Capítulo veintiuno: Cartas a nuestro favor

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(Subdirectora) Madre Gloria's pov.


30 de Abril, me desperté temprano por la mañana, eran casi las 5:30 de la mañana, aún estaba todo oscuro pero por suerte la situación de los diluvios había disminuido.


- Paz y bien Inés.

- Paz y bien hermana Gloria.

- ¿Cómo se siente?.

- Bien, aunque con un poco de frío.

- Ah... este clima es de locos quien se imaginaría que a menos de mitad de año ya tenemos estos cambios tan repentinos.

- Y sí, hace 2 meses ya nos moríamos de calor.

- Que curiosa es la vida... bueno, yo tengo una reunión en algunas horas así que la dejo.

- ¿No estará en la oración de bienvenida?.

- Claro que estaré, solo me retiraré para hacer algunos preparativos.

- Mmm, ya veo, bueno, hasta luego.

- Paz y bien, oh, y por cierto, dígale a la hermana Alicia que hable con Angie para que vean cómo pueden hacer con el tema de pastoral.

- ¿Qué pasó en pastoral?.

- Oh, pensé que lo sabía.

- No, no me he enterado.

- Parece que hubo un incidente con nifra, pensaron que se iba a cancelar por jufra pero esas son solo cosas que Dios sabrá de donde las sacaron.

- Mmm, que raro, bueno, ya le diré.

- Muchas gracias.

- Un placer.


Y apenas terminé de hablar con Inés, salí de la casa y me dirigí a mi oficina a preparar cualquier cosa que vaya a necesitar Violetta para conectar la cinta de video y de paso limpiarla un poco debido a que tenía polvo.


- Oh padre amado, danos sabiduría. Exclamé con la escoba en la mano mientras veía un cuadro de Jesús crucificado en la cruz. - Que hoy se haga tu voluntad, amén. Y después de terminar de barrer un poco, me fijé en la hora y ya eran las 6:58, por lo que decidí llamar a Violetta.


(Llamada entre miss Violetta y la madre subdirectora)


- Violetta.

- Hermana Gloria, paz y bien, buenos días.

- Igualmente, ¿En dónde estás?.

- Estoy llegando al colegio.

- Hmm, ¿Y esa cara? ¿Pasó algo?.

- Mmm no, hasta ahora no.

- Eh... de acuerdo, conduzca con cuidado, nos vemos en el colegio.

- ¿A qué hora es nuestra reunión?.

- Me parece que debería ser a partir de las 12 del mediodía.

- ¿Por que tan tarde? Solo si se puede saber.

- María Antonieta y yo tenemos una reunión con los acreditadores de México hasta las 11:30.

- Entiendo, entiendo, no se preocupe.

- Bien, gracias, más bien ¿Quién es el culpable?.

- Prefiero que lo vea por usted misma, yo aún no lo puedo creer.

- Hmm, de acuerdo, supongo que debe ser algo grave para que lo diga así.

SOS, estudiante [Primera parte]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora