33. FUTURA ESPOSA.

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~~NATHANIEL~~

Llego al hotel y me dirijo al restaurante. La recepcionista me pide mi nombre y me lleva hasta la mesa con mi abogado.

Me siento frente a él, usa su usual traje y luce su cabello negro peinado hacia atrás. Imagino que en la carpeta frente a él está todo lo que le pedí, eso espero, no creo que todos a mi alrededor sean unos completos inútiles.

—Señor Dagger —saluda.

El restaurante es amplio y sus mesas están alejadas unas de las otras dándonos suficiente espacio para hablar con soltura sin que alguien escuche.

—Espero que tengas respuestas.

No tengo un clon que me haga la otra mitad del trabajo, creí que podría tomarme un año de descanso, pero no, a alguien se le ocurrió matar a Jo, a Hans se le ocurrió venir a intrigar, espían y quieren matar a Forex, a la DEA se le ocurrió investigar empresarios. Tengo mucho que hacer, mantener todo a raya y mantener a todos los míos vivos, matar, secuestrar, interrogar, castigar y volver a matar. La lista de cosas por hacer solo crece y crece.

—Sobre eso... —desliza la carpeta hacia mí—, oficialmente está fuera de los ojos de la DEA, me encargué —abro la carpeta esperando que sea broma lo que veo—. Sí, Hans Brinkerhoff sostiene una relación amorosa con Vanora Rozhdestvenskaya, ya llevan un tiempo saliendo, un poco más de un año.

Un poco más de un año... Un poco más de un año, pudo haberme dicho, ha tenido más de un año para decirme, solo viene y despotrica que es mi padre sin darme los derechos de un hijo.

—¿Por qué vino? —quiero saber. Eso no está claro.

—Eso no lo sé, mi teoría es que vino a decirle en persona, como sabemos eso no pasó.

Muevo las fotos para ver otras imágenes de cinco muertos, dos mujeres y tres hombres. Lo hicieron los míos, lo sé.

—De esos cinco conseguí una dirección, pero cuando llegué la casa estaba quemada, resulta que murieron todos los que la habitaban, no pudieron reconocer los cuerpos porque estaban calcinados.

Mierda, al parecer ese gusano sabe cómo esconderse.

Muevo las imágenes encontrando los papeles de la sucesión, solo hay que firmar, por lo que llamo a Alex que contesta a la cuarta vez, de fondo escucho el motor de autos rugir.

—Te voy a enviar una dirección, tienes minutos para llegar —le aviso antes de cortar.

Debería por lo menos contestar el puto celular, ¿Para qué lo tiene?, ¿Es un puto complemento del outfit?

—¿Cómo está el sucesor?, estoy ansioso por conocerlo.

—¿Sí?, pues no te emociones, como ves todavía tiene que aprender cosas —recalco—. La vida de mi organización está en estos papeles y en él. No planeo morir pronto sin obtener la inmunidad que quiero.

—Lo sé, pero parece una utopía, cada muerte desencadena más muerte, es una pirámide viciosa e interminable —opina—, no es imposible, pero antes va a correr mucha sangre, de culpables, inocentes y amigos, puede que al final solo quede usted.

Sé lo complicado que puede ser obtener inmunidad para mí y los míos, pero lo voy a lograr, no estoy donde estoy por acomodarme a los demás, por dejar que me maten a mi gente, por cobarde, no, estoy donde estoy porque no sé conformarme hasta que tengo todo, y más.

Matar al pecador y a los testigos funciona mucho, aún más funciona regir tras el miedo y eso lo hago, pero no le ha quedado claro a varias personas en vista de lo sucedido, debo ser más sanguinario, más desalmado, más hijo de puta. Exteriorizar lo que soy, que a nadie le queden dudas.

LUMINISCENCIA (#2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora