IX

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Habían pasado un par de días sin ningún progreso en la investigación. Los agentes no conseguían nada y la asesina no daba señales de vida. Estaban todos tranquilamente revisando las pruebas del caso cuando entró Shirabu con una sonrisa postrada en su rostro.

- Creo que he encontrado algo - todos los presentes se reunieron junto a la pantalla. En esta apareció un foro que tenía poca pinta de ser legal.

- ¿Y esto que tiene que ver con la investigación?

- He encontrado un usuario que ha dejado unos mensajes relacionados con el asesinato del abogado.

" Los hombres como él son unos desgraciados, disfruté mucho acabando con su vida. Siempre fue un narcisista que se creía el mejor por ser abogado."

- Tiene que ser ella, aún no se le ha revelado a la prensa sobre su asesinato.

- "Disfrute" - todos se quedaron mirando al falso rubio mientras este tenía la mirada perdida en una de las paredes - eso era lo que tenía escrito en latín en el filo del cuchillo que encontramos en la escena del crimen; ella disfruta matando hombres.

-  Entonces no parará hasta que la atrapemos. Tenemos que prepararnos para lo peor.




Los inspectores estaban aterrados ante lo que estaba apareciendo en la pantalla; esta mostraba a un hombre atado a una silla con una bolsa en la cabeza. El video estaba siendo transmitido en directo en la página web que Shirabu había descubierto hacía ya un mes. Lo primero que habían intentado hacer fue delimitar la ubicación, pero fue inútil. Después de 20 minutos, apareció en el encuadre una mujer con un pasamontañas y un cuchillo sucio; miró un momento a la cámara y empezó a hablar.

« Espero que el FBI esté viendo esto. Quiero darles un buen show, se les va a hacer imposible encontrar la ubicación así que solamente disfruten.»

La mujer le quitó la bolsa de la cabeza al hombre, descubriendo su demacrado rostro. Presentaba algunos moretones en la cara y el cuello y un ojo morado. Sin previo aviso, le asentó una puñalada en el centro del pecho. Algunos de los inspectores desviaron la mirada, mientras los hackers intentaban con todas sus fuerzas salvarle la vida a aquel hombre. Después de un par de puñaladas más el video se cortó y por fin pudieron saber la ubicación.

- ¡ La tenemos! Están en XXXXX

Sin perder el tiempo todos se dirigieron al lugar, una fábrica abandonada. Entraron sigilosamente y con arma en mano por precaución pero, desgraciadamente, fueron recibidos con una escena igual a la del abogado. Kuroo y Akaashi se acercaron al cadáver para poder observarlo detenidamente.

- Necesitamos el análisis forense, pero lleva ya varios días muerto.

Los investigadores suspiraron por la impotencia, pero esto en vez de deprimirlos solo les dio más ansias de atrapar a la asesina.

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