Capítulo 28

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SISI

-¿Qué piensas de este?- preguntó Allegra mientras se paraba en la pequeña plataforma en frente de la pared de espejos en otro maravilloso vestido de novia blanco.

Pensé que se veía como la fantasía de cada hombre. Todo su cabello rubio y su escote derramándose de lo alto del vestido sin mangas.

Era el tipo de chica que podría cambiar su rumbo a cualquier chico.

Me faltaba atractivo sexual. Tenía la cosa de la chica linda de al lado. No tenía la cosa de la diosa sexy como Allegra.

No era de extrañar que mi hermano se convirtiera en un perro jadeando a sus pies en el momento en que la conoció. 

-Me encanta. Estás fabulosa en él. Sin embargo, todavía soy fan del de hace dos vestido atrás. Me gusta la forma en que es corto por delante y muestra tus piernas pero es largo por detrás. Ese es un vestido más sexy. Este haría muy feliz a mi madre, pero cubre demasiado. Tienes el cuerpo. Presúmelo en el día de tu boda.

Allegra se sonrojó y me acordé de otra razón por la que mi hermano la amaba. Era tan completamente ciega al hecho de que era hermosa.

Cada vez que le decía un cumplido, toda su cara roja se sonrojaría como si no lo creyera o no supiera cómo manejar la situación. 

-También me gustó ese. Me preocupaba que la parte delantera corta fuera demasiado. Tu madre quiere que nos casemos en la iglesia. ¿Puedo usar un vestido corto como ese?

Mi madre se metía mucho en esta boda.

Allegra no tenía una madre para opinar, y su hermana mayor no era una opción para ayudar a decidir nada sobre la boda. El hecho de que Tany estuviera viviendo con mi padre y su hija lo hacía raro. Además, Allegra y su hermana no eran muy cercanas. 

-Pensé que querías casarte en la playa. Creo que es el vestido perfecto para una boda de playa.

Allegra hizo girar uno de sus largos mechones de cabello alrededor de su dedo. 

-Bueno, quiero. Pero tu madre quiere que nos casemos en una iglesia. No quería molestarla. Ha tenido mucho con lo que tratar. Y a Benicio no le importa. Sólo quiere casarse.

Allegra iba a tener que aprender a alzarse contra mi madre, o mamá le pasaría por encima. Mamá amaba planear y estar a cargo.

A  Allegra le entusiasmaba tanto complacerla que la dejaba. No iba a permitir que eso pasara.

-Si quieres una boda en la playa, entonces ten una boda en la playa. Esta no es la boda de mi madre. Ella no tiene que planear esto. No dejaré que planee la mía, ya puedo decírtelo. No puedes dejar que empiece a controlar tus decisiones. Lo hará siempre. Demonios, incluso nombrará a tus hijos por ti. Esta es tu vida. Benicio es tuyo. No de ella. Es un chico grande y es tuyo. Tomas las decisiones. Ese vestido te queda maravilloso. A Benicio le encantará. Haz tu boda en la playa y viste tu vestido increíblemente caliente

Allegra sonrió y mordió su labio inferior, entonces asintió. 

-Tienes razón. No debería hacer lo que otros quieren en el día de mi boda. Esto es sobre Benicio y yo. Nadie más.

Sentí una oleada de orgullo en mi pecho porque la había convencido de seguir a su corazón.

Hacer lo que quería.

Asentí y volví a sentarme en la silla y crucé las piernas mientras esperaba que fuera a probarse de nuevo el vestido que nos había encantado.

Mi teléfono sonó con un tono corto, dejándome saber que tenía un mensaje.

Sólo por ahoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora