Recuerdos olvidados, corazon destrozado

Viaje de trabajo parte 1

Después de esa noche Can decidió darle espacio a Sanem, en la agencia trabajaban a la par intercambiaban ideas y discutían sino estaban de acuerdo en algo aunque las miradas y en ocasiones la cercanía que existía entre ellos decía mucho más...
El viernes Can le pregunta a Sanem si la recogía en su casa para " El fin de semana de trabajo" en los hoteles para los cuales habían preparado la campaña y donde estaban invitados todos los empleados de la agencia. Sanem le contestó que iría por su cuenta ya que había quedado en reunirse con Mehdi.

- Con Mehdi? preguntó
- Si y no puedo posponer pero no te preocupes no voy a quedar mal con los representantes de los hoteles y estaré con ustedes apenas me desocupe

El macho posesivo que estaba dentro de Can ya no aguantaba más... Tenía que hacer un esfuerzo enorme todos los días para no besarla y hacerla suya en la agencia, cuando podía se acercaba a ella sólo para sentir su fragancia y al escuchar el nombre de Mehdi no pudo evitar recordar las palabras de él en la fiesta, la mirada y la cercanía aquella noche en la puerta de su casa y eso lo volvía loco!

- Sanem volvemos a lo mismo! No resolviste el trabajo ya sobre tu libro?

- No aún nos queda mucho por delante sólo que él estuvo ocupado con otros escritores... Pero Can no entiendo cuál es el tema, habíamos hablado, lo nuestro no es ningún compromiso, no tengo porque explicar ninguna situación!

Sanem no había terminado de hablar cuando Can con dos pasos la agarró con fuerza y le dijo...

- Es cierto pero sólo recuerda que te amo y podría arrancarle la cabeza a cualquiera que te mire con deseo y ese tipo te desnuda con la mirada está más que ansioso por meterse en tu cama y si por tu loca cabecita llega a pasar eso ten por seguro que lo mató!!!

- Sanem no lo pensó le dió con todas sus fuerzas en el medio de la cara, quien crees que eres para faltar el respeto así, yo nunca sería capaz de...

No pudo continuar Can la beso con tarta fuerza y deseo contenido que no pudo decir más nada, sólo se apartó apenas su beso terminó y salió sin mirar atrás, no podía dejar que él quisiera manejar su vida.

El encuentro con Mehdi fue corto de hecho Sanem se preguntaba porque no sólo la llamó o envío un correo con los detalles era obvio que era una excusa para verla y como Sanem estaba tan enojada por las palabras de Can no le dice nada, en realidad Mehdi era todo un caballero la miraba con respeto, le hacía notar que la consideraba una mujer muy capaz, inteligente e incluso siempre la halagada con algún detalle, hoy por ejemplo le dió un libro de un autor del que habían conversado en otra ocasión y que ella no paró de admirar sus obras.
Sanem  se despide diciendo que ya que resolvieron el tema rápido pasaría por su casa y llegaría a tiempo para salir con el grupo de compañeros de trabajo, Mehdi se ofreció a acercarla a su casa y llevarla ya que tenía tiempo, ella aceptó se sentía bien con él pero sólo como amigos se lo había dejado claro en varías ocasiones.

Llegaron donde está el grupo justo a tiempo, Cey Cey y Muza se acercan al auto ansiosos apurando a Sanem. Mehdi los saluda y les dice...
Calma muchachos acá les dejo la princesa, la cuidan que es mi escritora favorita, Sanem sonríe y baja agradeciendo a lo que el le contesta el lunes te llamo si hay novedades y se marcha.

Can estaba observando y escucho todo parecía una fiera! Sanem evitó su mirada y no se acercó, no tenía ganas de discutir.

Llegaron al complejo de hoteles eran de una magnitud terrible, con canchas de fútbol, tenis, gimnacio, piscina, baños turcos y spa donde los residentes podían disfrutar de muchos tratamientos, incluso uno de ellos tenía salida al mar.
Se registraron y fueron a sus habitaciones, pasada una hora, Can seguía inquieto, los celos que tenía le devoraba por dentro, por suerte al ser tanto él como Sanem los dueños de la empresa les habían dado dos suite enfrentadas, como no aguantaba más decidió ir a hablar con ella...
Can golpeó la puerta y Sanem se demoró un rato en abrir cuando lo hizo no esperaba ver a una Sanem con el pelo húmedo, descalza y sólo envuelta con una toalla que apenas le tapaba el trasero
Pasa le dijo espera que me pongo algo y puedes servirte un té si quieres.
Desde cuando era tan desinhibida está mujer! En otra época se hubiera muerto de vergüenza, que sería con todos así! Esa idea que pasó por su mente no le gustó nada.
Can no espero, la siguió y la tomo en sus brazos respirando ese olor que lo volvía loco, ese olor que necesitaba para respirar, Sanem disfruto de su abrazo echo la cabeza hacia atrás, cerró los ojos y se dejó llevar por la pasión que ambos sentían.