~~JO~~
Me despierto y salgo de la cama con extremo cuidado para no despertar a mi pequeño hermano.
Voy al armario por una falda corta color café, una camiseta ceñida de mangas largas con escote y botas negras, después saco una pequeña mochila negra en la que meto mi uniforme del trabajo.
Paso a la sala para ir por mi mochila de la universidad lista desde la noche anterior en uno de los sillones. Así salgo de la casa a las 5:30 am.
Miro a mi alrededor a cada paso, apenas está amaneciendo, cualquiera pensaría que soy paranoica, pero en mi barrio es necesario, si no quiero terminar robada o en algún basurero muerta...
Miro a algunos vecinos si así les puedo llamar, y a otros cuantos vagabundos que simplemente me miran indiferentes o con lujuria. Este barrio huele a muerte, todo aquí dice peligro, pero ya estoy acostumbrada...
Llego a la parada de autobuses y suspiro aliviada. Es un milagro haber llegado sin tener que lidiar con alguien pesado por el camino.
El autobús llega casi de inmediato, no hay muchas personas, se podría decir que está vacío, pago y voy a sentarme al fondo para poder abrir mis libros y estudiar.
Francamente... Sigo levantándome todos los días porque no estoy dispuesta a aceptar la vida que me tocó vivir, no estoy de acuerdo y por eso desde que tengo memoria cada día doy todo de mí y más, así es como he logrado entrar a medicina en la mejor universidad de la ciudad.
Vivo en uno de los barrios más pobres, mi hermano y mi madre son mi responsabilidad desde los 15, trabajé dos años vendiendo comida rápida en la calle, luego unos meses de mesera en el local de una vecina, y a los 17 empecé a trabajar en un bar nocturno, de esos a los que los padres prohíben ir a sus hijos, en los que hay bailarinas en ropa interior y últimamente, prostitutas. Allí llevo tres años.
No me gusta ese lugar, pero debo aceptar que pagan bien, si tan sólo mi progenitor no nos hubiera dejado con tantas deudas... Ahora no viviríamos ahí, mi hermano estudiaría en un buen lugar, mi madre sonreiría más tiempo del que llora... Lo único que recuerdo de él, es que se perdió en la bebida y las apuestas, que se fue cuando tenía 10 y mi hermano acababa de nacer.
Después de eso, las personas a las que les debía venían en busca de su dinero, pero no teníamos nada, todo lo de valor monetario se lo llevó con él, así que esos desgraciados pusieron a mi mamá a trabajar como prostituta por cinco años, cuando cumplí 15 me puse a trabajar, y siempre me ayudó que me desarrollé más rápido que la mayoría de chicas.
Se detiene en mi parada, guardo todo y me bajo corriendo para alcanzar mi clase de las 6:30 am. Llego al mismo tiempo que el profesor y se hace a un lado para que pase, le sonrío agradecida y me siento.
Durante horas seguidas tengo clases, y en los recesos repaso lo que nos dan en las clases, quizás por eso solo he logrado tener una amiga, pero está bien, así tengo todo el tiempo para dedicarle al estudio.
A las 10:00 am nos dan un receso de una hora para desayunar, y como tengo beca completa, tengo una tarjeta que cubre la comida, lástima que no los libros, la laptop, mi celular, etc, etc.
Voy con mi mochila al hombro y mi cuaderno de notas entre mis brazos y contra mi pecho. Aquí me siento segura, como en ningún otro lugar, la universidad es mi refugio.
Entro al comedor, una camarera que supongo es nueva me sonríe y me acerco a ella.
—Por favor toma lo que necesites. —Me da un plato.
Le sonrío agradecida y lo pongo sobre mí cuaderno, camino junto a la vitrina para escoger lo que quiero, afortunadamente hay de todo aquí.
Es hermoso, con música en vivo a veces y la decoración de un salón antiguo en el que los burgueses se reunían para probar sus extravagantes delicias.
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LUMINISCENCIA (#2)
Teen FictionA veces tener un gran corazón no te asegura un camino lleno de pétalos que desborda amor, a veces cedes ante lo incorrecto aunque sabes que esta mal, que te va a lastimar, a veces, solo a veces, un demonio te ofrece su mano y tu la tomas. Jo es inte...