'di nuovo tu?' ─yeonkai.

51. mi hai fatto odiare.

Hk.

Esa tarde, Soobin me había seguido hasta mi casa y no fue hasta que después de mantener una muy incómoda conversación en la puerta por unos seis minutos, que lo dejé pasar y una vez adentro insistió en que debería ayudarme a elegir la guitarra. En el fondo me parecía que estaba más que nada desconfiado de que yo fuera a cumplir con mi parte del trato y la razón por la que hacía eso era para asegurarse de que yo cumpliera.

Me sentí algo ofendido por lo que mantuve una actitud bastante hostil la mayor parte del tiempo en el que Choi se mantuvo dentro de mi casa. Me pregunté si no tenía mejores cosas para hacer, ir a jugar ese aburrido deporte en el que te deslizabas por el hielo con un bastón o lo que sea que hiciera él en su tiempo libre. Estudiar para los exámenes o algo.

Al final, termine pidiendo la guitarra que más me gustaba a mí aunque no supiera nada de estas. Él se fue luego de asegurar que realmente lo hice. Estuvo detrás de mí mientras yo navegaba en la página de la cual ordene la guitarra.

Hizo un par de chistes sobres los posters de One Direction que tenía en mi habitación y luego se fue. Solté un suspiro y me tiré en el sofá cansado de todo.

Cerré los ojos un momento para despejar mi mente, mi teléfono entonces interrumpio el momento, abrí un ojo para ver dónde se encontraba, alguien me llamaba, extendí mi brazo para tomarlo y atendí. Supuse que sería mi papá, o alguien de mi familia llamando para preguntar qué tal todo.

—Hey Hueningkai ¿Cómo va todo por allá? —la voz de Christopher sonó a través del altavoz del móvil, sonreí cansado, tenía los ojos cerrados y estábamos a millones de kilómetros de distancia pero estaba tan seguro de que el estaría riendo ahora—Llamaba para hablar ¿Tienes tiempo?.

—Claro que sí, nunca me pasa nada interesante, por supuesto tengo tiempo de sobra... —Mentí, obviamente, podría simplemente decirle todo para ponerlo al día de lo que pasaba en mi vida y sacar conversación de paso, pero sentía que era algo que tendría que contar en persona.

—¿Seguro? —Capté de inmediato su intención de indagar, él no creía eso de "nunca me pasa nada interesante'' quizás yo no era bueno para mentir, o también era muy fácil de leer para él, fácil de interpretar, si era fácil de manipular y manejar para todo el mundo ¿Por qué, Christopher, una de las personas más importantes en mi vida no podría deducir con tanta facilidad cuando mis palabras no eran sinceras?.

Me quedé en silencio un momento, dudando—Sí, seguro —respondí guiándome por aquella voz que insistía en mantener la discreción hasta que nos volviésemos a ver en persona.

Luego de eso, la conversación siguió de manera fluida, él me contó cómo iban las cosas por allá, también me dijo que vendría dentro de unos días por mi cumpleaños a visitarme y pasar unas cuantas noches aquí, no especificó que día exactamente vendría, lo cual me tuvo ansioso luego de colgar la llamada, toda la noche, la mañana siguiente también pensé en eso, en clases, no pude evitar no pensar en ello unas cuantas veces, finalmente frustrado, en el descanso, le escribí un mensaje, preguntándole directamente.

Él no respondió, todo lo que restaba del día tampoco lo hizo.

Luego me sentí estúpido, al caer en cuenta de que claro que no respondería, él estaría durmiendo.

Igualmente eso no calmo mi ansiedad.

...

Yj.

Mi corazón latía a mil por minuto, o al menos así lo sentía, estaba con los pulmones en la garganta, sentía que si abría la boca para pronunciar cualquier cosa los escupiría en trocitos, mi lengua se sentía difícil de manejar, las puntas de mis dedos se sentían helados, pese a eso estaba sudando, mi estómago se sentía raro. Observe la puerta de madera pintada en barniz, haciendo relucir su color marrón oscuro, luego giré la cabeza para mirar a mis amigos, quienes ya se habían sentado en las sillas para espera en el pasillo cerca de la puerta, ellos al ver mi inseguridad, empezaron a echar porras, empezando a hacer demasiado ruido.