¹ 𝗟𝗜𝗚𝗛𝗧𝗡𝗜𝗡𝗚 𝗥𝗢𝗗 | «los velocistas tienen seres queridos que actúan como un pararrayos para aterrizarlos o ayudarlos a escapar de la fuerza de velocidad y regresar a un punto determinado en el tiempo. en este caso, claire es el pararrayos...
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En medio de la madrugada, Claire sintió una ráfaga de aire golpear sus hombros desnudos. Se había quedado dormida media hora después de que Barry se fuera, y había olvidado cerrar la ventana, por lo cuál ahora estaba temblando como una hoja al estar solo cubierta por las sábanas.
El velocista curvo sus labios en una pequeña sonrisa, tomo las frazadas que estaban al final de la cama de la menor y la cubrió con ellas. Se arrodillo en el suelo, quedando cerca del rostro ajeno.
La observó, admirando cada detalle de su rostro. Lo único que le molestaba era no poder ver los hermosos ojos verdes que tanto le encantaban. Llevo una de sus manos hacia la derecha de Claire y la dejo a unos centímetros de la piel, viendo como pequeños rayos dorados salían de ella, y se cruzaban con los naranjas que salían de la suya. Era un verdadero espectáculo.
Y eso solo sucedía con ella.
Cuando entrelazó su mano con la contraría, un círculo de rayos rodearon sus manos.
━━Me es horriblemente difícil mantenerme alejado de ti, pero debo hacerlo..━━Musito, soltando una mano de la menor para llevarla hacia la mejilla derecha.━━..Al menos hasta que descubras quien soy.━━Su mano trazo una caricia en la piel ajena, yendo desde la mejilla hacia su frente, donde quitó el flequillo y lo colocó detrás de la oreja.━━Solo espero que no me odies, amor.
Se inclino unos centímetros y dejo un suave, y largo, beso sobre la frente de la velocista.
Claire se removió al sentir unos tacto suave contra su frente, abrió los ojos, pestañeando varias veces para adaptarse a la luz de noche, sin embargo, lo único que vio fue un borrón naranja.
Frunció las cejas, pensando en que aquella luz era igual a la que Barry tenía cuando corría, pero rápidamente descartó aquellos pensamientos.
Quizá solo había sido producto de su mente.
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A la mañana siguiente, Claire se despertó por culpa de un grito para nada masculino.
