El Oscuro Protector

CAPÍTULO I

CAPÍTULO I

Las mesas del restaurante estaban casi llenas y justo el día de hoy tuvo que fallar uno delos meseros por lo que Gun tuvo que reemplazarlo y cubrir su turno.
-N'Gun, ve a tomarle la orden a la mesa 25, por favor. Y lleva esta orden a la mesa 3-. Habló el garzón a cargo de la jornada.
-Sí, señor-.
Rápidamente, Gun llevó la bandeja con el pedido hacia la mesa indicada y se fue directamente hacia la mesa siguiente, donde se encontraban sentadas dos mujeres mayores de clase alta.
En realidad todos los comensales eran de clase alta, puesto que el restaurante al que trabajaba era lujoso y muy reconocido en Bangkok.
-Buenas, tardes. Les traigo el menú-. Habló el chico con un wai.
-Muchas gracias, Nong-. Habló una de las damas.
-Las dejaré un momento-.
De camino, para ir a tomar otra orden, fue detenido por otro comensal. Un hombre mayor que venía acompañado de su esposa y sus dos hijos.
-Disculpa, llevamos aquí casi quince minutos y aún no nos atienden-.
-Oh, lo siento mucho señor. Enseguida lo atiendo-.
Gun fue corriendo hacia la barra y pidió las cartas para ser entregadas alhombre que se había quejado anteriormente.
-Señor, aquí tienen el menú. Pueden elegir con calma, volveré con ustedes en un momento-.
Gun se alejó de aquella mesa, y regresó hacia el sitio donde estaban las señoras mayores.
-Bien, ¿qué van a ordenar?-.
-Un platillo de ensalada picante de papaya verde-.
-Lo mismo para mí. Oh, y nos trae una botella de vino blanco, por favor-. Pidió la acompañante de aquella señora.
-Muy bien. Enseguida les traeré sus pedidos. Con permiso-.
Gun se retiró hacia la cocina y pidió los platillos, luego volteó hacia donde estaba otro de los garzones que lo acompañaban, quien era de rostro conocido.
-Title, la mesa 25 necesita ser organizada-.
-Iré de inmediato, después de entregar esta orden-. Dijo el chico con una bandeja en mano.
Regresó hacia donde estaba el señor con su familia y tomó su orden. Y después de quince minutos, fue entregado el pedido.
-Lamento la demora. Uno de nuestros garzones no pudo asistir el día de hoy, así que yo estoy reemplazándolo-.
-No te preocupes Nong. Entendemos-. Habló con amabilidad la esposa del señor.
-Muchas gracias y disfruten-. Dijo Gun.
Las tareas acabaron y todos los presentes fueron atendidos, por lo que los trabajadores tuvieron al menos unos minutos de descanso.
Los chicos se apoyaron en la barra, observando a su alrededor para verificar que todo estuviera en orden.
-Vaya, hoy ha estado de locos. Y justo Plan tenía que faltar-.
-No te apures, Title. Por lo menos, pudimos hacer bien nuestro trabajo-.
-Pues sí, pero nos toca salir un poco más tarde de lo normal-.
-Lo sé. Espero que P'Boat no se moleste por esto-.
Title volteó su rostro para mirar a su amigo.
-¿Me vas a decir que aún sigue con su carácter insoportable?-.
-Pues, sí... un poco-. Titubeó Gun.
Title no quedó conforme con la respuesta de Gun y preguntó directamente.
-Gun, ¿te está violentando?-.
-Claro que no. No me pegaría. Además, yo soy hombre. Los hombres no vivimos violencia, sólo las mujeres-.
Title seguía quedando desconforme con las respuestas de Gun. Si lo conocía bien, podría dilucidar que algo le ocurría a su amigo.
-En primer lugar, la violencia no solamente tiene que ser física, también puede ser psicológica. El maltrato puede ser tanto físico como verbal. Y segundo, no por el hecho de que seas hombre, no vas a vivirlo. La violencia no tiene género, y si lo estás viviendo yo te puedo ayudar-.
-Gracias, Title. Pero estoy bien, no te preocupes. Boat no es violento conmigo ni nada por el estilo. Y ten por seguro que, si algo llega a pasar, yo me defenderé-.
-Eso espero, amigo. De todas formas, ya sabes que puedes contar conmigo. Seré muy amigo de P'Boat, pero tú eres más importante. Eres como mi hermano-.
-Mejor volvamos al trabajo. Llegaron más clientes-. Dijo Gun para finalizar la conversación que estaba siendo un poco incómoda para él.
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La jornada había dado por finalizada y tal como lo sospechaba Title, salieron mucho más tarde de lo normal.
Eran casi la dos de la mañana cuando Gun ya estaba tomando sus cosas para ir a descansar.
-¿En qué te irás?-. Le preguntó Title, mientras guardaba sus cosas en una mochila.
-Supongo que en taxi. A esta hora el microbús no está pasando por esta área-.
-Bueno, yo te llevaré. Traje el auto de mi padre-.
-¿Y a él lo dejaste sin auto?-. Rio Gun.
-No, tonto. Mi padre compró un automóvil nuevo y el anterior me lo dejó a mí para que pudiera movilizarme-. Respondió Title.
-Ya veo-.
-Entonces, te llevo. Es peligroso que vayas solo a estas horas-.
-De acuerdo, vamos-.
Gun y Title se retiraron del restaurante y se dirigieron hacia el automóvil e iniciaron el viaje hacia el departamento de Gun.
El barrio en el que residía Napat, era un lugar escaso de riqueza, aunque no de pobreza absoluta. Se podría decir que residía la gente de clase media, y su departamento era pequeño, justo para dos personas.
Gun se bajó del automóvil e hizo señas a su amigo que se alejó rápidamente del lugar.
Al llegar a su hogar, se fijó que todas las luces estaban apagas, así que dedujo que Boat ya estaría durmiendo, por lo que entró con el mayor de los sigilos para no despertarlo. Entró a la habitación y allí estaba acostado su novio, quien le habló desde su lugar.
-¿Dónde estabas?-.
-En el trabajo-.
Boat se levantó de la cama y enfrentó a su pequeño novio.
-Tu trabajo de noche termina a las once y a las doce ya estás en casa. Y son casi las tres de la mañana. Será mejor que me digas dónde estabas y con quién-.
El cuerpo de Gun comenzó a temblar repentinamente en respuesta a la dura actitud de Boat.
-Ya te lo dije, estaba trabajando-.
Boat se acercó hacia Gun y lo tomó bruscamente del brazo derecho y lo zarandeó.
-¡Ay!-. Exclamó Gun.
-¡No me mientas, maldito! ¡Te vi bajarte de un auto!-.
-Era... era Title. Vino a dejarme-.
-¡Maldita perra mentirosa!-. Dijo Boat apretando aún más fuerte el brazo de Gun.
-¡P'Boat, por favor suéltame! ¡Me duele!-.
-Hasta que me digas la verdad, no te soltaré-.
Gun estaba temblando de miedo. Las reiteradas actitudes violentas de Boat, hicieron que naciera el miedo de Gun hacia esta persona.
-¡Te lo juro que fue Title! Su padre compró un auto nuevo y le regaló el anterior. Es sólo eso. Si quieres puedes llamar a mi jefe para corroborar que estuve trabajando-.
El temeroso chico, comenzó a botar algunas lágrimas mientras hablaba. Miraba a su novio con suplica para que no le hiciera daño.
Ante las palabras de Gun, Boat no le quedó más remedio que soltar al chico y lo empujó fuertemente haciendo que Gun cayera al piso.
Las palabras que le había dicho a su amigo esa tarde, eran falsas. A decir verdad, esta situación se venía repitiendo casi a diario desde hace tres meses, cuando Boat perdió su trabajo. Y el hecho de querer defenderse, realmente no podía hacerlo. Si bien era un hombre, comparado con Boat, que practicaba Muai Thai, era demasiado inferior como para protegerse. A cambio de eso, decidió no hacer enojar a su novio y seguir aguantando aquellos momentos de maltrato porque tenía la esperanza de que volviera a ser el chico noble y cariñoso del que se había enamorado.
-Apúrate en acostarte. Quiero dormir-.
-Sí. Ya voy-.
Gun se fue rápidamente al baño para limpiarse la cara. Observó su rostro en el espejo con un toque de ira por no poder hacer nada al respecto.
Se miró el brazo izquierdo y se percató que tenía un enorme moretón marcado. Tomó una pomada y esparció en toda la zona afectada. Luego, tomó su ropa de dormir y se la colocó rápidamente, fue a la cama y se acostó.
Boat volteó a abrazar fuertemente a su chico y se acercó a su oído, susurrando en su oído.
-Tienes suerte de que sea tarde, sino te lo haría ahora mismo-.
Gun no pronunció ninguna palabra y cerró sus ojos para dormir con el dolor y la tristeza de ser otra vez insultado y maltratado por su novio al que amaba tanto.
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Al otro día, Gun se levanta temprano para preparar el desayuno mientras su novio aun seguía dormido.
La jornada laboral era en la tarde así que tenía algún tiempo para para hacer algunos trámites.
Al terminar de ducharse y arreglarse, se dirigió a la cocina. Sacó algunos huevos, salchichas y pan de molde para tostar.
Arregló la mesa, colocando platos para dos y esperó a que hirviera el agua para preparar un poco de café.
Fue hacia el refrigerador y tomó un poco de jugo para servirlos. Estaba en eso cuando se dio cuenta que los huevos ya estaban listos.
-¡Mierda! Si nos los saco se quemarán-. Dijo en voz baja.
Cuando estaba colocando los huevos en un plato, sintió unas manos que acariciaban su cintura.
-Buenos días, cariño-. Dijo Boat.
-Buenos días-.
-Lamento lo de ayer, es sólo que no pude soportar que llegaras tan tarde. Pero te prometo que no volverá a ocurrir-.
Boat le dio un beso en la mejilla y Gun la aceptó. Dejó todo lo que estaba haciendo y se volteó para ver al chico mayor.
-P'Boat, no quiero que estés desconfiando de mí. No quiero que siempre estés enojado, así que por favor intenta calmarte, ¿sí?-.
-Lo sé, cariño. Lo siento-.
-De acuerdo, vamos a desayunar-.
La paz volvió al hogar de ambos, tomando un tranquilo desayuno y conversando de las cosas que harían en el día.
-Hoy me iré a practicar Muai Thai con Earth, así que me demoraré-.
-¿No vendrás a almorzar conmigo?
-¿Eres sordo?-.
-No, ya te entendí-.
-Bien, ya me voy-.
Tomó sus cosas y se fue sin decir siquiera adiós. Gun, como la mayoría de los días, se quedó solo en aquel departamento que muy pocas veces podía llamar hogar.
Boat salió de casa y caminó unas cuadras para encontrarse con su amigo Earth Pirapat.
-Hola, amigo-. Saludó Earth.
-Hola-. Boat habló con desgano.
-¿Qué pasa? No te ves de ánimo-.
Ambos entraron al gimnasio mientras seguían conversando.
-Es mi chico-.
-¿Pasó algo con él?-.
-Bueno, ayer llegó tarde y no pude hacer nada-.
-Sexo-.
-Sí-.
Earth se detuvo en la mitad del camino y le habló de frente a Boat.
-Amigo, debes hacerle saber lo que quieres. Si no lo haces, ¿cómo pretendes que esté a tu disposición-.
-Lo sé. Es sólo que... tal vez anoche tampoco tenía ganas-.
-Es su obligación darte lo que quieres-.
-Ya lo sé, para eso es mi novio-. Dijo Boat con voz de mando.
-¡Ese es mi amigo!-.
Lamentablemente, tenía un pensamiento totalmente erróneo con respecto a su novio. Para él, todo debía ser a su manera, sino las cosas no funcionarían.
-Esta noche, Gun sabrá una vez más el tipo de hombre tiene a su lado-.
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