En mi mente inicié una cuenta atrás desde cinco, tomé mi último respiro y con todas las fuerzas que tenía quise clavarme la daga. De la nada, sentí un enorme frío en la mano, abrí los ojos y vi que apareció hielo en ella de la muňecas hasta los dedos. La daga salió disparada hacia alguien detrás de mi.
Me di la vuelta y ví a Scott, Alex, Max y Jack todos observándome preocupados... Quizás algo enfadados también. Me costaba un poco respirar, y la verdad es que estaba sorprendida de verlos aquí.
¿Cómo me habían encontrado? ¿Cómo habían roto la barrera que hice?
- ¿Quién se atreve a interrumpir el ritual? - preguntó el anciano girándose hacia ellos bruscamente.
- Lo sentimos, pero ella no tiene pensado morir. - respondió como primero Alex, con palabras frías.
- Entonces devolvernos la daga. - le pide la chica.
- Claro. - decide sin más Jack.
- ¡Jack, no! Es uno de los artilugios. - gruñí cuando hice que el hielo desapareciese.
Esas palabras le detienen por un instante. Todos se quedan sorprendidos observando la daga.
- Creo que no te das cuenta de lo que podrías haber hecho. - susurra Scott.
- Claro que me doy cuenta. Quería salvar a Dante, sin tener que matar a Alex. - defiendo mis intenciones.
- Eso no tiene sentido, pequeña lindura. - esta confundido Max.
- ¡¿Va a morir alguien o no?! - pregunta gritando una muchacha, a la que sin querer se le había caído la capucha. Todos los Almas Del Bosque, se quedaron sorprendidos ante esa pregunta, pero no dijeron nada.
- Sí no va a sacrificarse, me temo que tienen que darnos la daga. Sí se juntan todos los tres artilugios podría ser muy peligroso para todos, incluido para los humanos y los espíritus. - intenta convencernos el anciano.
- ¿Y si no os la damos? - pregunta Jack con descaro.
- Tendremos que recurrir a la violencia. Somos bastante mayores ya todos, lleguemos a un acuerdo. - responde otro anciano diferente.
- Es una pena. - comenta Jack en voz alta después de jugar un poco con la daga. - Juliet, prepárate y agachate. - añade y me mira a los ojos.
Sentí como los nervios se extendían por mi interior. ¿Qué iba a pasar ahora?
Veo como Jack hace un gesto y al dar un chasquido me agacho. Dos fueron empujados por una fuerza inviable hacia atrás, rompiendo el círculo.
- Max, coge la daga y llévala al castillo. - ordenó Jack y dandosela. Máx aceptó con la cabeza y nada más tener la daga entre manos salió corriendo del sitio. Me quedó sorprendida al ver que se había deshecho y se convierte en pequeños murciélagos.
No me doy cuenta y pierdo de vista a los demás. Siento como alguien me coge del pelo tirando de el, para forzarme a ser obediente. Hago un gesto brusco con la mano y oigo como unos tres miembros dan un grito y como me suelta del pelo.
Caigo de rodillas al suelo, ensuciandome las manos con barro. Alguien me coge fuertemente del antibrazo y me ayuda a ponerme en pie. Quiero hacer un movimiento brusco para hacer que me suelte, pero el sujeto me lo impide. Veo que se trata de Scott.
- Ni se te ocurra apuntarme con tu mano. - me susurra al oido. - Has cegado a unos cuantos de ellos y ninguno sabemos como. - aňade al ver que no entiendo de lo que me esta hablando.
- ¿Cegado? ¿Quieres decir que no ven nada? - preguntó para asegurarme de lo que me acaba de decir
- Eso es... Van como ciegos... Aunque también usan sus otros sentidos para detectarnos y ayudar a sus aliados. - explica con tranquilidad.
- No podemos quedarnos aquí. Tenemos que ayudar a los demás. -
- Me dijeron que te mantuviese un poco lejos de la pequeňa batalla que estan teniendo entre todos. - empieza a morderse el labio nervioso.
- ¿Lejos? ¿Por qué? Puedo ayudarles con lo que sé hacer. - protesto y logro ver que nos encontramos apartados de todo el conflicto.
- Por que no sabes controlar tus poderes. - suspira cansado Scott. - ¿En qué estabas pensando? - aňade refiriendose al sacrificio.
- Scott, aquí no. - oigo algo parecido a una explosión. Me doy la vuelta y salgo corriendo hacia el lugar donde se encuentran Alex y Jack.
- ¡Juliet! - oigo el grito de Scott, pero aún así estoy decidida a ayudarles.
Veo como uno de ellos casi ataca a Jack por la espalda y con sólo hacer un gesto otro miembro más pierde la vista. Jack me mira sorprendido, pero al mismo tiempo está algo asustado. Desvía la mirada y vuelve a centrarse en dejar sin sentido a los demás para que todos podamos regresar al castillo.
Alguien me da un empujón, siento como me caigo al suelo entre algunas ramas y veo como a mi lado se cae Alex. Me mira a los ojos y clava su mirada en una herida que se me hizo por debajo de la rodilla.
- ¿Ten cuidado quieres? - después de mucho tiempo... Siento como si me estuviese hablado el Alex que conocí aquella noche en el concierto. Se acerca un poco más a mi y me acaricia la mejilla. - Lo estás haciendo bien. Confio en ti, pero no creas en tus ojos, por favor. - pide desesperado. Intento entender la petición, incluso quiero preguntar a que se refiere, pero antes de que pueda hacerlo, siento como sus labios en los mios. Me quedo un poco en shock, pero le devulevo el beso. Fue igual que nuestro primer beso, incluso diría que sentí mariposas en el estómago. Le pasé la mano izquierda alrededor del cuello apretandome más a él. Sintiendome segura, sintiendome como la antigua Juliet.
- Que momento tan bonito. - comenta una voz desconocida. Ambos abrimos bruscamente los ojos, Alex se separa de mi y yo hago lo mismo. Hago un gesto y veo que el miembro se había quedado congelado en un mismo sitio. Alex da un suspiro aliviado. Yo me quedo observando nuestro alrededor y consigo ver que este era uno de los últimos miembros "concientes" . Jack acaba de atar uno a un tronco.
Alex se levanta del suelo y me ayuda a levantarme, ofreciendome su mano. La acepto y él aprovecha para darme un abrazo, se lo devuelvoy iento como unas pocas lágrimas empiezan a salir de mis ojos.
- ¿Estás bien? - pregunta Jack, obligándonos a separarnos el uno del otro.
- Sí, estamos bien. - Respondemos los dos al mismo tiempo.
- Creo que será mejor que volvamos al Castillo. - dice Jack al despegar la mirada del cielo.
- Sí, voy a ver donde está Scott. - se ofrece Alex, después de intercambiar la mirada con Jack. Cuando Alex se aleja lo suficiente, me giro hacia Jack, viendo como sus ojos estan llenos de preocupación y quizás también llenos de rabia.
- Ni se te ocurra volver a hacer algo así. - me amenaza.
- ¿Así? Era lo correcto. - gruňí molesta por la poca confianza que me había dado.
- ¿Matarte, lo correcto? Venga ya. Y no te creas que no he visto como te besabas con ese emo. - intenta mantener la paciencia.
- No sé tú, pero yo vuelvo al Castillo. - susuro y empiezo a alejarme. No quería darle explicaciones a nadie. Sólo quería encontrar respuestas a mis dudas y buscar un momento adecuado para quitarles la daga. Sabía que ahora la esconderían para que no pudiese hacerme ningún daňo.
Bueno chicos :3 Os dejo otro capítulo *-*
Espero que os guste n.n
También quería informaros de que se han abierto las votaciones de los Premios Watty y de que la primera parte - Just My Desire - está entre las finalistas en la categoría Vampiros - Hombres Lobo. :3
Podeis votar por ella en la página oficial de los premios :3 y darme un poquito de apoyo...? ¿Sí? ¿No?
Bueno, eso es todo :3 Un fuerte abrazo.
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Just My Destiny (Libro 3)
VampireLas últimas esperanzas que tenía de volver a la vida normal han desaparecido. Ahora que he vuelto de la Nada, tengo que aprender a gobernar un reino... El reino de la Oscuridad. ¿De verdad es este mi único destino? ¿La única opción que me queda? M...