'di nuovo tu?' ─yeonkai.

39. La mia libido (II)

yj.

—No se estresen demasiado ¿Entendido? Queremos vernos lo mas naturales posibles en esta presentación... —Namjoon se aplicaba delineador mientras como buen líder soltaba palabras tratando de animarnos, solté un suspiro pesado, de un momento a otro me encontraba nervioso, si esta noche resultaba todo bien y si llamaba la atención de algunos de esos peces gordos, podría al fin dejar la tediosa universidad y dedicarme a lo que realmente me gustaba.

Estaba frente a la oportunidad de mi vida, esperaba no cagarla.

—No necesitas decirnos eso a nosotros... —Soltó Jin, echando miradas inquisitivas hacia Jungkook, este rodo los ojos. Yoongi en una esquina observaba todo sin rechistar, sin expresión que delatase lo que por su mente pasaba.

Desde aquella noche en este mismo bar, había tensión entre los tres; Seokjin, Jungkook y Yoongi, en especial de estos dos primeros, ambos por igual se ignoraban descaradamente, a pesar de eso, no podían evitar soltar risas sarcásticas cuando el otro hablaba, o de echarse miradas desafiantes, Yoongi no interferia cuando chocaban entre sí, es mas, él los ignoraba a ambos por igual. Incluso si estos trataban de iniciar algo con ambos.

Era gracioso observar todo, Namjoon tampoco interferia, él simplemente también callaba y rodaba los ojos ante lo ridículo que ambos eran al pelearse por Yoongi.

—Como sea, he estado pensando... que luego de esta noche deberíamos tomarnos caminos separados —Yoongi se puso de pie, mirando a los ojos a Namjoon—Nos llevamos como la mierda, y si alguno de nosotros consiguiese una oportunidad con los grandes de Luisiana, este grupo seria un atraso.

Namjoon y yo asentimos, aunque no fuese el momento para decirlo, en el fondo, todos ya lo sospechábamos, Jungkook y Jin miraban al baterista con una expresión de espanto, seguidamente ambos empezaron a soltar sus quejas y oposiciones. Los tres restantes en la habitación, obvio sabíamos la razón por la cual los dos estaban oponiéndose a la disolución. Y el motivo obviamente era Yoongi, el grupo y las tardes de ensayo para ambos era una excusa para venir a ver a Yoongi, y éste lo sabia.

—¡Suficiente! —Namjoon se puso de pie—No es el momento para esto —se interpuso entre ambos—Tenemos una presentación enseguida, mejor prepárense, y luego de terminar, lo hablamos entre todos en la fiesta ¿De acuerdo?.

Solte un suspiro, me di la vuelta y salí del camerino, en el pasillo me encontre con Soobin y Woozi, ambos reían animadamente, cuando me vieron salir se abalanzaron hacia mí, haciéndome preguntas y exclamando un montón de otras cosas. Sonreí, negue y los aparte de mí.

—¿Por que te pusiste eso? —Woozi me observo de arriba a abajo, sus ojos se iluminaron al ver mi melena.

Anticipe lo que iba a decir y me adelante a decir;

—Ni una sola palabra sobre mi cabello, ya sé que no tengo la media coleta.

—¿Qué te hizo soltártelo? —pregunto risueño.

—Fue idea de Beomgyu —me excuse.

—El vestuario también lo fue.

Woozi me miro espantado.

—¿Por que dejas que el te elija el vestuario? Suerte no se le fue de las manos y terminabas vestido de un cosplay de Lady Gaga —Soobin se carcajeo, yo le dedique una mirada exhaustiva al enano—Igual he de admitir que te ves bien,

—¿Donde esta Beomgyu? —pregunte extrañado, ya cambiando de tema.

—Enseguida viene, dijo que tenia terminar algo antes de venir.

—¿Que hacen ustedes afuera del camerino? ¿No les dije que esperasen en la barra?.

—Lo dijiste, pero no te hicimos caso, como puedes ver.

—Nos estábamos aburriendo —Woozi se encogió de hombros.

Solte un suspiro—Como sea... —Empecé a caminar hacia la donde multitud se encontraba, siendo seguido por ambos.

—¿A donde vas?

—A tomar algo, lo necesito.

Al llegar en el gentio me dirigi a la barra a donde Nayeon atendia, con la cabeza gacha, y la espalda erguida sobre la mesa, Soobin y Woozi se situaron a mi lado.

—Hicieron un buen trabajo con las luces.

—Gracias... —Levantamos la vista hacia el chico que había hablado del otro lado de la barra, extrañados al ver a Jaehyung atendiendo, incluso tenia el delantal que Brian había mandado a hacer para el evento exclusivamente para los empleados—... Costo mucho—El rubio se quedo mirando hacia las luces en cuestión—Como sea... ¿Que les voy a servir, caballeros?.

—Voy a pedir eso de ahí —dijo Woozi señalando hacia el cartel de cocteles, Jaehyung tomo nota.

Soobin solto una risa—Ni siquiera sabes lo que es.

Woozi le dio una palmada en el brazo—Cállate.

A continuación, Soobin hizo su pedido, a lo que Woozi repitió lo mismo que él había dicho, Soobin se carcajeo sarcasticamente.

—Si sé lo que es, solo que nunca lo probé, a diferencia de ti, que ni siquiera el nombre se sabia...

Jaehyung los ignoro después de anotar el pedido de Soobin, y me apunto con el bolígrafo, inquisitivo.

—¿Cuál me recomiendas?

—Luces estresado, yo iria por un buen ron en vez de un simple coctel frutal, o un energizante, ya que escuche que te vas a presentar de cabecilla con tu grupo.

—Dame el energizante, por favor.

Se dio la vuelta entregando la libreta a Dowoon, quien también se encontraba trabajando en la barra, ya que también portaba uno de los delantales. El rubio volvió a voltearse hacia mi dirección con una lata de energizante en la mano, me lo entrego.

—Gracias...

—Como gustes.

—¿Qué sucedió con Nayeon? ¿Ella no atendia en esta barra?

El rubio asintió, mientras desenvolvia un chupetín para llevárselo a la boca y decir;

—Surgió algo urgente en ultimo momento, algo grave, según dicen, honestamente no lo sé. Se supone que yo debería estar en la entrada, verificando de que todos los que entren tengan la entrada, pero Younghyun me envio aquí.

—¿Y quien quedo como supervisor en la entrada?

—Younghyun, creo que lo esta disfrutando, tiene compañía después de todo.

—¡Hey, tú! Estoy sentado aquí desde hace rato... —Mi espalda se tenso, debido a la musica alta, no pude estar seguro, pero aquella voz...

Jaehyung se apresuro a dirigirse hacia el sujeto—Ya, ya...

De reojo y con disimulo trate de mirar, con la cabeza gacha, tratando de esconder mis ojos con la sombra que hacían las mechas despeinadas colgando en mi cara.

Maldición.

Sí, aquella voz pertenecía al enano pelirrojo y claro, como no, a su lado, se encontraba sentado Hueningkai, con una sonrisa tensa en el rostro, él podría simplemente no sonreír, pero lo estaba haciendo, que fastidio. ¿Cuándo fue que estos dos llegaron? ¿Y por que están sentados aquí, habiendo tantas barras? ¿Acaso no ven que yo estoy aquí? ¿Acaso ya no van a huir cada que se topaban conmigo?.

Hueningkai clavó su mirada en mi, él parecía haber escuvhado lo que mi mente susurraba con tanto desdén, decidi mirarle directamente, sin cabello que cubriera mi rostro, su expresión no parecia estar sorprendido de verme a tan solo tres taburetes de distancia, es más, él parecía estar esperando el momento perfecto para mirarme.

¿Qué es lo que sucedía? ¿Jugará al valiente, me confrontará para luego ponerse a llorar por qué no puede manejar la situación?. Sonreí de lado, él apartó la vista inmediatamente.

Mi sonrisa se ensanchó.