Capítulo 14

244 12 5
                                    

Las presentaciones

****
Noah

Uno espera entrar a su apartamento y que suceda algo totalmente normal, como cerrar la puerta e ir directo a la nevera o a tu habitación, no que un dardo te pase a una velocidad de 320 m/s (aproximadamente) y se quede incrustado en la puerta aún sin cerrar.

—Creo que mi disculpa fue lo suficientemente sincera—quito el objeto de la puerta y encaro a Jean quien trata vagamente de ocultar el aparato con el que lanzo el dardo.

—Lo siento—se acerca con una sonrisa avergonzada y con sumo cuidado toma el dardo en mi mano—. Mamá sigue enviándome jueguetes, pero este si me llamó mucho la atención.

—Tienes prohibido lanzar estas cosas dentro del apartamento—decreto, pasando de largo a mi habitación.

—Entendido.

A veces quisiera que Jean fuera un poco menos controlable, pero la verdad esa es la razón por la que logré entablar una amistad con él. Soporta mi lado mandon y autoritario, aunque intento no aprovecharme tanto de eso, él es un sentimental de primera, después de todo.

—¿Cómo te fue en la entrevista?—cuestiona, entrando después de mi y sentandose en la cama.

Me gustaría echarlo de mi cuarto, sin embargo, aún está un poco dolido por lo que le dije en la plaza aquel día.

—Bien, como todas las demás—respondo con apatía.

—¿En cuál piensas trabajar?—se acomoda mejor en el colchón, moviendo su trasero por las sábanas—, con esta ya serían seis ofertas de trabajo que tienes.

—Sabes cuál es la empresa a la que quiero entrar—me cruzo de brazos mientras me recargo en el pequeño escritorio que tengo—. Solo asisto a esas entrevistas por petición de mis maestros.

—Nos graduamos en menos de tres meses y todos desearían tener solo una oferta de trabajo asegurado—se cruza de brazos, pero a diferencia de mí, él lo hace en un afán de parecer autoritario para reprocharme—. Deberías tomar una oferta, no sabes si te aceptarán en el bufete que quieres.

—Me aceptarán—aseguro con confianza—. Por algo he recibido tantas ofertas. Soy mucho más competente que cualquiera y eso es una gran ventaja.

Vega association no está solicitando—menciona con frustración—. Es el mejor bufete de abogados en todo Jaide, suelen contratar a personas con experiencia laboral y tú apenas serás un recién graduado.

—Encontraré la forma de entrar.

—Sé que es importante para ti, ¿pero no has considerado rendirte?, Después de todo, tú padre lo hizo por voluntad propia—habla con demasiada confianza, claro que agacha la mirada cuando nota mi expresión.

—Sal de aquí—le ordeno con frialdad.

No reniega, sale de mi habitación como perro con el rabo entre las patas, incluso cierra la puerta con sutileza.

Supongo que con sus palabras ya estamos a mano. Detesto que quiera indagar más de la cuenta en mi vida y yo lo insulte a él y a su patético proyecto.

Casualidad con sabor a FresaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora