Contrato de amor •|Kookmin AU|•

Reinicio

Narra Jungkook

Conduzco a casa con Jimin completamente dormido a mi lado...
Aún no creo todo lo que acaba de pasar.
Soy una bestia.
Perdí totalmente la cabeza cuando lo vi con ese tipo un poco más follando en el medio de la pista de aquel club, me volví loco y no resistí a la idea de hacerlo mío cuando tuve la oportunidad de demostrarle  a quien pertenece.
Mi cabeza es un completo lío ahora mismo.
No me entiendo...

Llego al estacionamiento de nuestro edificio y tras varios intentos por despertarlo no lo consigo, por lo tanto lo cargo en brazos y como puedo llamo al ascensor.
Él es menudo pero no todos los días uno anda con alguien a cuestas.

Sacar las llaves de mi bolsillo fue todo un caso, pero lo logro y una vez entro al departamento miro el sofá donde lo encontraba durmiendo noches atrás y sigo de largo hacia mí habitación con él en brazos.
Tiro de las mantas para abrir la cama y lo recuesto en ella. Lo observo, veo que se remueve un poco pero enseguida encuentra la posición y sigue durmiendo sin ningún tipo de preocupación.
En cambio yo soy un mar de contradicciones.

¿Si él supiera todo lo que está causando en mí? Ni siquiera lo imagina...

Le quito los zapatos y sigo con su ropa... Tenerlo así es una maldita tentación.
Estoy obsesionado con este chico y con lo que me hace sentir cada vez que estamos juntos.
Lo quiero para mí...
Es algo que ya decidí.

Lo cubro con las sábanas y me interno en el vestidor debo armar la maleta con lo necesario para el viaje de mañana a Japón, así que meto tres mudas de ropa y lo básico que necesitaré para mí estadía, que espero sea corta y volver cuánto antes a Busan.

Cepillo mis dientes y me quito la ropa. Luego de conectar mi celular al cargador pongo la alarma para poder despertar a tiempo y no perder mi vuelo. Estoy agotado.

Me meto en la cama y al mirar a mi lado veo que él está tal cual lo dejé, no se ha movido para nada.
Escucho su respiración acompasada y como me es imposible tenerlo lejos, lo atraigo hacia mi y lo acurruco entre mis brazos.
Es así que me siento satisfecho, con ese simple contacto.

Tengo debilidad por su piel...

Extraño un poco mi vida en París...
Allá no existían los problemas. Ni las corridas de un problema a otro.
Todo era diversión de sol a sol, pero lo bueno se acabó cuando pisé Corea.
Mi vida se convirtió en un verdadero caos, mis padres, la empresa, las responsabilidades y luego... él.

No sé lo que siento. No sé lo que quiero. Lo único que sé con certeza es que si me dejo llevar por esto que brota lentamente en mí voy a enamorarme de él y no quiero caer de nuevo en esa dependencia emocional con otra persona.
Me bastó una vez para comprender que ese sentimiento puede ser tan tóxico al punto de hacerte añicos.

No estoy dispuesto a pasar por lo mismo... 

Aún conservo los recuerdos. Siguen vivos dando vueltas por mi cabeza y dos por tres salen a la superficie para lastimarme otra vez.
Los recuerdos de ella y de mi hermano juntos.

Gracias a lo que pasó hace años perdí la fé en el amor. Me volví desconfiado hasta de mí sombra.

Primero me negué a creerlo, luego me las agarré con todo el mundo buscando culpables y cuando se me pasó el enojo traté de recuperarla a toda costa, no me importaba que tendría que luchar contra mi propio hermano; pero cuando acepté que había perdido me fundí en una terrible depresión.
Dolía tanto que no podía respirar, aún hoy me cuesta aceptar que está casada y embarazada de mi propio hermano mayor.
Del perfecto JungHyun...

Trato de ahuyentar mis pensamientos y concentrarme en dormir... Pero al mirar su figura antes de cerrar los ojos descubro que me gusta como se ve en mis brazos, me gusta demasiado.
Él es precioso y logra atraparme en su paz...
Lo aprieto más contra mi cuerpo y me pierdo en su aroma. Ni siquiera me doy cuenta cuando me quedo dormido.