Inicio de problemas
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Dayana
Mamá tuvo razón, la nieve no tardó en caer una vez estuvimos fuera de casa de la abuela, dónde fue la fiesta.
—Ven aquí—dice Noah antes de jalar mi brazo y envolverme una bufanda que compró previamente en el supermercado.
—Pensé que era para ti—digo mirando atenta sus movimientos tan delicados al envolver la bufanda en mi cuello.
No dice nada, solo termina su labor y después se voltea a guardar lo que compramos en el maletero del auto. Se supone que solo veníamos por un pastel, pero en el camino recibí un montón de llamadas de mis tíos, primos y hermanos. Cada quien me pidió algo y terminé llevando más de la cuenta, incluso le llevó los alimentos del mes a mi abuela.
—Mira, te compré esto—le enseño un llavero con un pequeño peluchito de fresa—. Para que pienses en mi cada que lo veas.
—¿Por qué querría pensar en ti?—interroga con un tono juguetón.
—Porque soy tu mejor amiga.
—¿Acabas de mandarme a la friendzone?
—¿Eso significa que quieres algo más conmigo?
Sonríe, negando con la cabeza.
—Parece que ya no eres la chica inocente de antes, ahora hasta entiendes insinuaciones.
—Espera—digo con pánico—, ¿Entonces si quieres algo más conmigo?
—Sueñas mucho, chica fresa—dice arrebatando el llavero de mis manos.
—Tú eres el que das a entender cosas erróneas—le reclamo.
—Sube al auto—ordena.
No tardo en hacerlo, pues para ser sincera me estoy muriendo de frío. Me sorprende que esté nevando, es algo muy raro que ocurra en septiembre, pero Jaide es un lugar con climas bastantes fríos, es mucho más raro que haya un día a 30°C.
—¿Qué haras el próximo fin de semana?—le pregunto ya que estamos de regreso a casa.
—¿Por qué?—pregunta con la mirada fija en el camino. Él conduce y yo me relajo de copiloto.
—Simple curiosidad.
—Pues...—titubea—, ya tengo planes.
—¿Qué planes?
—Algo relacionado con mi padre.
Parece que no le gusta hablar mucho del tema, sin embargo, mi curiosidad es mucha.
—Escuche que hablaste con mi tía Rachel.
—Si, se ofreció a ayudarme a conseguir una apelación al caso—dice. Justo se detiene en un semáforo y aprovecha para mirarme—. Intento conseguir la declaración del ex-secretario del CEO de Narcissus.
—¿Y eso será complicado?
—No lo sé...—frena sus palabras cuando escucha el claxon del auto de atrás. Regresa la mirada y arranca—, el secretario le tiene mucho miedo a el CEO.
—Sabe que él fue quien mandó a asesinar al abogado de Frank—afirmo.
—Así es—asiente—. Teme que sea el próximo si llega a testificar en su contra.
—Dejame ayudarte.
—Ni lo pienses—niega con un tono firme.
—Puedo hablar con él, quizás y lo convenza, soy muy persuasi...
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Casualidad con sabor a Fresa
Teen FictionPortar uno de los apellidos más influyentes del momento no es algo a lo que Dayana se adapte. Pensó que todo sería falsedad a su alrededor hasta que tuvo que derramas su bebida sobre aquel chico. Cliché, por supuesto, pero lo que acontecería con eso...