SOS, estudiante [Primera parte]

Capítulo treinta y uno: Controla lo que dices

Los días pasaban, el clima cada vez se hacía más cálido y agradable, Martes 13 de Agosto... según creencias, día de mala suerte, claro que nada estaba predicho, pero era bastante popular como para ser ignorada.

- Hijo, levántate.

- No quiero ir al colegio.

- ¿Por que no?.

- Es aburrido, y además hoy entreno.

- Sí, por eso con mayor razón debes ir.

- Por favor, solo por hoy.

- ¿Ha pasado algo en el colegio, Rodrigo?.

- No, nada.

- Entonces, ¿Cuál es el problema?.

- Tengo sueño.

- Te dije que te durmieras más temprano.

- Pero no tenía sueño.

- Pero ahora sí lo tienes, ¿Ves?.

- Que pase un día no significa que vaya a pasar todos los días lo mismo.

- Sí, sí, como digas, sube a la movilidad.

- ¿Ya está aquí?.

- Sí, cámbiate rápido que le tuve que pedir que te esperaran un poco.

- Ah, bueno.

- Igual ya estás llegando tarde entre que recogen a los otros niños.

- Nah, ya fue pues.

Y en su mismo salón se encontraban Jimena, Thiago y Andrea conversando.

- ¿Y chicos? ¿Qué opinan?.

- Ah, Jime, sí quisiera ir a la reunión de tu cumpleaños, pero no puedo, estaré en Cusco por un asunto familiar, lo siento.

- Uh, es una lástima, bueno, conmigo sí cuentas, Jimena.

- Gracias Thiago y no te preocupes Vistima, aún nos quedan muchas reuniones más.

- Gracias por comprender.

- Bien, entonces en un mes será.

- ¿Un mes? ¿Tanto tiempo de anticipación?. Le preguntó Thiago.

- Sí, bueno quería asegurarme de que todos tuviesen tiempo, así no hacen planes para esa fecha.

- Mmm, Sábado 7, sí, sí puedo, bueno, es decir, pensé que lo celebrarías el 10.

- Ah, quería pero es día de semana.

- Em, chicos, yo ya tengo que irme a mi salón, nos vemos.

- Bye.

Y al otro lado del pasillo estaban Matias y Fernanda hablando, o bueno, más bien hablando mal de Amalia.

- Claro que sí, ya es la segunda vez que me dice que no me junte con Larisa.

- ¿Y eso por que?.

- Solamente porque está con Nicolás.

- Ah, Amalia, ¿Desde cuándo tan pesada?.

- Desde el día en el que la conocimos, eso sin contar como jode a Adriana cuando está en el salón solamente por haber sido la mejor amiga de Renzo y que bueno... después haya pasado todo esto creo que le hace desconfiar un poco de Adriana.

- Mmm...

- Oye.

- ¿Qué?.

- ¿Y si Adriana fue la alumna que besó Renzo?.