Dani ni vendrá ya que en la tarde ira a casa de Noah para hacer el trabajo que Dyland y yo hicimos hace un par de días y no le pide decir a Dani que viniera en la mañana por que luego de recibir el mensaje me quede dormida de nuevo, son las 12:30pm.

Como no sabia que haría y no me quería quedar sola en casa decidí hablar con mi hermano a ver que haría, gracias a su trabajo no lo veo mucho y tampoco es que seamos bastante unidos, somos 2 personas completamente diferentes desde los pies hasta la cabeza.

Me di una larga ducha y me vestí bastante sencilla, un pantalón clarito y un top blanco.
nella

Cuando termine de arreglarme eran las 2:00-justo a tiempo-, tome mi teléfono y un pequeño bolso y baje, mi hermano quedo en que a las 2:00 estaría abajo así que sólo bajé, mi hermano cumpliendo su palabra estaba ahí, con una increíble pose se conquista, no por nada era el hombre más guapo de Seattle.

-¡Hermanita!-me saluda con sarcasmo-

-Hola, pesado, cuentame, ¿Que haremos?, por que la verdad es que no me apetecía quedarme en el apartamento todo el día.-le digo sonriendo, a algún lado bueno debía se llevarme-

-Pues, primero, pasaremos a ir a comer por que la verdad tengo hambre, luego, creo que podríamos ir a el centro comercial, hay una librería nueva, todo de madera, parece una cabaña y en verdad pensé que te gustaría.

Ahí me sentí muy bien, nosotros no somos muy cercanos gracias a nuestros seguidos roces, la verdad es que soy como una piedra en su zapato, ama tener todo bajo control y yo no le permtío hacer eso conmigo, hablamos no más de lo necesario y la verdad fue muy lindo saber que mi hermano sigue conociendo mis gustos y recordará ese tipo de pequeños detalles, cosas quizás insignificantes pero me sorprende que lo recuerde, el año pasado en mi cumpleaños me felicito por cumplir 17 en lugar de 19, osea, ¿Ya entienden el por qué me sorprende?

Ante su petición solo puse una sonrisa la cual el me devolvió, luego de un rato manejando paramos en un restaurante, muy rústico en verdad, Daniel no es de venir a lugares así, supongo que hoy es el día de hacer lo que yo quiero y lo que a mi me gusta.

Entramos, comimos y luego fuimos rumbo al centro comercial, al llegar yo parecía una niña chiquita con su papá, mirando cada tienda, toda emocionada, pidiéndole golosinas al cual mi hermano se avergonzaba, no es muy fanático de los niños y se que capaz me odia por comportarme como niña teniendo 19 y peor, a su lado, odiaba las miradas y algo que odiaba más que las miradas era que yo lo provocará las miradas.

Subimos unas escaleras mecánicas hasta que vi algo que amé con mi ser y Daniel lo notó, vi un lugar sumamente grande con puertas de madera y transparentes, todo eran vitrinas que dejaban ver hacia dentro, una librería muy grande, de dos pisos perfectamente organizada con libros de todo tipo, cuando me voltee Daniel me estaba viendo con una gran sonrisa, me límite a abrazarlo y dejarlo botado, avance y entré.

Sólo ese olor a libros me encantó y me hizo sentir muy cómoda, empecé a rebuscar en toda la librería con Daniel siguendome, tome cada libro que me pareció interesante, suspenso, romance, asesinato, había de todo un poco, Daniel tuvo que buscarme un pequeño carrito para ir metiendo todo, recorrí cada rincón, cuando vi que había terminado de recorrerla y agarrar libros me voltee hacia mi hermano, este tenia un carrito full de libros y la verdad es que no me importó, este sería mi lugar más frecuente desde ahora.

A mi me gusta gastar dinero, pero me di cuenta que capaz y me excedía cuando fueron 1.500$ en puros libros, ¿Que puedo hacer? no por nada soy la consentida de mi hermano, mi mamá y era la de mi papá.

Romper Las ReglasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora