Capítulo 19

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Dyland

Levante la mirada y estaba muy, muy cerca de su rostro, me acerqué muy poco a poco dándole chance para que me apartara.

-Apartame si no quieres que lo haga-le advertí.

Y al ver que no dijo nada pues...

No me aguanté más y me le lance a besarla quedando encima de ella, pensé que nella me quitaría de un golpe pero no fue así, nuestros labios están en el mismo ritmo, succionando y mordiendo a la perfección, nella se recostó en el sofá y yo quede en medio de sus piernas, cuando me posicione entre ellas nella soltó un gemido ahogado por sentir mi ya crecida erección, empezamos a rozar nuestras lenguas y me separé de ella para verla, estaba con la respiración agitada y roja, ella sólo sonrió y volví a besarla poniendo mis manos en su cintura y apretandola más contra mi.

Nuestro beso era deseoso, demandante y lleno de deseo, así como cuando tienes mucho tiempo que no ves que alguien que querías ver y se traen ganas desde hace mucho, así era nuestro beso, demandante, lleno de lujuria y deseo, apesar de ser primera vez que nos besamos, nuestras bocas actúan como que si ya se conocieran.

Nella tenia sus manos en mi cuello profundizando más el beso y ahí decidí que era mi momento, le había explorado el cuerpo mil veces con mi mirada y ya era hora le hacerlo con mis manos, subí mis manos por dentro de su corta camisa de pijama y toqué sus senos directamente, estaban calientes aunque hacia mucho, mucho frío, apreté estos y nella se despegó de mi un momento para soltar un gemido, levanté la mirada sin dejar de masajear estos y decidí besar su cuello, primero lamí, pase mi lengua desde su clavícula hasta un costado derecho de su cuello y lo mordi y succioné, nella soltó otro gemido mucho más alto que el anterior.

Bingo.

Otro punto débil y ahí ella bajo su manos y se topó con un punto débil mío en cuanto notó que me tensé cuando pase las yemas de sus dedos por mis costillas-amaba eso-, ella continuó bajando sus manos de manera delicada y cuando iba a volver a atacar su boca salimos de nuestra burbuja.

Sunflawer empezó a sonar y nella me dio una sonrisa inocente- la estaban llamando, que jodida suerte-.

Me levante y ella hizo lo mismo para tomar su celular de la mesita de centro, era Daniel, se levantó unos minutos para poder hablar y mientras yo me senté y analice lo que había pasado y sí, estaba muy, muy duro, mi erección estaba bastante crecida, caliente y notable, si no hacia algo pronto esto dolerá en un rato.

Vi a nella caminar de nuevo hacia mi sonriendo.

-Daniel nos reprochó a ti, Noah, Daniela y a mi por no revisar el grupo, aunciará algo importante hoy en la noche y quiere que vayamos todos, me llamó para avisarnos-puse una mueca, ¿Como el sabia que estaríamos juntos?, nella noto mi confusión por que mientras caminaba a la cocina aclaró-Noah le dijo que estábamos juntos posiblemente, así que ya sabes, nos quieren listos a todos a las 7 y quieren que nos vayamos juntos a casa de Daniel.

Luego de decir eso se adentro en la cocina sacando el agua y volviendo a la mesa para comer nuestra pizza como si nada hubiera pasado.

Si ella quiere actuar como si nada pasó no la culpo pero maldición, yo no puedo concentrarme bien cuando parece un jodidp angel y aunque la escena de hace minutos fue intensa no puedo sacarla de mi cabeza y mire mi reloj, eran las 3:23pm,y al fin decidí hablar.

-Oye-le digo para llamar su atención- iré a mi departamento, haré unas cuantas cosas y luego nos veremos a las 7, vale?-le digo levantandome, debo controlarme.

-Vale, nos vemos dyld-me dice dándome un beso en el cachete y yo me voy de ahí, basta.

A ninguno nos conviene que alguien sepa lo que acaba de pasar pero también pienso en que no quiero dañarla pero nella parece que quiere que la dañe por seguir este juego, confirmé hoy una cosa, nella no es una mojigata falsa que le gusta la gentileza, no, ella es agresiva y eso es lo que le gusta, dominar pero que la dominen, no es muy difícil saber esas cosas, por ejemplo, cuando ella estuvo encima de mi se le notaba la satisfacción que tenía por tener el control, pero hoy, también se le notaba la satisfacción por cederle el control a mi un rato, raro, pero cierto  y si eso quiere...

Romper Las ReglasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora