—Nunca pensé que llegase a importarte tanto, como para que empezases a buscar la Rosa del Deseo.— susurró con la voz débil el vampiro, dejando caer unas cuantas lágrimas más en mi hombro. Tras unos segundos nos apartamos el uno del otro, le miré a los ojos y luego mi atención se puso en Scott y en Max.
—Bienvenido al mundo de los vivos.— le dió un golpe amistoso en el hombro Scott.
—¿Se puede saber lo qué ha pasado el día que... Que... Te mataron?— preguntó Max dejando el tacto de lado, abriéndole las puertas a la curiosidad.
La mirada de Dante se clavó en Max. El vampiro pelinegro se quedó en silencio, como si en su mente estuviese ordenando o reproduciendo lo que había pasado ese día. Unos segundos después de parecer una estatua con su inmóvilidad, hizo un pequeño movimiento con el que nos dió oa espalda.
—No lo recuerdo muy bien... Solo se que llegamos a una habitación y después que gente rara nos rodeó... Y el como Alex cayó de rodillas, tras eso todo se volvió negro.— respondió dando un pequeño suspiro mientras se pasó la mano por el pelo que empezaba a estar mojado por el sudor de su frente.
—Juliet... Yo no le maté... Tienes que creerme... Estaba controlado por alguien gran parte del tiempo... Yo...— la voz nerviosa de Alex se extendió por mi mente. Al parecer las palabras de Dante le habían dejado nervioso.
—Sssshhh, yo se que tu no eres capaz de... Bueno, serías capaz, pero dudo que lo hicieses.— respondí en voz alta, con la intención de calmar a Alex. La mirada de Dante se clavó en mi, mientras analizaba mi estado.
—¿Estás bien?— preguntó después de unos segundos de silencio en los que no dedujo nada de mi estado.
—Sí, verás... ¿Recuerdas a Jack? Pues empecé a sospechar de que era alguien que se ha infiltrado en el castillo, ya que parecía estar obsesionado con los Artilugios.— empecé a explicarle a Dante el porque hablaba en voz alta sola y mientras lo hacía me agache para coger la Rosa del suelo. —Descubrí que el cuerpo de Alex estaba poseido por un extraño... Y si hablo sola, pues... No hablo sola, hablo con Alex, dejé que parte de su ser entrase en mi cuerpo para que no muriese.— resumi al ver que Dante se había perdido un poco en lo que decía.
—Entonces si hablo contigo... ¿Hablo con él al mismo tiempo?— levantó la ceja un poco confundido.
—Espero que el piense que no le he matado... Seria un poco malo.— murmuró Alex con cierta preocupación en la voz.
—Estoy segura de que no lo piensa. Vamos, calmate que me pones nerviosa.— pedí intentando ignorar la mirada de Dante.
—Lo siento, pero espero que salga pronto de tu cuerpo, porque, no creo que me acostumbre a... Esto.— comentó Dante dejando que en su rostro apareciese una débil sonrisa.
—Es cierto... Pensaba que lo primero que pedirías seria que Alex volviese...— me observó con atención Scott.
—Es lo que pedí, pero no funcionó... Creemos que puede ser porque el cuerpo de Alex es controlado por otro... O porque estabamos demasiado lejos al pedirlo.— me quedé pensando en las palabras que acababa de dejar en voz alta.
—Emmm... ¿Creéis?— se quedó extraňado Dante mirándome como si tuviese alguna enfermedad que me hacia hablar de más persona. —Ah, ya lo pille. En serio, que es raro que alguien hable así.— en mi rostro apareció una sonrisa burlona, pocas veces lo había visto confundido. —Oh venga, reíros todos de mi.— gruñó molesto al ver de reojo que Max y Scott intentaban aguantar la risa.
—Vaya, ya habéis vuelto.— oímos todos una voz de más en la sala, que nos obligó a darnos la vuelta. Se trataba de Jack, nos observaba con una mirada de pocos amigos. Supuse, que aún seguiría enfadado por habernos ido sin él. Sus ojos se fijaron en la flor que tenía en la mano, como si fuese imposible que yo la consiguiese por mi cuenta. —Veo que la búsqueda tuvo muy buen resultado.— dejó aparecer una sonrisa en su rostro y dió unos pasos hacia nosotros.
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Just My Destiny (Libro 3)
VampireLas últimas esperanzas que tenía de volver a la vida normal han desaparecido. Ahora que he vuelto de la Nada, tengo que aprender a gobernar un reino... El reino de la Oscuridad. ¿De verdad es este mi único destino? ¿La única opción que me queda? M...