Capítulo 92: No me protegió

2.3K 81 5
                                    

Desperté por la luz del sol colándose por la ventana, la habitación de Justin se veía más hermosa de día.

Estaba sola en la cama, pero de todos modos desperté sintiéndome cálida y abrazada por esas suaves sábanas, y también por el aroma de Justin invadiendo mis sentidos.

Era emocionante la sola idea de despertar en su cama al menos una vez en la semana.

Pronto una sensación de adrenalina se extendió desde mi estómago a todo mi cuerpo cuando mis neuronas lograron despertar.

¡Comenzaba nuestro viaje!

Me levanté y caminé a la habitación de Amber para buscar algo de ropa, y descubrí que ella tampoco se encontraba en su habitación.

Bajé a la cocina mientras encendía mi teléfono para verificar la hora, temía que fuera demasiado tarde.

10 am

Encontré a Justin y Amber desayunando juntos en la cocina y riendo bajito, los innumerables libros de Amber se apilaban en la barra de la cocina, como si ella hubiera estado estudiando un momento antes.

Los ojos de Justin se posaron en mi y sonrió al momento que me extendía una taza rosada que parecía tener preparada para mi.

-Buenos días princesa-murmuró con esa voz ronca que adquiría en las mañanas.

-Buenos días-respondí tomando la taza que contenía té y tomé asiento junto a ellos.

-No quise despertarte, necesitas descansar para el viaje-sonrió y pasó una mano por la parte trasera de su cuello.

Se veía tan malditamente atractivo como siempre en esa camiseta cuello en V color rojo, y pantalones color beige que envolvían sus torneadas piernas, se había colocado una cadena corta plateada que, por alguna razón, lo hacía ver aún más joven de lo normal.

-Gracias-respondí con una sonrisa y sentí como mis mejillas comenzaban a tornarse rojas cuando vi por el rabillo del ojo a Amber poner los ojos en blanco.

Sabía lo que quería decir.

"Ustedes son asquerosamente cursis"

Y aunque jamás lo admitiría en voz alta, entendía a lo que ella se refería, no eran las palabras, sino que parecíamos estarnos mirando como dos niños embobados, o al menos, era consciente de que yo lo hacía cuando él hablaba.

-¿A qué hora despertaron?-pregunté curiosa mientras tomaba el líquido caliente de mi taza.

-A las cinco, quería adelantar papeleo para no ser un completo desastre el lunes

Joder, apenas había dormido.

Amber hizo una mueca, observándolo como si no estuviese diciendo la verdad.

-Admite que despertaste porque eres un maniático que tiene que tener todo controlado antes de irte-dijo divertida, Justin la observaba con una ceja arqueada-vamos...estuviste toda la mañana caminando de aquí para allá como si estuvieras organizando una maldita boda

Escondí mis labios dentro de mi boca reprimiendo una sonrisa, porque podía imaginarlo, él realmente no se relajaba casi nunca. Esas últimas semanas desde que Martah se había marchado había estado más relajado de lo normal, pero desde que había mencionado el viaje a Francia, podía apreciar que estaba todo el tiempo pensando en ello.

El Padre de Mi Mejor Amiga|Justin Bieber|Editada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora