Dyland
Conozco a mi novia y se lo molesta que está, apenas llegamos a mi departamento nella subió a el baño a tomarse una ducha para relajarse, estaba demasiado tensa.
A todos nos tomo por sorpresa la noticia de Daniel, especialmente a Nella como es de esperarse, nunca le ha gustado tener méritos ni los tratos especiales por las influencias de su hermano, no se si se dio cuenta de que sus gritos yo también los escuché, aunque dudo que le importara.
Estoy tirado en el sofá, me quité la camisa y sólo tengo el pantalón y las medias, al cabo de unos minutos escucho unos pasos y al voltear a las escaleras es nella, tiene el cabello mojado, trae una camisa mía puesta unos boxers obviamente míos que le di, los compré hoy así que por ende no los he usado, al detallarla bien me doy cuenta de que tiene la cara hinchada, estaba llorando.
Cuando iba a levantarme ella salió corriendo hacia mi como si de un bebé se tratara y nos tumbó a ambos en el sofá abrazandome con fuerza, el mismo fue obviamente correspondido.
No se cuanto tiempo duramos abrazados pero se que ella sigue llorando sobre mi hombro desnudo.
-Debi de comportarme y anunciarlo igual, perdón dyld-me dice entre lágrimas y la miro como si estuviera loca, estuviera no, esta loca.
Aún con ella encima de mi decido sentarme y acomodarla sobre mi, con un poco de esfuerzo ya que ella no me soltó en ningún momento lo logré.
-Eso no me importa, te molestaste y debías desahogarte, además, creo que con el final los dejamos a todos confundidos-le digo despegando su cara de mi cuello para obligarla a mirarme.
Ella sólo me ve y asiente, yo extiendo mi mano hasta limpiar sus lágrimas, se bien que esto no la pone triste, son lagrimas de frustración.
Nos quedamos viendo a los ojos un buen rato, sólo así sin decir nada y me Di la oportunidad se volver a observarla bien, esos ojos grandes y de un color marrón miel, casi iguales a los míos para ser honesto.
Salí de mi burbuja al ver su torcida sonrisa, seguido de eso, me besó.
Esta vez no era como las demás, como cuando yo hacía el beso demandante, esta vez ella me tomó por la nuca para alegrarme más a ella desde que le correspondí el beso, estaba un poco desubicado por la rabia y el control com el que hacia cada morida, cada lamida o cada roce de lenguas.
Estábamos totalmente juntos, cada cuerpo pegado con el otro, ella pareció no soportar más y se quitó la camisa quedando sólo en la fina tela de los boxers, al quedar sus senos expuestos no dudé en tomar uno con una mano para apretarlo y empezar a chupar el otro, ella parecía estar disfrutandolo y lo confirmaba con cada jadeo que soltaba y cada que arqueaba la espalda.
Continúe besandola con la misma intensidad, cuando iba a bajar sus bragas, nella tomó mis manos y las juntó, para luego ponerlas por encima de mi cabeza y yo no podía estar más comfundido y excitado.
-Levantate-ordena completamente segura y lo hice sin rechistar-no quites las manos de ahí-vuelve a indicar y la obedecí.
Nella bajo mi pantalón y los boxers y volvió a incorporarse rozando mi punta en su entrada pero no terminaba de bajar y eso me estaba volviendo loco.
Hasta que al fin bajó de una vez, se sentó con fuerza y fue inevitable soltar un gemido.
La vi sonreír por la satisfacción, estaba mordiendo su labio y empezó a moverse encima de mi.
Adelante, Atrás, arriba, abajo y en círculos.
Rápido y sin parar, subía y bajaba, no me dejaba ni tocarla.
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Romper Las Reglas
RomanceAntonella Grey, una chica que parece ser tímida y callada. Pero todo eso cambia en cuanto se da cuenta de que su vida no son corazones y colores como lo pensó. Dyland Shonfield, un chico problemático que solo le gusta tener sexo y salir de fiesta ...