Capítulo 7:El festival de las linternas

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Ya era de mañana, Cassandra y Rapunzel habían sido las primeras en despertar, mientras los demás seguían durmiendo. Cassandra le pidió a Rapunzel hablar en privado, y ella había aceptado.

Ahora ambas estaban algo lejos de los demás, para evitar que escuchen algo. Aunque estaban dormidos, no sabían cuando despertarían.

-¿Qué sucede, Cass? -Le preguntó Rapunzel. Cassandra se veía muy alterada desde que se encontraron con madre anoche. De echo, los tres hermanos estaban muy alterados.

-Raps, ¿de verdad te gusta Eugene? -La pregunta sorprendió a Rapunzel, no esperaba que Cassandra le preguntará eso, para nada.

-Eh... Si, puede que me guste un poco-Le admitió, ella no iba a mentirle a su hermana. Rapunzel se estaba enamorando de Eugene, y capaz suene poco una locura, pero era lo que ella sentía. -Creo, que me estoy enamorado de él. ¿Éso esta bien?

-Rapunzel, no está mal que te guste Eugene. Pero, debes tener cuidado, no creo que él o Hugo sean malas personas, pero me preocupo por tí y por Varian. Y me he dado cuenta de que ustedes dos, han encontrado a alguien-Cassandra no era tonta, ella había notado como Rapunzel miraba a Eugene, o como Varian miraba a Hugo. Ella teme de que puedan salir lastimados de todo ésto, pero no puede prohibirles amar como lo hizo madre.

-¿Tú creés que Varian esta enamorado de Hugo? -Pregunto Rapunzel ansiosa, Rapunzel también tenía un pequeño presentimiento.

-Sí, es muy obvio, no sabe ocultarlo-Dijo Cassandra para luego reírse.

-¿Y estás de acuerdo con éso...? ¿Estás de acuerdo de que yo y Varian estemos enamorados de ellos?

-Sí, estoy de acuerdo. Sí ustedes son felices, esta bien-Le respondió a Rapunzel, lo que decía era verdad, Cassandra sólo quería que sus hermanos sean felices, y esos dos ladrones les dan felicidad. Ambas hermanas se abrazaron, y todo estaba bien, hasta que oyeron los gritos de los chicos desde lejos.

-¡Déjalos ir! -Se oyó los gritos de Varian a lo lejos. -¡Ahora mismo!

-Oh, rayos... ¿Ahora qué? -Soltó Cassandra preocupada.

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Los ojos de Varian se fueron abriendo lentamente, se levantó del incómodo suelo. Lo primero que pudo ver, (sacando el bosque a su alrededor) fue a un Hugo despierto mirando a la nada misma. En otro lado estaba Eugene durmiendo. Y extrañamente sus hermanas no estaban allí, se preguntaba que estarán haciendo a estás horas.

-Hey, pecas. ¿Cómo dormiste anoche? -Le preguntó Hugo, que al parecer había notado que se había despertado.

-Hola, Hugo. Y dormí bien anoche, fue algo incómodo no dormir en una cama, pero estuvo bien-Le respondió con una sonrisa, lo que provocó un pequeño sonrojo en Hugo. -¿Y tú? ¿Dormiste bien?

-Claro, hairstripe, no es la primera vez que duermo en el suelo-Respondió como sí no fuera nada, pero para Varian no era nada.

-Oh... Lo siento, creo que me estoy metiendo en algo un poco...

-Tranquilo, no me molesta-Le aclaro rápidamente Hugo a Varian. -Antes de conocer a Eugene, era muy normal que yo durmiera en el suelo o en cualquier lugar. A veces, ni siquiera sabía dónde dormiría o que comería. Supongo, que aunque sigo robando para vivir, no es tan horrible como antes, porque ahora tengo un hermano.

-Tienes suerte de tenerlo a tu lado, se nota que te tiene cariño, y que esta dispuesto a dar todo para mantenerte a salvo-Dijo Varian. Honestamente, oír todo lo que tuvo que pasar Hugo antes de conocer a Eugene, le dolía, le dolía saber cuanto sufrió este chico.

𝓛𝓪 𝓰𝓾𝓪𝓻𝓭𝓲𝓪𝓷𝓪 𝓭𝓮𝓵 𝓮𝓵 𝓼𝓸𝓵 𝔂 𝓵𝓪 𝓵𝓾𝓷𝓪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora