El Padre de Mi Mejor Amiga|Justin Bieber|Editada|

Capítulo 52: Ahora eres toda mía

Cuando mi respiración se normalizó sentí mi cuerpo pesado del cansancio.

Era gracioso, pues todo lo había hecho Justin.

Deslicé mis manos por la espalda de Justin acariciándolo y sintiendo mi piel arder al encontrarse en contacto con los músculos de su espalda.

Él levantó la cabeza y me sonrió con sus dientes perfectos.

-¿Estás bien?-preguntó observando mis ojos.

Asentí con una sonrisa y él me dio un beso que me hizo sobresaltar.

-Gracias-dijo mirándome.

-¿Por qué?-fruncí el ceño.

-Por dejarme ser el primero-murmuró y acarició mi cabello.

Fui consciente de que mi sonrisa se volvió enorme y puse las palmas de mis manos en mis mejillas para quitar el calor que me inundaba.

Él se quitó de encima mío tomándolo con cuidado cuando tuvo que salir de mi cuerpo y fue a arrojar el condón a la basura.

Volvió caminando con esa agilidad y seguridad que lo caracterizaba, incluso encontrándose  desnudo y ante mi atenta observación.

-¿Quieres ir a la cama? No quiero que mañana te duela la espalda-soltó una risita a lo bajo que resonó en toda la habitación.

-Claro-murmuré y luego de ponerme la camiseta de Justin para cubrir mi desnudez, ambos subimos las escaleras y nos adentramos a una hermosa habitación decorada en color champagne.

Una cama enorme y con una manta a juego con el color de las paredes se encontraba en el medio de la habitación, y un espejo de cuerpo entero adornaba la pared a uno de los lados de la cama. Se veía increíblemente acogedor para ser una casa de vacaciones, las luces parecían ser cálidas al igual que todo lo que adornaba el lugar que era madera pulida.

Justin caminó al baño de la rústica habitación y yo me entretuve observando el lugar, me quedé mirando las fotografias que yacían sobre una cómoda que estaba frente a la cama.

La primera foto era Justin con unos trece años, abrazado a una niña rubia un poco más grande, ella era hermosa, y al observar sus ojos mieles como los de Justin, supe que esa era su hermana

Miré otra de las fotos, era un hombre de unos cuarenta años o menos, sonriendo y levantando el pulgar hacia la camara, llevaba una gorra de béisbol y sus camiseta arremangada dejando ver una infinidad de tatuajes en sus brazos.

La tomé entre mis manos y la observé de cerca, cuando sentí unos brazos envolverse en mi cintura, Justin apoyó su mentón en mi hombro y observó la fotografía con nostalgia.

-Ese era mi padre-murmuró y oí la tristeza en su voz.

-Era muy guapo-dije haciéndolo reír.

-Si-dijo con tono de orgullo-cuando me acompañaba a los partidos de béisbol, las madres de mis amigos se morían por el y creían que era mi hermano mayor-agregó divertido y luego suspiró-pero jamás se dejo llevar por ninguna mujer, él amaba a mamá

Quise preguntarle a Justin por su madre, porque no recordaba que él hubiera mencionado que paso con ella luego del embarazo de Martah, pero sentía sus palabras tristes y lo tenso que se ponía al hablar sobre su familia así que preferí dejarlo.

Devolví el portarretratos a su lugar, y me volteé para observarlo.

Aún no me creía que estuvieramos asi, me parecía increíble por tocarlo y besarlo tan libremente.

-¿Enserio te sientes bien?-preguntó mirándome y pareciendo estudiar mis expresiones.

-Si-respondí-sólo algo extraño al caminar, pero nada mas