Jeggy | Jerry Baynard

Guerre

Gertrude toco la puerta principal de aquella casa, pronto la recibió Marilla, aquellas dos se habían llevado muy bien, eran puntos buenos para mi pues eso significaba estar mas cerca de Green Gables y, por ende, de Jerry.

— Gertrude ¿Te quedas a desayunar?

— En realidad solo vine a traer esto — Mi dama de compañía le extendió a Marilla un rollo de hilo — Es una muestra de gratitud por el hilo que me prestaste aquella vez, cuando ___ había rasgado su vestido para la pantomima navideña.

— No es nada ¿Por qué no te quedas un poco más?

— Tengo que llevar a ___ hasta la escuela — Contesto Gertrude.

— Anne puede acompañar a ___ si así deseas.

Mire a Gertrude suplicante, la anciana se notaba que no quería caminar además quería estar con Marilla, no tuvo opción mas que aceptar. Gertrude asintió.

— Perfecto — Le diré a Anne que baje. Marilla y Gertrude ingresaron a la casa, yo me quede un poco atrás, no quería entrar, aún.

Deje mi cesta en la puerta y camine por Green Gables mirando hacia varios lados para encontrar al francés. Lo halle cerca del gallinero junto al señor Matthew.

— Buenos días — Salude sonriente.

— Buenos días ___ — Dijo Matthew levantándose del suelo junto con un balde — ¿Esperas a Anne?

Asentí enérgica, luego miré lo que Jerry estaba clavando en el suelo — ¿Qué hacen?

— Hay un zorro que ha estado llevándose las gallinas, planeamos atraparlo y vender su piel — Contesto Jerry sin ningún tipo de remordimiento.

Por alguna razón me enfurecí, no quería que lastimaran a un animalito — Al que deberían de arrancarle la piel es a ti, Jeggy — Espete enfadada dándome la vuelta.

Vi de reojo como Matthew y Jerry se miraron confundidos por mi reacción, el chico se encogió de hombros — Mujeres — Escuché que dijo, aprete mis puños mientras seguía caminando.

— ¿Cree que porque es un chico bonito puede decir tantas idioteces? — Murmuraba enojada, seguí reclamándole a Jeggy indirectamente en voz baja mientras miraba el suelo hasta que choqué con alguien enfrente mío. Mire a Anne quien me miraba con los labios entre abiertos y una expresión de felicidad.

— Ho-hola Anne —Tartamudeé nerviosa — ¿Escuchaste lo que dije?

— Jerry es tu alma gemela — Soltó después de unos segundos, yo abrí mis ojos sorprendida, casi me atraganto con mi propia saliva.

— Anne — Le regañe mirando a los lados por si alguien estaba cerca, la tome del brazo para comenzar a caminar juntas — No digas eso en voz alta.

— ¿Por qué? El amor que tú y él tienen es puro y hermoso, no debería ser ningún secreto — Suspiro — Ojalá yo tuviera un amor como el tuyo.

— Anne, ni si quiera puedo estar junto a el mas de unos minutos sin querer insultarlo — Rodé los ojos.

— Del odio al amor hay un estrecho camino, ___ — Me sonrió — Deberíamos contarle a Diana.

— ¡No! — Le pare cuando hizo ademan de irse, seguramente con su emoción puede decir esas cosas frente a Gertrude y me castigaría severamente si sabe que utilizo las visitas a Green Gables para ver a Jerry. Anne frunció el ceño sin entender — Es que me distraigo mucho — Comencé a mentirle, no quería decirle la verdad de que la vieja era muy controladora — No logro concentrarme en las clases y pensar mucho en este asunto me hará mal, lo mejor será dejarlo en el olvido y tratar de prestar más atención a mi futuro.