Cincuenta y Cinco🍁

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YoonGi jadeaba cansado. El Alfa Líder no se imaginó la emboscada que tendrían en el bosque, durante esa madrugada.
Sabía que LiHo no jugaría limpio.
Recurrió a sus facultades para poder sobrevivir, atravesando a los lobos rebeldes con púas de oro, que se extendian desde la tierra para atrevesar a cada bestia que intentaba acercarse...

Tenía varias heridas haciendo grandes manchas oscuras en su pelaje. Sin embargo, no se daría por vencido, no en esa vida...

Pero no era el único.

LiHo tenía parte del hocico destrozado y una gran mordida cerca del cuello, zarpazos y partes calvas en su pelaje. YoonGi daba movimientos certeros y directos. A diferencia de los lobos que atacaron buscando algún punto débil en el Lobo Líder. Los cuales en esos momentos se encontraban agonizando o muertos a su alrededor, YoonGi, sintió a su Lobo pedir disculpas a la Luna por matar tanto, pero dejaría de ser un Alfa digno de su Omega, sí permitía que mas atrocidades sucedieran.

- ¿Seguirás retándome?- YoonGi preguntó, mirando a LiHo que sangraba, el lobo Alfa no planeaba rendirse.

- Mientras peleas contra mí, uno de mis soldados está marcando a tu Omega y matando a tus cachorros...- mencionó, jugando su última carta, debía buscar la inestabilidad del Lobo frente suyo. El Alfa de YoonGi ni siquiera parecía afectado por la declaración dicha.

- Uno de los tuyos, llega acercarse a mi Omega y cachorros, y no vive para contarlo...- YoonGi dijo, confiaba en su ejército. Y su lazo le decía que todo estaba bien.- Puedes preguntarle a BaekHo, un gruñido y sale huyendo, porque no pueden enfrentarse a mí...

LiHo se tensó visiblemente. YoonGi no lo pasó por desapercibido. Llegó hasta LiHo para inmovizarlo entre sus patas.

- ¡Habla, maldita sea!- gruñó, haciendo temblar el perímetro a su alrededor. LiHo chilló de miedo en su forma animal, YoonGi conocía a BaekHo, debió esperarlo cuando lo envió a Busan para buscar al Omega elegido de los Park, omitiendo ese hecho, lo olvidó por completo.

El Omega de YoonGi, reconocería a BaekHo, y sí esa Omega les fallaba, estarían perdidos. Su plan, volvía a ser un fracaso.
Cuando en un pasado, decidió lanzar flechas envenenadas, no contaba con que el Omega de Min saltara a defenderlo, lo único que deseaba era matar a los hijos de YoonGi y al mismo, estaría cerca para marcar a JiMin y preservarle la vida, pero no contó con el valor y amor que le profesaba Park a Min, para LiHo los destinados eran solo un invento para atar a quien deseas. Y él deseaba desesperado ser la pareja del Omega Park.

- ¡Te he dicho que hables!- volvió a decir YoonGi, sintiendose molesto y airado, sus ojos convertidos en rojo dorado y un furioso hielo. Aunque su lazo estaba bien y su Omega se encontraba preocupado por él, YoonGi y su Alfa no lo razonaban por completo, iban a acabar con todo aquello que podría representar un peligro para su pareja y crías.

- BaekHo...- LiHo tenía que obedecer, la voz de mando de YoonGi superaba cualquier voluntad que tuviese. Detestó sentirse tan débil y vulnerable frente a YoonGi.- Él está...

YoonGi no lo pensó mucho, y gruñó de nuevo, acabando con la vida de LiHo. Siguió la estela de aromas dispersos y hubo uno que detectó, había crecido con ese aroma a su alrededor...

Se trataba de la que llamó madre en esa vida...

🍁

- Te equivocaste- le dijo molestó BaekHo, a la Omega, quien también estaba irritada y molesta.

- No es mi culpa- se defendió vagamente. Llevaban caminando por el bosque de Busan un buen tiempo, hasta que vieron a un grupo de Lobos correr a su alrededor y apenas y lograron escapar, el pelaje de los Lobos de cada Manada, era brillante a la luz, y su fuerza era notable en su forma animal.

Error [YoonMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora