Valiente.
Fuerte.
Irritante hasta la médula.
Testadura.
Llegó a mi vida a darme luz y a cambiar todo lo que pensaba y creía.
Llegó a mostrarme que existía un lado de esta vida de mierda que en realidad podría ser buena, pero también me destruyó po...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Jaden Tremblay.
Salgo de la mansión a paso rápido y veo a un Erik bastante impaciente.
—Joder, tardaste— dice soltando un bufido
—¿Qué quieres?— pregunto cabreado, estaba teniendo una buena tarde en cama con Jess.
—Josh está muerto.
Asiento como si fuera lo más normal del mundo, yo había ordenado que lo mataran a él y a Adam. Estaban siguiendo a Jess a todas partes y no me iba a arriesgar a que le hicieran cualquier cosa.
—Genial. Adam también, ¿No?— pregunto y la mueca que hace me provoca dolor de cabeza.
—No, Adam escapó.
Cálmate, Jaden.
—¿Cómo que escapó?— pregunto entre dientes.
—Escapó, el tipo es escurridizo, pero ya lo van a atrapar. Como bien dijiste, ellos no estaban trabajando para Verónica, aunque no me sorprendería que ahora Adam vuelva con ella, está solo.
—Lo quiero muerto.
—Yo sé, tranquilízate. Se hará lo que se pueda.
Asiento— ¿Eso era todo?
—No, están estos tipos de Colombia que...— comienza a explicarme unos problemas con unos tratos que tiene con unos narcotraficantes de Latinoamérica. Intento concentrarme en lo que quiere que haga, pero solo puedo pensar en Jess, al menos está lejos de Adam y de Verónica aquí adentro.
━━━━━━ ◦ ❖ ◦ ━━━━━━
Entro al gimnasio y veo a Jess entrenando con Leila, le está enseñando a boxear. Sonrío recordando aquellos tiempos en los que le enseñé hace unos años.
Jess se gira a verme, trae un crop corto deportivo negro que tiene un cierre en medio de sus pechos, lo que me hace pensar en lo fácil que sería quitárselo si la llevo a la habitación o si logro que Leila salga de aquí, también unos leggins con partes transparentes, igualmente de color negro. Se ve increíble. Siempre se ve increíble.
—¡Jessie me está enseñando a boxear!— dice Leila animada, iba a decir algo cuando Erik también entra al gimnasio, vinimos para tener una pequeña pelea de boxeo para entrenar.
—Hey, qué sex— decía Erik mirando a Leila, pero antes de que acabe de hablar le doy un codazo fuerte en el estómago con el que comienza a toser, con ello le recuerdo lo que le dije sobre molestar a Leila— Se ve usted muy presentable, señorita Leila.
