Diabólica tentación (Billdip) #PremiosGravity2023

36: ¡Hagámoslo!

– ¡Señor!, la señal del demonio se halla en el siglo XXI de Gravity Falls, lentamente recobra fuerza y comenzará a darse cuenta de ello en un par de días según nuestros análisis – el guardia del tiempo corrió tan pronto como había notado el pequeño punto rojo en el monitor hacia la oficina del Padre Tiempo, quien comenzaba a preguntarse la razón por la que habían tardado tanto en hallar al mayor criminal de la galaxia

– ¡Perfecto!, debemos ir por él de inmediato para juzgarlo por sus crímenes

– Le recuerdo que no podemos hacerlo, aún no ha hecho nada que le inculpe de un deseo involuntario en el Pines, además, si nos entrometemos con él en estas circunstancias, podríamos destrozar parte del ciclo temporal... debemos ser pacientes y atacar en el momento preciso

– Ya veo, en ese caso monitoreen todos sus movimientos, cualquier destrozo por mínimo que sea nos ayudará a juzgarle como debía ser antes del Globnar – espetó el anciano mientras observaba la enorme pantalla frente a su rostro donde se mostraban a Dipper y Cipher manteniendo una charla

– Deberíamos ir al pueblo, tengo hambre – se quejaba el rubio mientras el Pines se mantenía escribiendo algunas cosas en su diario – Dipper, tengo hambre – canturreaba mientras trataba de interponerse en los pensamientos del menor

– ¡Bien!, vamos a desayunar algo y directo al bosque después de eso

– ¡Si! – gritó alegremente el rubio encendiendo sus manos en azul de forma involuntaria, el castaño inmediatamente trató de apagarlas al escuchar a su tío aproximarse a la cocina

– ¡Nada de salir! – recriminó Ford al entrar a la pieza, estaba a punto de aclarar los detalles del castigo cuando observó a ambos chicos sonreírle de forma sospechosa y esconder las manos del ambarino tras sus espaldas – ¿Qué traman?

– Nada Tío Ford, ¿qué nos estabas diciendo?, pensábamos ir a desayunar y luego de expedición por el bosque – alegó prontamente el menor del grupo mientras se aseguraba de poder mostrar las manos de Cipher sin ser descubiertos

– Oh cierto, respecto a eso, están castigados, ambos, no podrán salir durante un par de días, si quieren algo de la tienda deberán pedírselo a Mabel o a cualquiera en la casa, no puedo permitir que anden por el bosque a altas horas de la noche sin saber lo que les sucede, ¿entendido?

– Pero Tío prometemos ser más cuidadosos con el tiempo, tú sabes mejor que nadie que necesito esta investigación – rogaba el castaño alejándose del rubio que miraba con cierta decepción toda la escena

– No Dipper, mis sensores indican que hay una criatura poderosa y posiblemente peligrosa rondando en los alrededores, odiaría que te toparas con ella y no regresaras

– ¿Qué acaso no confías en mí?, ¿en nosotros? – inquirió tomando del brazo a Bill para que se acercase y formara parte de la conversación

– Sabes que no me refiero a eso Dipper, además, ese chico debió irse hace semanas, sin ofender – masculló dirigiéndose al mayor de ambos chicos, quien solo se encogió de hombros

– ¡Él se quedará!, y ese no es el punto de esta conversación, ¿no me crees capaz de lidiar con este sitio como tú lo hiciste?, tenías mi edad cuando llegaste aquí y dudo mucho que las criaturas hayan sido todas amables

– Dipper...

– ¡No!, yo quiero mostrar que puedo hacer las cosas por mí mismo, me pediste que no te decepcionara y eso estoy tratando de hacer, ¡mírame!, ya no soy un niño pequeño, soy un adulto y así espero ser tratado

– ¡Entonces actúa como tal! – Recriminó el mayor dejando callado al castaño – Dipper yo...

– No era mi intención intervenir pero creo que ha dicho suficiente, vámonos – el demonio tomó de la muñeca a su pareja y se alejó de la escena con él hasta desaparecer por la puerta principal, caminaron todo el camino hasta la cafetería de Linda Susan en completo silencio, se había vuelto rutina desayunar allí por lo que la mujer ni se molestó en preguntar lo que deseaban comer y simplemente llevó las órdenes a su mesa – ¿estás bien? – el menor negó con la cabeza para después tomar el tenedor y comenzar a picar con él sus waffles – debí haber dicho algo antes, lo siento