Eran las 5 pm, Justin ya se había marchado a su casa hacía algunas horas, y yo me encontraba limpiando mi casa, cuando mi teléfono comenzó a sonar deteniendo la música de Spotify.
-¿Si?-murmuré realmente aterrada, porque era un número desconocido y eso me hacía creer que era Brad.
-Señorita Houston, soy el detective Charles
Mis hombros cayeron en alivio, y de pronto me encontré extrañada por su llamado.
-Por supuesto, ¿qué se le ofrece señor Charles?-pregunté a medida que bajaba de la silla en la cual estaba de pie para poder limpiar las alacenas de la cocina.
-Necesito que se presente en la estación en cuanto pueda, afortunadamente el día de ayer pude llevar la denuncia con un juez a pesar de la hora, y la orden de detención ya está en manos de la policía
Mi corazón zumbó en mis oído, y de pronto todo se volvió jodidamente real.
-Sería muy útil que usted pudiera presentarse aquí, ya que el perito está presente y podría tomar unas fotografías de las lesiones para que formen parte de la causa antes de que desaparezcan-continuó hablando sin detenerse.
El aire se atascó en la parte baja de mi garganta y sólo pude asentir con la cabeza.
Luego de unos pocos segundos en silencio me sentí una estúpida, porque por supuesto, él no me veía.
-Lo siento, claro que estaré allí en cuanto pueda-balbuceé nerviosa.
-Muy bien, la espero
Colgué el teléfono sin tener la capacidad de responder, y me quedé allí estática por algunos minutos.
Subí las escaleras y me puse unos shorts tejanos y una camiseta negra que me quedaba holgada, no iba a esforzarme mucho, de todos modos supuse que iba a tener que quitar mi ropa o algo similar para que pudieran tomar las fotografías.
Me estremecí ante la idea de tener que quitarme la ropa en ese edificio oscuro y horrible frente a algún hombre adulto y su cámara de fotos.
Era una mierda, pero era lo que debía hacer, el detective Charles había explicado algo de las pruebas cuando había hecho la denuncia, y aunque no había logrado prestar demasiada atención, supuse que era necesario.
Le envié un mensaje a Justin, diciéndole que debía ir a la estación de policía porque necesitaban de mi para algunas cosas, y él dijo que enviaría un abogado de confianza conmigo, aunque le pedí que él no fuera.
Si bien deseaba sentirme acompañada, sabía que Justin había pasado muchas horas fuera de casa por mi, y ya no quería molestarlo.
En ese momento apestaba no tener a mamá conmigo.
Caminé a la estación tratando de procesar el hecho de que Brad iba a ir detenido por lo que había hecho conmigo, era satisfactorio y jodidamente extraño en iguales medidas.
Cuando me encontré fuera del enorme edificio gris, me dispuse a caminar a la puerta, pero una voz femenina llamó mi nombre.
Giré sobre mis pies y encontré a una hermosa mujer de unos 30 años, o eso supuse, pues aparentaba ser adulta pero era increíblemente pequeña. Parecía medir lo mismo, o incluso menos que yo.
-¿Si?-pregunté confundida mientras ella se acercaba a paso seguro hacia mi.
-Soy Francesca Simons-extendió su mano en forma de saludo.
La tomé aún algo extrañada.
-Justin me envió-agregó con una sonrisa amplia al ver mi expresión.

ESTÁS LEYENDO
El Padre de Mi Mejor Amiga|Justin Bieber|Editada|
FanficEmma Houston lleva la vida corriente que podría aburrir a cualquiera, sus únicos problemas reales se encuentran en las dudas e incertidumbres que genera su futuro. Esto indudablemente cambia cuando una parte oscura y olvidada de la vida de su mejor...