Capitulo siete.
Cassandra
29 de noviembre, 2016.
—¿Se encuentra bien señorita?
Aunque escucho la pregunta de mi chofer, no la respondo, en cambio dejo de darme la cabeza contra el asiento de enfrente y me siento bien contra el respaldar del automóvil. Estamos cruzando la cuidad yendo a mi hotel.
¿Estaba bien?
Bien, enumeremos. Tenía un dolor horrible que casi partía mi cabeza en dos. El maldito niño me las pagaría cuando lo volviera a ver, nunca había tomado algo tan fuerte y menos en una fiesta de esta categoría donde estaba muy expuesta a la sociedad, a los comentarios y a hacer posibles cagadas que me costarían muy caro. Exactamente como la que había hecho. Verdaderamente cuando me desperté por la voz de alguna mujer, lo último que esperaba era abrir mis ojos y ver a la anfitriona de la fiesta viéndome las tetas. Sin agregar que el pequeño cumpleañero estaba ahí, aunque bueno supongo que él estará acostumbrado a ver los senos de su madre.
Dios, ya estoy divagando.
Conocía mi propio cuerpo más que nadie, aún más que cualquiera, así que solo tuve que estar muy despierta para sentir la sensación entre mis piernas. Había tenido sexo. Bien, eso no sería algo malo, de hecho, era algo que practicaba con regularidad y no por eso me hacía sentir mal.
El tema era que quien despertó a mi lado, no era la persona adecuada en el momento exacto.
Alessio.
Hasta el momento era desconocido para mí, las circunstancias en las cuales llegamos a la cama, pero esperaba y rogaba a todos los cielos, que hubiera sido algo muy consciente de su parte. Porque de lo contrario, conocía muy bien a los hombres como él. Que en momento así se sentían "usados", hombres demasiados orgullosos para su propio bien, que seguramente buscaran la forma de cobrárselas.
Y yo, en este momento de mi vida no estaba para lidiar con tan exquisito bocadillo odiándome.
Si, estaba bien.
Además, el cansancio y satisfacción que estaba instalado en mi cuerpo era lo suficientemente necesario para hacerme saber que había sido una noche más que interesante, solo querría recordar los detalles.
No todos los días una se podía involucrar con Alessio.
* * *
02 de diciembre, 2016.
Solté las prendas que sostenía en mis manos cuando las dependientas que me atendían me dejaron y enseguida se empezaron a escuchar llamados a mi persona.
—¡Cass! ¡Cass!
No pude ni tener la oportunidad de hacer tranquilamente mi expresión de fastidio, cuando ya tenía a dos mujeres riendo a mis espaldas. Respire hondo poniendo la mejor sonrisa que podía darles, antes de mirarlas.
ESTÁS LEYENDO
Quiero Negociar |DS#2|
ChickLitDos personas tan diferentes como semejantes, polos opuestos unidos en una sola dirección: Odiarse. ¿Qué puede llegar a suceder? Fiesta, bebidas y una noche apasionada te lo dirán. "Disculpe señor, quiero negociar"