Conocidos •YoonTae•

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La habitación había entrado en un incómodo silencio, en el cuál todos eran espectadores del espectáculo que los destinados montaban sin darse cuenta.

Taehyung había llamado al alfa sin dudarlo, con el nombre del contrario en su boca antes de siquiera poder pensarlo, todo gracias a Hwasa, quien había permitido que el olor de su destinado se hiciera presente al abrir la puerta de la pequeña habitación.

Cuando el pálido entró, los colores subieron a sus mejillas, sin poder evitar sentirse avergonzado por ver la sonrisa que era otorgada a él. El omega tenía en sus manos el pequeño ramo, siendo su entretenimiento desde que se había levantado, y supo que el notar eso había hecho que el alfa se alegrara, pues la expresión de felicidad que tenía se hizo un poco más grande.

-Hola, omega. - dijo el peligris, con voz ronca.

-Hola, Suga. - respondió, con una sonrisa que era especialmente para él.

La incomodidad que pensó que tendría al verlo, parecía solo una ilusión, sintiéndose relajado al verse rodeado por el aroma que brotaba del alfa, pero el ambiente que habían formado en pocos minutos se vio roto abruptamente por Hwasa.

-¿Ya nos dirás quién eres? - preguntó, con evidente molestia, seguramente por presenciar aquello sin poder entender absolutamente nada.

Jungkook, en cambio, se dedicó únicamente a escanear al alfa pálido con la mirada, mientras que sus demás compañeros intercambiaban miradas, sin entender nada y asumiendo que su compañero tenía pareja, cosa que no les parecía rara cuando Taehyung era un omega realmente hermoso.

-Yo... - empezó a hablar el peligris, siendo interrumpido por Taehyung rápidamente.

-Es Suga. - dijo con rapidez, buscando terminar con eso rápidamente.

-Tae, le pregunté a él. - dijo la pelinegra, con una mueca en su rostro que para el omega no pasó desapercibida.

-Y yo te respondí en su lugar, Hye-noona.

-Tae.

-Noona. - respondió, siendo todos testigo de la tensión que se formaba entre ambos amigos, tensión que fue cortada de forma brusca por el alfa más joven.

-Chicos, ya llevamos bastante tiempo acá, deberíamos dejar que Tae reciba a sus visitas, incluso le trajeron desayuno, ¿cierto? - habló Jungkook, ganándose una cara de confusión de Hwasa y el asentimiento del peligris ante lo último que dijo.

-Jungkook, no... - empezó a decir Hyejin, buscando debatir, pero el menor la vio, señalando al omega con la mirada.

Y es que Taehyung se estaba poniendo nervioso, poniendo su aroma ligeramente agrio y aumentando sus latidos.

Hyejin intercalo su vista entre sus amigos, suspirando con frustración ante la incomodidad de no saber nada ni entender lo que estaba pasando. La alfa solo quería respuestas de porqué su preciado amigo había besado a un desconocido en sus narices, desconocido que ahora aparecía en el lugar con una bolsa de comida y las mejillas rojas solo con ver a su menor. Solo deseaba preguntar lo que se aguantó apenas entró a la habitación del castaño.

Sus compañeros se despidieron mientras salían uno por uno, siendo los últimos Hwasa y Jungkook. Hwasa con una última mirada de advertencia al pálido, y Jungkook con una mirada seria, que había intimidado más al omega al saber que solo le vendrían interrogatorios de ahora en más.

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Editado 03/08/24