Jeggy | Jerry Baynard

Epílogo : ¿Dónde?

ღ| Jerry

La primera vez que te vi, honestamente, no sabía que ibas a ser tan importante para mí.

Se que chocamos un par de veces antes de si quiera tener una conversación decente, o si quiera vernos sin querer matarnos con la mirada.

¿te odiaba? Supongo que nunca sentí eso por ti, admito que era divertido escucharte usar mi nombre a tu antojo y, aunque lograba a irritarme un poco, la verdad era que se sentía vacío cuando no estabas a mi lado.

Me encanta que me mires y sonrías sin ninguna explicación.

— ¡Nathan!

Y ahí estabas de nuevo, corriendo detrás de nuestro pequeño de 8 años que se rehusaba a usar un corbatin en su cuello, podría considerarse que era un alma libre.

— ¡Hey! ¿Qué sucede? — Me agache para estar frente al castaño que estiraba sus brazos para darme un gran abrazo.

— Mamá quiere ponerme una correa — El niño hizo un puchero bastante tierno, cuando se molestaba era igual a su madre.

— Pero es una fecha importante ¿Ya olvidaste que es noche buena? — Nathan arrugó el ceño, sabía que debía obedecer para ser un niño bueno y que sus regalos estuvieran debajo del árbol mañana a primera hora.

A regaña dientes mire a nuestro hijo caminar hacia ___ para dejar que el corbatin color vino, que hacía juego con su traje hecho a la medida, descansara en su cuello.

— ¿Por qué no vas a jugar con tus primos? Los invitados están por llegar.

Nathan asintió emprendiendo el camino al interior de la casa blanca, ___ se acercó a mí para tomar mi mano, era una vista hermosa, estar a las afueras de París y poder ver la blanca nieve que se extendía por los terrenos era hermoso, la nieve era romántica y cada tanto se podía observar algunas flores que habían sobrevivido a las heladas.

— Creo que deberíamos entrar, aún no nos hemos cambiado — ___ se giro para verme y yo hice lo mismo — Recuerda que tu familia vendrá desde Avonlea para reunirnos.

— Esperemos un poco más — Pedí — No recuerdo cuando fue la última vez que vine a mi pueblo natal.

Ambos nos quedamos admirando la belleza de mi hogar hasta que el frío invierno nos obligó a entrar para ponernos encima algo más abrigado.

Era increíble lo que habíamos logrado juntos con nuestro esfuerzo, habíamos venido a Francia para visitar lo que restaba de mi familia, y ahora podía traer a mis padres junto a los demás, se que vendrían cosas mejores, además estaba emocionado pues esta noche no solo mi familia se reuniría para cenar, logré escuchar que personas importantes de parte de ___ vendrían, me preguntó ¿quién será?

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Las decoraciones estaban listas y prácticamente todos ya estaban cambiados en la sala, note a Jerry saludar a sus hermanos eufórico y ver a sus sobrinos jugar con Nathan, sonreí enternecida.