Quiero Negociar |DS#2|

Capitulo dieciocho | Tradiciones

Capitulo dieciocho.

Alessio

29 de enero, 2017.

Miro en silencio la suave mueca que se apodera del rostro de Cassandra una vez que la aguja atraviesa su piel. Poco a poco creo que se va acostumbrando, de igual forma no debe ser nada indoloros que te inyecten directamente en la parte baja del abdomen.

Una vez que veo como posan un pequeño algodón contra su piel, me aparto para buscar mi cartera. Intento escucharlas indicaciones de la enfermera, mientras busco su dinero. No son diferentes a todas las anteriores, así que no me preocupan.

Veo la imagen de Cassandra recostada en la sala por última vez antes de acompañar a la mujer al ascensor. Me despido con educación antes de volver con la mujer que en los últimos días ha invadido mi vida sin tener que hacer mucho.

—Agregamos otro bonito moratón a la colección—la escucho murmurar apenas la veo.

Los pequeños moratones que se forman en su abdomen bajo se van con rapidez a los pocos días, sin embargo, al ser un medicamento continuo, la marcas nunca terminan de desaparecer, algo que al parecer Cassandra no parecía apreciar mucho.

—Hay que sacarles una foto—digo acercándome, enseguida sus brillosos ojos me miran—. En un futuro debemos mostrarle a nuestro hijo, todo lo que batallaste para tenerlo.

Mis palabras le sacan una leve sonrisa, pero no dice nada al respecto. Nunca antes hubiera pensando en Cassandra como una persona pesimista, más bien, siempre la vi de otro modo. Pero con este tema, ella parecía desearlo tanto y a la ves estaba muy resignada a no esperar nada.

Es un lindo día, domingo. Sin embargo, desde que hemos entrado al piso, evitamos salir, no es algo que por ahora nos hubieran prohibido. Pero en un pequeño descuido, de mi parte, no protegí bien la privacidad de Cassandra, por lo tanto, ahora las redes y los programas de TV estaban repletos de las fotos de nosotros entrando al edificio. Miles de conjeturas salían a la luz cada día y el hecho de que ella no se haya dejado volver a ver en público, causa mucho más furor.

Aunque estoy trabajando para detener toda esta avalancha de murmuraciones, no es algo que pueda hacer al 100%. El mundo era libre de expresar lo que quisiera.

Tomo la pequeña botella de agua que hay en una de las mesillas y se la alcanzo. Cuando la toma, me siento a su lado, la doctora me había especificado que una de las principales cosas que debía asegurarme, era mantenerla nutrida e hidratada.

Saco mi móvil cuando lo siento vibrar por séptima vez en la tarde, mañana tendría que hacer varios viajes que venía posponiendo durante estos días. Aunque sé que la salud de Cassandra es la mejor, no deseaba dejarla sola entre estas cuatro paredes.

Una pequeña idea se cola en mi mente y es la que ha estado ahí durante días, la considero, aunque no tanto al momento que veo como ella se estira a tomar su móvil y revisarlo, al igual que otras veces, ve todo y termina apagándolo con una expresión de derrota. Desilusión.