El primer torneo de Quidditch interescolar está por presentarse, por lo tanto las seis escuelas de magia que participaran deberán llevar a sus mejores jugadores al torneo.
Hogwarts siendo una de las escuelas participantes enviara a los mejores jugad...
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― ¡Jimin!
Jimin se giró a ver a Jungkook.
― ¿Podemos hablar? ― le pregunto esperando alguna negativa de su parte. Sin embargo, Jimin asintió para mirar a sus amigos de Hufflepuff.
― ¿Los veo luego? ― les pregunto Jimin.
― ¡Suerte! Esperamos que ganen ― comento un chico y los otros dos también les desearon lo mejor. Jimin y Jungkook respondieron agradecidos antes de verlos alejarse.
― ¿Qué querias hablar? ― le pregunta Jimin, cargando con su bolso y su escoba ― ¿Me lo sostienes?
Jungkook sostuvo la escoba de Jimin mientras este se colocaba los guantes.
― Solo bueno, te he sentido muy alejado ― explico Jungkook, mordiendo su labio ― ¿Paso algo? ¿Hice algo?
Jimin resoplo antes de tomar su escoba, agradeciéndolo a Jungkook.
― Deberíamos dejar la plática para despues del partido, no quiero que nos distraigamos ― comento Jimin, haciendo un puchero al abultar sus labios.
― Creo que es mejor que hablemos ahora ― le dice Jungkook, tomándolo del codo cuando Jimin estaba por irse ― ¿Qué pasa?
Jimin sabía que no podría deshacerse de Jungkook, por eso lo tomo de la manga de su suéter jalándolo por un pasillo solitario.
― Lo que pasa es que he sentido tanta vergüenza ― confiesa Jimin, soltando un gruñido de frustración ―. Desde que todo mundo se enteró de que me gustan los hombres yo quise tomar distancia con todos los que me rodean, aún más con los hombres que puedan mal pensar las cosas.
― ¿Lo dices por mí? ― pregunto Jungkook, abriendo grande los ojos ―. Espera ¿Te gusto?
La risa de Jimin salió tan sarcástica que cualquiera entendería que fue sarcasmo.
― Jungkook ¿Cómo puedes pensar que a alguien no le gustarías? Mírate, eres inteligente, un increíble atleta y bastante apuesto. No quería que las cosas cambiaran con nosotros, sí, me gustas, pero no quiero arruinar la amistad que tenemos que decidí alejarme. Tanto tú como yo hemos tenido miedo durante suficiente tiempo y ya me canse de siempre esconder lo que siento. Por eso te confieso esto, pero por favor, no te alejes de mí. Ignora mi confesión y hagamos como si nada hubiera pasado ¿Puedes?
Los ojos de Jimin brillaron intensamente, esperando una respuesta que no le destrozara su corazón. Jungkook tuvo que aclararse la garganta para no balbucear estupideces.
― No sé qué decirte, no esperaba esta confesión ― le dijo Jungkook, negando con la cabeza. Jimin bufeo quitándole a Jungkook la cinta negra que traía enrollada en su muñeca para atarse su cabello.
