CAPÍTULO XIII

135 23 1
                                    

CAPÍTULO XIII

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

CAPÍTULO XIII


La visita de los chicos había levantado el ánimo de Gun, por lo que desistió de volver a la cama, más bien fue a la cocina a ayudar a la sirvienta a preparar la cena.
El doctor ya había autorizado alimentos sólidos. Gracias a los cuidados de Mark en los últimos diez días, las cicatrices y moretones de Gun ya no eran visibles.
-Por favor, Khun Gun. No tiene que ayudarnos, es nuestro trabajo servirle-.
-Déjeme ayudar. No estoy acostumbrado a estos tratos, y me siento incómodo con ello-.
-Está bien. Puede comenzar picando la zanahoria, luego la coloca en el sartén para saltearla junto a otras verduras.
-De acuerdo, P'-.
Gun estaba muy entretenido, conversando temas de su trabajo y anécdotas con algunos clientes sin darse cuenta que, desde hacía unos minutos atrás, Mark lo observaba con una sonrisa en los labios.
Era la primera vez, desde que lo conoció, que había visto esa faceta de Gun, y sin lugar a dudas, le había encantado ver a Gun feliz. Era feliz como hace mucho tiempo no lo era. Una nueva meta se había propuesto.
"Prometo mantener esa sonrisa. Sin importar qué pase, definitivamente me encargaré de que vuelvas a ser feliz".
Sus pensamientos fueron interrumpidos por la voz femenina.
-Khun Mark. Bienvenido a casa-.
-Oh, buenas noches a los dos. Veo que estás con mejor ánimo-. Habló Mark dirigiéndose a Gun, luego de haber saludado con un wai a los presentes.
-Sí, la visita de mis amigos realmente me sirvió de mucho. Gracias por traerlos de vuelta-.
-No tienes que agradecer. Ellos estaban muy preocupados por ti, y creo que era necesario que estuvieran tranquilos-.
Mark acarició su cabeza y Gun le devolvió una sonrisa.
-Dentro de poco, la cena estará lista-. Interrumpió la sirvienta.
-No te preocupes, P', esta noche me iré a casa. Cenaré con mi padre. Por favor, encárgate de P'Gun-.
-¿Te vas?-. Respondió el chico.
-Sí-.
Gun dejó el cuchillo sobre la mesa y se dirigió hacia la empleada.
-P', ¿puedes continuar? Hablaré con Khun Mark.
-No se preocupe. Yo me encargo de todo-.
Gun y Mark se fueron hacia el despacho de trabajo, donde podían hablar tranquilamente.
Al cerrar la puerta, Gun habló.
-¿Cómo es que te vas? ¿Ya no vas a estar aquí?-.
-No, ahora debo atender mis negocios que dejé pausado-.
-Entonces, ¿qué pasará conmigo?-.
Mark se acercó a él y posó una mano sobre su hombro.
-Esta es tu casa. Aquí vivirás. No tienes que preocuparte por nada, ya que nadie de mi familia sabe que tengo este departamento, salvo mis guardaespaldas y chofer. De todas formas, vendré de vez en cuando a ver cómo marcha todo-.
Gun agachó la cabeza intentando cortar el contacto de aquellos ojos penetrantes que se sumergían en lo más profundo dentro de él, ruborizándolo por completo.
-De acuerdo-.
-¿Es todo? Entonces, me iré-.
Mark se dirigió a la puerta y la abrió con la intención de salir.
-Espera. Olvidé decirte otra cosa-.
-¿De qué se trata?-.
-Mañana volveré al trabajo-.
Mark se devolvió desde la puerta y lo miró de frente.
-¿Estás seguro de eso?-.
-Sí, quiero seguir trabajando duro para compensarte por todo lo que has hecho por mí-.
-No es necesario-. Sonrió Mark.
-Sí, lo es. Yo soy tu empleado y quiero trabajar duro para ti-.
-Está bien. Sólo te pondré algunas condiciones-.
Gun simplemente frunció el ceño ante la frase de Mark.
-Desde este momento, no vas a volver a salir solo. Uno de mis guardaespaldas, ahora será tuyo y se encargará de llevarte a donde tú quieras-.
-¿Qué?-.
-Te acompañará a todas horas, salvo cuando estés aquí-.
-Pero...-.
-No acepto un pero, tampoco una negativa-.
Al parecer, todo indicaba que no tenía alternativa alguna. Dijera lo que dijera, su jefe no echaría pie atrás. A regañadientes aceptó.
-Bien, espera un momento-.
Mark sacó su celular y habló a uno de sus chicos. En menos de cinco minutos, el empleado llegó.
-Kao, desde ahora servirás a P'Gun, ¿de acuerdo?-.
-Sí, Khun-. Se volteó a ver a su nuevo jefe y saludó con un Wai.
Mark giró su cabeza y miró a Gun.
-Gun, él es Kao, uno de mis mejores hombres. Él vive en el departamento contiguo, y puedes llamarlo en caso de que necesites algo. Tiene tus horarios de trabajo, así que vendrá por ti y te recogerá a la salida, ¿entendido?-.
-De acuerdo, Khun Mark-.
-Bien, ya me voy. Kao, quedas a cargo-.
-Sí, Khun-.
Se dirigió hacia la puerta de salida y se fue.
Mark estaba consciente de que Boat buscaría a Gun por mar cielo y tierra, y no dudó en liberar a uno de sus mejores hombres para cuidar del chico mientras él no estaba.
Debía hacer su rutina diaria para no levantar alguna sospecha que pudiera delatarlos. Por eso tomó la decisión de volver a la mansión y seguir con sus sucios negocios.
-¿Ya comiste?-. De pronto preguntó Gun.
-No, Khun-.
-Bien, vamos a la mesa-.
Con una amplia sonrisa, lo tomó de la mano guiándolo hacia la mesa y lo sentó, luego se fue directo a la cocina
-P', tenemos un invitado, por favor, sirve dos platos-.
-Sí, Khun-.
-Después de esto, ya pueden retirarte. Yo dejaré todo limpio-.
-Lo siento, no podemos. Tenemos órdenes explícitas de atenderlo hasta la medianoche-.
-¿Medianoche? ¿Y cómo se irán a casa?-.
-No se preocupe, el señor arrendó un departamento para ambas en este edificio-.
Gun casi se ahoga con su propia saliva al impresionarse con tal información. Se preguntó cuán millonario era esta persona como para haber comprado una cadena de restaurantes lujosos y arrendar grandes departamentos para sus empleados.
La comida ya estaba lista y la empleada reparte los platos. Gun se sienta junto a Kao y comienzan una conversación que parecía más de amigos que jefe y subordinado.
Momento preciso para sacar algunos detalles de la vida de su jefe.
-¿Desde cuándo trabajas con el jefe?-.
-Desde hace algunos años-.
-¿Y a qué se dedica?-.
-A los negocios-.
-¿Qué tipo de negocios?-.
Kao miró de reojo y se dio cuenta de las intenciones de Gun. Recordó la orden de su jefe: "Bajo ningún motivo, Gun debe enterarse de mi trabajo" Entonces, sólo reveló la única parte que podía ser contada.
-Restaurantes, resort, lugares turísticos...-.
-Ya veo. Ahora comprendo. Y, ¿por qué debe tener guardaespaldas?-.
-Es sólo por precaución. Tanto él como su padre los tienen. Además de tener cada uno su propio chofer, aunque saben conducir-.
-Y el chofer del padre de Khun Mark es P'Boat, ¿verdad?-.
-Sí-.
Gun decayó su ánimo y el apetito se esfumó. Definitivamente, esa persona era demasiado influyente en su vida, tanto así que, sin su presencia, podía dominar los sentimientos del chico.
-¿Se encuentra bien?-. Preguntó Kao al ver la reacción de Gun.
-Sí, claro. Es sólo que se me quitó el apetito, pero estoy bien-.
-¿Desea ir a dormir?-.
-No, gracias. Aún es temprano-.
Gun prosiguió comiendo, aunque su estómago no lo deseaba. Prefirió acompañar en la cena a su empleado-.
El tiempo pasó rápidamente y Gun decidió ir a dormir. No hubo nada interesante en la televisión y no tenía mucho que agregar en sus celulares. No podía usar sus redes por miedo a que Boat revisara.
-Khun Gun-. Llamó Kao parado sobre la puerta del dormitorio.
-¿Sí?-.
-Khun Mark me pidió que le entregara esto-.
Alzó la mano y entregó a Gun una bolsa grande con una caja en su interior.
-¿Para mí?-.
-Sí-.
Gun tomó la bolsa y abrió la caja. De ella sacó un computador portátil y una nota.
"Sé que podrías aburrirte, así que te lo compré para que pases el rato. Agregué algunas aplicaciones donde puedes ver películas. Algunas son de paga, así que me encargué de ello. Disfrútalo. M."
Gun simplemente sonrió y abrió el notebook para revisarlo y jugar un momento con él.
-Me retiro, Khun Gun. Mañana vendré temprano a recogerlo. Buenas noches-.
-Sí, gracias. Buenas noches, Kao-.
El trabajador dejó a Gun solo y este se dispuso a acostarse con su nuevo aparato. Estuvo un par de horas viendo algunas series hasta que lo apagó para dormir.
Apenas cerró los ojos, se percató que sus empleadas y Kao se habían ido, por lo que en aquel departamento, él estaba completamente solo.
Era una persona que siempre estuvo sola, desde que era pequeño. Sus padres trabajaban todo el día y él siempre quedaba a cargo de la casa. Luego, cuando ingresó a la Universidad se mudó solo a Bangkok hasta que conoció a Boat.
Miraba a su alrededor en plena obscuridad con el conocimiento de que en el dormitorio que quedaba al lado, no estaba el chico protector.
Era extraño que, los días anteriores, cuando estaba Mark, Gun podía descansar tranquilo y dormir sin problemas. Pero ahora era demasiado complicado. El rostro de aquella persona aparecía de repente, llenando a Gun de miedo y angustia.
Sin pensarlo, tomó su teléfono y llamó a una de las dos persona que tenía en su lista de contactos.
A la tercera tonada, la llamada fue tomada.
-¿P'Gun?-.
-Khun Mark, lamento llamarte, es...-.
Al otro lado del teléfono, Mark estaba frente a su computadora, respondiendo algunos mensajes sobre negocios oscuros.
Se extrañó que Gun de pronto se quedara en silencio.
-¿Pasa algo?-.
-Nada malo... es sólo que...-.
-¿Qué te sucede?-.
-Khun Mark, estoy solo. Tengo miedo, sé que él vendrá por mí-.
Sin poder evitarlo, Gun comenzó a botar lágrimas de dolor al recordar aquella noche.
-Escucha, P'Gun. No te hará daño. Ya no puede hacerlo-.
-Sí, pero no estás aquí. Temo cerrar mis ojos y al abrirlos encontrarme con él-.
Mark sintió un dolor punzante en su corazón y supo que la otra persona aún no podía estar solo y seguir una vida normal. Definitivamente, necesitaba de sus cuidados, pero no cuidados físicos.
-P'Gun, quiero que me escuches atentamente-.
-Sí-.
-Cierra tus ojos y sólo escucha el sonido de mi voz. En estos momentos yo estoy contigo. Estoy a tu lado protegiéndote como te lo prometí, ¿puedes sentirme?-.
-Lo hago-.
Mark, con sus palabras logró calmar a Gun hasta que este se quedó profundamente dormido. Su misión había sido completada.
Inmediatamente después de colgada la llamada, envía un mensaje a Kao que fue leído y contestado rápidamente.
"Mañana dormirás en el departamento de P'Gun".
"Sí, Khun".
Dejó su celular sobre la mesa y dejó todo lo que estaba haciendo, y se encaminó hacia la puerta de salida. Estaba dispuesto a ir a aquel departamento donde estaba el hombre solo. De pronto, se encontró de frente con la persona que había olvidado que vivía allí.
-Khun Mark, buenas noches-.
-Buenas noches, Boat-.
______________________

El Oscuro ProtectorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora