Cincuenta y Cuatro🍃

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YoonGi estaba frente a los cuerpos de algunos rebeldes muertos. Y frente a él, el líder de ese grupo que les había provocado tanto dolor a las Manadas y a su propio Lobo.

YoonGi estaba en su forma animal, mirando al lobo frente suyo. Un Alfa pero que ni siquiera llegaba a sus talones en autoridad y dominio.
Ambos se miraban, retadores, gruñendo de vez en vez, pero ninguno atacaba.

- Tú eres el Alfa...- dijo con reproche y burla- Debiste proteger mejor a tu Omega, un Omega que debe cumplir con su única función, llevar cachorros de verdaderos Alfas...- el lobo rebelde se mofaba y miraba al Lobo de YoonGi.

YoonGi quiso gruñir, pero debido al lazo sabía que su Omega esta bien, sentía emoción y apoyo. Había escuchado un solo pedido de su Omega y ese había sido que regresara. Y YoonGi iba a cumplirle.

- Debo reconocer Min, que la forma de usar flechas envenenadas fue un desperdicio...- el otro se paseaba frente a YoonGi. La madrugada dejaba ver los primeros rayos del sol, pero aun siendo oscuro en muchas areas del bosque.- ¿Pero cómo iba a saber que tu pareja te salvaría la vida?...- ríe de manera escandolosa y burlandose- Jamás pudiste protegerlo, y eso me dejó mas Omegas...

YoonGi sentía como a sus patas y colmillos picaban por acabar con ese lobo. Pero sabía que solo estaba siendo provocado, habían alrededor de una veintena de lobos rebeldes esperando por atacarlo. Podía olerlos y ver sus formas a traves del aroma que destilaban.

- Dejaste que tus hijos murieran... es una lástima que en esta vida también tengas que abandonarlos- chasqueó la lengua y miró al Alfa frente suyo.- Nunca fuiste un lobo digno, el puesto de Líder de las Manadas siempre te quedó demasiado grande... ¿benevolencia? ¿es en serio Min?- el lobo se estaba enojando- Nunca aprendiste lo que un Alfa debe hacer... nunca supiste como doblar a todos ante tu poder, por eso la Luna les quitó sus dones...- YoonGi bufó.

Pero su Lobo sabía que eso no era cierto. La Luna solo esperaba por él, por su Omega, la Luna estuvo esperando que ambos volvieran y tomaran lo que les pertenecía por derecho legítimo... sus dones siempre estuvieron, nunca los habían perdido. Estaban allí, dormidos, esperando el llamado del verdadero Alfa Líder que volvería a unir las Manadas como una sola.

- De todas formas, vas a morir aquí- siguió hablando el lobo frente suyo.- Ese Omega esta vez estará con Alfas que realmente puedan dejar lobos fuertes y que tengan el poder de controlar a los débiles... a esos que tú, les mostrabas favor... es ridículo... ni siquiera deberías tener el nombre de Alfa...

- Te prohibo que menciones a mi Omega- dijo con voz dura. Sabiendo que había estremecido a los lobos que estaban a su alrededor intentando ocultarse de él.- El que nunca aprendió nada fuíste tú- escupé con superioridad- Debiste saberlo desde un principio, ¿no es cierto? Sabías perfectamente que yo sería el Alfa Líder... que el único Omega Líder era mi pareja predestinada... y eso ocasionó que te separaras de mis Manadas... ¿así pagas la misma benevolencia, de la cual te burlas, pero también recibiste? De no ser por mí, tu y los tuyos hubieran muerto hace mucho...

- ¡Callate!- el lobo rebelde dijo iracundo. Mirando con odio y furia a Min. YoonGi no se doblegó ante su voz de mando, el Lobo Alfa Líder se burló del lobo rebelde, pero sintiendo enojo por la forma en que había intentado humillarlo.

Cuando la pareja Líder nació en su primera vida, los padres del Alfa Líder Min recibieron en sus tierras a un grupo pequeño de lobos, que venían huyendo de regímens militares del norte, en las montañas heladas, y del occidente, donde abundaban las guerras. Mostrando compasión al saber lo dificil que habían sido los problemas de las demas regiones.
Así como la Manada Wang y la Manada Lee tuvieron su propio lugar, estos lobos lejanos y extranjeros también fueron aceptados en los territorios, mucho antes de que la pareja que murió en esa guerra naciera.

Error [YoonMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora