capítulo 8

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Escuchan como el vocalista de la orquesta anuncia un descanso de quince minutos, durante el cuál sonará música disco, para que los que lo deseen sigan bailando. Anuncia que el primer tema será un bolero del cantante venezolano Ricardo Montaner, llamado "Bésame"....Se van a sentar a la mesa, cuando Betty siente la mano firme de Armando en su brazo.

Armando.- Betty, por favor...¿querría bailar conmigo?, adoro esta canción...bailarla con Vd, sería como una fantasía hecha realidad...por favor...

Betty.- Doctor, no creo que sea bueno para ninguno de los dos...mejor lo dejamos...¿sí?...

Armando.- Betty...yo...yo se lo pido como un favor muy especial. Sé que no tengo derecho, pero esta noche es la mejor de mi vida, en mucho tiempo y si Vd quisiera bailar conmigo....me haría...me haría muy feliz...por favor...

Betty cree leer en sus ojos el amor, no puede ser, Armando no la ama...pero ella desea tanto ese baile, como parece desearlo él, y se dice a sí misma : "Betty, Carpe diem, aprovecha el momento" y asiente con la cabeza.

Armando la envuelve con sus brazos, y siente pegado a su cuerpo el calor de ella. Acaricia con delicadeza, con reverencia la piel de su espalda y cierra los ojos aspirando su aroma. Es tan feliz en esos momentos, que quisiera morir
allí mismo, para no tener ni un segundo más de vida, después de estos minutos de gloria.
Betty lo abraza fuertemente y deja reposar la cabeza en su pecho. No quiere pensar nada, solo quiere disfrutar, gozar y sentir...sentirlo junto a ella. Sus caricias por la espalda, la hacen estremecerse. El lo nota y la aprieta aún más contra él. Ella también se da cuenta como él tiembla entre sus brazos.

El tiempo, se detiene para ellos. Es un momento mágico, un instante de eternidad que ninguno de los dos quiere perder. Cuando la música acaba, aún permanecen abrazados meciéndose al ritmo de una canción, inaudible para el resto del mundo, una canción que solo ellos pueden escuchar. Armando no se puede contener, y suavemente la besa en el hueco que se forma entre el cuello y los hombros.

Armando.- ¡Gracias, mi vida!...¡gracias, te amo tanto!...

Betty se retira suavemente de él, y le pone un dedo sobre los labios :

Betty.- Pssss...calle...¿conoce la película "El club de los Poetas Muertos"?... Armando.- Sí...me gustó mucho
Betty.- "Fui a los bosques, porque quería vivir a conciencia, quería vivir a fondo y extraer todo el meollo a la vida. Olvidar todo lo que no fuera la vida, para no llegar a la muerte descubriendo que no había vivido"

Le toma la cara entre las manos y le da un suave beso en los labios : Betty.- "CARPE DIEM", Armando.... Aprovecha el momento. ooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo
Armando se siente tan feliz, que tiene ganas de gritar. Sabe que no han vuelto, que solo ha sido un baile -¡pero que baile!- y unas palabras. Pero está confiado en el futuro, ella todavía lo ama, no le guarda rencor y él esperará, esperará lo que haga falta. Le va a demostrar que ha cambiado, que es otro hombre.

Despues del bolero, la salsa, el merengue y el vallenato, invadieron la sala y
ya todos juntos salieron a bailar a la pista. Vaya como se movían Betty y Aura María. Armando y Freddy se las comían con los ojos, lo malo es que también se las comían otros hombres y esto molestaba profundamente al presidente y
al mensajero. Betty en un momento se lo comentó a Aura María, y las dos siguieron bailando seductoramente, pero sin dejar de mirar y sonreír a sus hombres.

Freddy y Aura María, no se aguantaron y se marcharon juntos a terminar la fiesta en otro sitio. Betty siguió bailándole a Armando un buen rato, hasta que
él, que estaba a punto de estallar, la tomó por la cintura y le dijo al oído :

Armando.- Doctora, no sea cruel conmigo...porque me va a volver loco. Ande vamos a sentarnos ¿por favor?...

Betty lo martiriza un poco más, mandándolo a la mesa solo. Hasta que uno de aquellos hombres empezó a molestarla. Ella se quiso retirar pero el tipo se puso pesado y la agarró por el brazo. Armando se levantó airado pero entonces se oyó una sonora bofetada. Betty le había cruzado la cara a aquél tipo, el cual, enojado por la humillación, la quiso abrazar...Armando ya llegaba hasta Betty, dispuesto a partirle la cara, cuando observó asombrado, que el hombre se doblaba de dolor, sobre sí mismo y caía al suelo gimiendo.

Armando.- Betty ¿está bien?...¿le hizo daño ese cerdo?...

Betty.- Sí doctor, estoy bien...más daño le hice yo...oj,oj,oj...creo que se va a guardar de molestar a otra mujer en una temporada.

Armando.- ¿Qué le hizo?...

Betty.- Le dí bien fuerte con la rodilla...justo en ese lugar tan sensible, que tienen Vds....entre las piernas...oj,oj,oj...

Armando, le sonríe y con carita de dolor exclama :

Armando.- ¡¡Uuuuyyyyyy!!...¡¡qué peligro tiene Vd doctora!!

Al cabo de un rato deciden marcharse, porque es tarde y al día siguiente hay trabajo. Lo han pasado tan bien, que todos ríen relajados y sonrientes.

Guillermo tiene un pequeño utilitario y se ofrece a llevar a Sofía, Berta e Inesita, ellas viven por la misma zona que él. Mariana, Sandra y Wilson toman un taxi, y Betty se dispone a coger otro. Por la noche no acostumbra a usar la moto, le da algo de miedo.

Armando.- Betty yo la llevo...

Betty.- Ni más faltaba, yo tomo un taxi...

Armando.- No sea terca, Betty, vamos para el mismo sitio...

Betty.- Ni que lo piense doctor, yo no voy con Vd a ningún lado, yo me voy a mi casa...

Armando.- Perdone es que me he explicado mal...Yo también voy para mi
casa, solo que Vd se ha mudado al ático que hay justo al lado del mío...Somos vecinos Betty...La vi a la puerta de la casa el otro día, pero estaba de espaldas y solo pude ver el casco de la moto. Esta mañana cuando entró a la sala de Juntas, me di cuenta que era Vd.

Betty.- ¡¡¡¡Noooo, Dios mío!!!!...pero que tino tengo, ocho millones de personas en Bogotá, más de treinta apartamentos visitados, y me vengo a encaprichar del que está justo al lado del suyo.....yo le juro don Armando, que no sabía que Vd vivía allí... mañana mismo empiezo a buscar de nuevo....

Armando.- ¿Tanto le molesta que seamos vecinos?......yo no voy a molestarla, se lo prometo...además si se va, perderá la fianza del alquiler...y eso es mucha plata...

Betty.- ¡¡¡Aaaayyy...!!! (suspiro)...que se le va hacer...Ande vamos para casa, que estos zapatos me están matando...

Armando, muy sonriente le abre la puerta del coche :

Doctor mendoza yo no soy  asíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora