48: Súplica

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– Con eso debería ser suficiente – alegó el demonio celeste que se mantenía parado junto a la celda del ambarino que se retorcía de dolor en la cama tratando de resistirse a las atrocidades que su supuesto hermano le obligaba a realizar – Si sigues forcejeando terminarás lastimándote antes del torneo y podrías morir enserio – anunció cazurro mientras se limpiaba las manos, estaba completamente satisfecho con su trabajo, "una labor digna de un dios", pensó

Para cuando Bill se desmayó causa de la agonía en su pecho y cuerpo, su homólogo ya había terminado de recoger los diversos objetos regados en la habitación, destrozados debido a la atronadora fuerza que ambos oponían a tan arriesgado procedimiento. Todo había comenzado durante la madrugada, en el único horario en el que guardias y demás personal se mantenían semidespiertos y con un alto grado de sensibilidad mental, aprovechó para colarse entre las instalaciones y llegó directo a la oficina del Padre Tiempo, quien seguía reuniendo las confirmaciones de los asistentes al duelo final, la Diosa del Nilo y el Dios de las Pesadillas, toda una primicia – No tengo tiempo de atenderte ahora Cipher, estoy demasiado ocupado resolviendo algunos asuntos, y no te preocupes, tu hermano está sedado después del numerito de hace unas horas, así que no te matará mientras duermes, a ninguno de nosotros – añadió aquello último en un susurro más para él que para su acompañante, quería convencerse a sí mismo de que Bill no supondría un problema hasta que el alba anunciara el inicio del torneo

– Me lastima que pienses que le tengo miedo – refutó fingiendo estar dolido mientras se acercaba al escritorio del atareado anciano que buscaba y rebuscaba entre una pila de papeles – En realidad vengo a pedirte un pequeño favor – el mayor le miró por encima de sus deberes con una ceja enarcada mostrando su descontento a esa petición, a lo que el contrario sonrió por demás haciéndolo estremecer – Tranquilo, sólo necesito que me prestes a Bill un par de horas, nada extravagante, prometo dejar todo tal y como estaba... pero debes mantener a tus guardias lejos de la zona... ah, y a ese demonio junto a su celda, deberás eliminarlo, me molesta – refunfuñó entre dientes mirando a un sitio indistinto de la habitación

El hombre nuevamente le miró inquisitivamente, no tenía ni la menor idea de los motivos ocultos de ese demonio, y aunque empezaba a plantearse la idea de traicionarle y quedarse completamente con la victoria a sus espaldas, el miedo que le tenía le sobrepasaba en demasía – Bien, pero no asesinaré a ese demonio, lo reubicaremos... nos es bastante útil para mantener a Cipher a raya, de lo contrario podría terminar enloqueciendo como la última vez – el celeste chasqueó la lengua pero aceptó el trato, sellándolo típicamente con un apretón de manos que duró poco, acto seguido, se desvaneció entre las sombras de las instalaciones hasta la pequeña celda que veía dormir a su despreciable hermano, "Dueño de las 3 Rarodimensiones, el Dios de las Pesadillas, el Señor de la Locura, el Tormento de Axolotl", mentiras, exageraciones, nombres carentes de fundamento, lo llamaban así porque no había con quien compararle, pero ahora, él estaba allí y estaba listo para mostrarle al mundo su nombre, no sería solo el dueño de la estúpida Reverse Falls, sino también lo sería de la dimensión más importante y apreciada de Axolotl, el hogar del "Cazador de Demonios"

De un chasquido todas las luces del sitio se apagaron dejándolo completamente en la penumbra, a solas con el sereno respirar del demonio en cama, le miró de arriba abajo y acto seguido colocó su mano sobre su frente mientras susurraba algo ininteligible, poco después se hallaba en un espacio en blanco, nada en las cercanías a excepción de un enorme letrero que decía "No Pasar" colgado sobre una puerta de madera – Pfft, ¿esto es en serio?, creí que protegerías mejor tu mente después de todo lo que te ha pasado – alegó el demonio apartando el letrero para después abrir la puerta dejándose deslumbrar por la luz naciente de ella

A su alrededor cientos de recuerdos difusos y dispersos comenzaron a hacer acto de aparición, la mayoría de ellos databan de sus alocadas fiestas en la Rarodimensión, y unas cuantas más eran recuerdos de guerra, viejas victorias que ahora carecían de valor, continuó su andanza tratando de no hacer mucho contacto visual con algunos de los recuerdos más desvergonzados del demonio, el sitio parecía un laberinto formado por situaciones gloriosas e incómodas que le terminaban dejando en callejones sin salida, estaba comenzando a perder la paciencia y no dudaría en destruir todo cuanto pudiese con tal de llegar al centro de Cipher, sus sueños. Giró mil y una veces en direcciones totalmente distintas sin encontrar nada, perdiéndose e incluso caminando en círculos, sin embargo, justo antes de que comenzara a romper uno a uno los recuerdos del ambarino, una pequeña puerta se abrió al fondo de uno de los pasillos, había sido apenas perceptible pero la luz que emanaba era más que suficiente para darle pauta y acercarse.

Diabólica tentación (Billdip) #PremiosGravity2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora