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2 de junio, 1998.
Un mes después de la muerte de Amelia.
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La inmensa necesidad de hacerlo invadió la mente de Draco otra vez.
Se levantó a pesar de la lluvia, salió de su habitación por tercera vez en todo el tiempo que había pasado.
Con las manos temblando, abrió su armario y sacó un traje negro con una camisa blanca.
Desvió su mirada lentamente hasta el cajón superior de su armario y sollozó ante la idea en que la ropa de Lili estuviera allí aún. Con su sangre. Sus lágrimas. Un trozo diminuto de su alma.
Narcissa había quemado la ropa de él con restos de la sangre de Lili.
La idea de tener su ropa ahí era completamente extraña a la vista de los demás.
Él pensaba que algún día podría realizar algún hechizo y podría revivirla.
Espero a que el elfo llegara con su pedido y salió rumbo a los terrenos medianamente alejados de Hogwarts.
Sus manos tenían espasmos y su pecho tartamudeaba mientras caminaba entre los arboles.
La lluvia rebotaba sobre su paraguas.
Suspiró pesadamente y tocó el bolsillo derecho de su pantalón.
Suspiró y corto una de las hojas que cruzaba la entrada.
A las orillas del lago negro, en donde el césped no es verde oscuro si no...un verde vivo y brillante, con diminutas flores blancas y un árbol enorme.
Caminó hacia el árbol y se arrodilló ante el pequeño trozo de piedra cubierto con musgo, hierba y pequeñas flores blancas.
Levantó levemente la vista y vio a un Bowtruckle asomarse por una de las hojas.
Y luego a otro.
Y otro.
Y otro.
Se limpio con la manga de su chaqueta las lágrimas y sacó la cajita pequeña de su bolsillo.
Se arrodilló ante la lápida y se quedó en silencio un minuto.
-P-Prometí hacerlo después de la guerra. Casarnos y escapar a donde tú quisieras. Vivir juntos y amarte hasta que deje de respirar. Hicimos un contrato...
Sacó el anillo y lo hizo levitar con su varita.
-Supongo que esta era la forma en que la vida quería que siguiéramos.- Conjuró un encantamiento sobre el anillo y lo hizo grabarse en la lápida.
La lluvia había comenzado a empeorarse.
-T-Te amo, lo sigo haciendo. Siempre lo haré.
Sollozo y se tapó la cara con las manos.
Ella se había ido. Y el se había quedado.
La envió a un lugar ajeno mientras pudo aprovechar ese tiempo si no hubiera sido con cobarde.
El se sintió responsable de su muerte.
-Vendería un trozo o mi alma completa para que volvieras, Lili.
Dejó el ramo de flores a un lado y se sentó en frente de la lápida a llorar hasta que su ropa estuviera mojada completamente.
El sentía que ella no estaba demasiado lejos. Que estaba de viaje y volvería a sus brazos en un tiempo corto.
El; el no estaba muy equivocado en ese aspecto.
Ella estaba volviendo. -
Pd: Perdón si en algún momento sale el nombre "Diana" me confundo aveces con los nombres JAJDJSND
