'di nuovo tu?' ─yeonkai.

58. Amami o lasciami stanotte.

Yj.

El cumpleaños de Hueningkai había llegado más rápido de lo que quería, desde esa noche, Soobin había decidido que tomaría las riendas del asunto, había proclamado que está noche iríamos a la casa de Hueningkai, realmente no quería hacerlo, y no iba a hacerlo, me negaba, antes de que Soobin llegase a mi casa, me prepare para salir. No iba a ir a la universidad, me negaba, iría por ahí, a hacer cualquier cosa hasta que la media noche caiga sobre Seúl.

Cualquier cosa que me distraiga de la realidad.

Me colgué la guitarra al hombro y me fui. De camino pase por una tienda, me compre dos paquetes de cigarros, de los más baratos posibles y un encendedor. Me fumaría cada uno de estos cigarros lentamente, y no volvería a casa hasta que no termine las cajas. La ciudad, en especial en la autopista principal, estaba tan caótica como siempre, hacía calor, y no había ni una miserable nube en el cielo.

No era muy fanático de días así, pero tampoco me importaba mucho.

Despues de veinte minutos caminado, termine en los pies de un edificio en el cual jamás pensé que volvería. Entre a la recepción, y cómo de costumbre no había nadie, pero tampoco era necesario, ya conocía el lugar, así que sin darle más vueltas subí al tercer piso por las escaleras, ya que el ascensor no era muy seguro, cuando por fin subí los últimos escalones, fui directo a la tercera puerta del pasillo y toque. Realmente me esperaba que nadie me recibiera, pero para mi sorpresa no fue así, del otro lado apareció Jungkook.

Se notaba muy demacrado y cansado, pero igualmente se tomo la molestia de molestar, aún sin dejarme entrar.

─Pero miren que tenemos aquí, si es el mismo Choi Yeonjun, la futura estrella en ascenso, la nueva promesa musical...

Le interrumpí, harto de su tono condescendiente ─¿Me dejas pasar o no?

Pareció pensarlo bastante, luego se encogió de hombros y me hizo espacio para pasar. Camine hasta adentro y lo primero que me recibió es el fuerte olor a alcohol barato y vómito seco.

─Lamento el desorden, pero realmente no estoy en mi mejor momento como para perder el tiempo limpiando...

─No te preocupes... ─dije irónicamente, el lugar estaba lejos de ser sólo desordenado, se asemejaba a un vertedero de basura, había comida podrida en envases de plástico en las esquinas, algunos muebles estaban rotos o directamente tirados en el suelo sin más, había ropa sucia en cada sección del piso, y cómo plus, encima de las pilas de ropa sucia o había vómito de semanas o botellas vacías de soju barato.

En cuanto a Jungkook, él no estaba mejor, su estaba ropa sucia, había dejado de cortarse el cabello y ahora lo tenía a la altura de los hombros al igual que yo, pero este se notaba grasoso y obviamente sucio, tenía ojeras moradas casi como si fuesen a doler como moratones, estaba pálido y más delgado que la última vez lo había visto.

─¿Qué mierda te paso? ─Solté mientra veía como él liberaba un sillón de toda su ropa sucia y la tiraba al piso junto al resto de ropa sucia. 

Me senté en el asiento que había liberado para mi y deje el estuche de mi guitarra a un lado, observando como Jeon se tiraba en el sofá y tomaba la botella verde de soju que había en este, se lo acercó a los labios y se lo bebió de un trago lo que en este sobraba.

Ni siquiera yo llegué a este estado tan deplorable.

─¿Es necesario que lo explique? No quiero hablar del tema─Se colocó el antebrazo en el rostro casi como si le doliera la luz.

Yoongi. No me sorprendía pero honestamente me espanta su estado.

No dije nada, y me quite los zapatos.