SOS, estudiante [Primera parte]

Capítulo cuatro: Sacrificios necesarios

Larisa's pov

Me levanté temprano, de hecho, creo que hubiera querido dormir un poco más, y bueno... tenía motivos, eran las 5:30 de la mañana, tendría que alistarme antes de que mi hermano me llevara al colegio, desayuné lo más rápido que pude y bajé rápidamente.

- Lari.

- ¿Qué pasó?.

- ¿No se te olvida algo?. Preguntó viéndome por el espejo retrovisor.

- Emm... creo que no.

- Empieza con "T".

- ¡Mi teléfono!.

- Jaja.

- ¿Crees que podríamos volver por favor? Serán solo 5 minutos.

- No te preocupes, sabía que lo ibas a olvidar así que lo agarré primero, toma. Me dijo estirando su mano con mi teléfono en ella.

- Gracias.

- De nada, que disfrutes tu día.

- ¿Quién me recogerá después de atletismo?.

- Hablé con mi papá, creo que lo hará él.

- Bien.

- Cuídate. Me dijo después de quitarle el seguro a la puerta.

Cuando bajé del auto me encontré con Valentina Panduro en la puerta del colegio, estaba conversando con Dalezka así que decidí no interrumpirlas.

- ¡Lari!.

- Hola Vale.

- ¿Vamos al salón?.

- Emm... sí.

- Tengo varias cosas que contarte. Me dijo mientras nos acercábamos a las escaleras.

- ¿Cómo así?.

- Mira, primero que todo, tú sabes que nuestra tutora le enseña inglés a todo el grado menos a nosotros ¿Verdad?.

- Ajá...

- Pues, hoy nos toca tutoría con ella, en realidad, hoy le toca a tutoría a todo 6to en la misma hora y además de eso antes de tutoría tenemos comunicación con la miss Gina y después recreo, de verdad que tenemos el mejor horario del grado.

- Wow, no me había dado cuenta de eso.

- ¿Qué no alistaste tu mochila?.

- Sí lo hice pero estaba cansada así que solo metí los cursos que vi en mi horario.

- Y eso que ayer fue horario recortado, ¿A pesar de eso te quedarás a entrenar atletismo?.

- Sí, de hecho empiezo hoy.

- Estarás más cansada de lo normal.

- Será un pequeño sacrificio, además, no estoy cansada por eso.

- ¿Entonces por que?.

- Me quedé conversando con un amigo hasta casi las 12.

- ¿Con Nicolás?. Me empezó a molestar ella, siempre le gustaba molestarme con él, no era algo que me gustase pero tampoco me incomodaba.

- ¿Acaso no puedo tener otros amigos hombres que no sean él?.

- Bueno, si quieres engañarte a ti misma, adelante.

- Estaba hablando con Matias.

- Oh, entonces la cosa es con Matias.

- ¿No entiend-.