Golpes en la pared° DreamNotFound

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Este capítulo es más relleno, pero,si hay alguna cosa es relevante.

Por cierto,se supone que lo arregle para que lo entendieran mejor, estoy seguro de que no son idiotas como para no entender, bueno, al menos pienso que no es complicado de entender, o sea.

También agregué algunas cosas más, así que, si, léelo de nuevo, digo,si quieres.

... Simplemente era la cocina,no la salida, entro y noto algo un tanto inquietante, había una nota escrita con tinta azul según a sus ojos, tenía unas manchas de color café rojiso en todo el papel y mesa, se acerco y lo tomo entre sus dedos, decía:

– Quién tiene la culpa?

Decidió mejor regresar y salir de una vez, pero antes de que diera media vuelta, sintió un fuerte dolor en su cabeza, de repente cayo al suelo, trato de mirar hacia atrás, solo logro ver unos ojos de color amarillo brillante con las pupilas dilatadas, recibió otro golpe fuerte en la cabeza y quedó inconsciente.

(Esto no paso de verdad, solo es un sueño fumado del George)

Sus ojos se abrieron lentamente, que clase de sueño o pesadilla era esa? No lo sabía, talvez el tema de asesinos lo había dejado un poco tensó, porque era una posibilidad.

Miro a su alrededor con extrañes. En que momento me fui a la cama?. Ni siquiera recordaba haber caminado hasta la habitación, solo recuerda haberse dormido en el sillón. Talvez estaba muy adormilado como para recordarlo,si, debía ser eso.

Gotas de agua cayeron sobre la puerta corrediza de su balcón, captando su atención inmediatamente.

Intento levantarse con normalidad, pero, el dolor de su pie persiste, por la que avanza con cuidado, para no hacer que el dolor escale a algo mayor.

Tenía suerte de que no hubiera sido algo grave, sino, tendría que haber ido al hospital y no quería eso, odia los hospitales. Desde el día que casi muere de anemia y tuvo que quedarse ahí toda la noche y gran parte del día, el horrible olor a muerte que recorrían los pasillos,joder, incluso pudo jurar que, en medio de su delirio, casi apunto de desmayarse, escucho las pisadas de unos tacos al lado suyo, que pararon al lado del suero, pero realmente no había nadie, pensó que realmente se estaba muriendo. George sacudió la cabeza, talvez era mejor no recordar eso.

Abrió la puerta con cuidado y pronto unas pequeñas gotitas caen en sus mejillas. Es solo un sereno. Camino hasta el pequeño banco y se sentó sobre el, cerrando los ojos, aún tenía sueño, pero no se iba a quedar dormido ahí.

– Apuesto que estarías disfrutando de esto.

Una voz se escuchó a unos metros de él. Miro de donde provenía, sabiendo de quién se trataba. Dream estaba sentado entre la puerta, por lo que,no podía ver su rostro, solo sus piernas en donde tenía recargada una libreta y su mano apoyada en esta, parecía estar dibujando o escribiendo algo.

– Recuerdo cuando te cubrias las manos de pintura y– una leve risa salió de sus labios, contagiada de nostalgia y tristeza, su voz comenzaba a temblar un poco– y me manchabas todo lo cara con ella y- suspiro con pesadez, dejando el lápiz de lado con sus manos temblorosas– talvez si y-yo..– trago saliva, parecía que realmente iba a llorar

no dijo nada más, claro que no diría nada más, lo había descubierto mirándolo atraves del espejo y ahí fue donde pudo ver que de verdad se lamentaba de algo o por alguien, sus ojos estaban cristalizados y desprendía una gran tristeza, ese no se parecía al Dream que había conocido aquella tarde.
Trata de darle una mirada reconfortante, aunque no sabía a qué se refería exactamente. Porque estaba tan triste? Ocurría algo malo? Tenía que ver con lo que dijo Sapnap?

Podía sentir eso agridulce de nuevo, sentía que quería correr a su apartamento y abrazarlo, pero, ni siquiera, sabía nada de él, solo ideas sobre él que no sabía si eran reales.

Dream se cubrió la boca y entro a su habitación lo más rápido posible, no queriendo que George lo viera más. En un estado vulnerable.

Dejándolo ahí, mientras la lluvia comenzaba a crecer.

Y esta vez los golpes fueron causados por George, para darle algún tipo de consuelo al chico, recibiendo una pequeña respuesta muy débil.

No sabía cómo iba a hacerlo, pero, descubriría cada uno de los "misterios" que cargaba este chico, su curiosidad estaba al límite y no desaparecería hasta saber lo que quiere, aún que eso pueda costarle la vida