El Príncipe Comadreja de Konoha (Traducción)

Capitulo 6

A pesar de lo que parece pensar el Senju Tobirama, un tal Uchiha Itachi era perfectamente consciente del hecho de que le seguían. Uno no llegaba al estatus de ANBU a los once años, convirtiéndose así oficialmente en el ANBU más joven de la historia, si no podía sentir un par de ojos sobre él, descubrir sutilmente su ubicación y sus intenciones en el lapso de los primeros cinco minutos. Por muy bueno que fuera el futuro Nidaime Hokage de Konoha, Itachi había pasado cinco años y medio jugando al escondite con un tipo de sensor, uno de los mejores del mundo, su padrino y amigo íntimo de Uchiha Fugaku, Namikaze Minato el Yondaime Hokage.

Minato-sama y el Chichiue de Itachi eran en realidad viejos compañeros de guerra, por lo que Itachi entendía. Fugaku era una década entera mayor que el Relámpago Amarillo de Konoha y se conocieron la primera vez que un Minato de once años fue enviado a la guerra. Se salvaron mutuamente la vida en innumerables ocasiones y trabajaron juntos como una pareja hecha en el cielo. Sus respectivas mitades, Uzumaki Kushina y Uchiha Mikoto, también formaban un equipo extraordinario y los cuatro eran temidos en las Cinco Grandes Naciones.

Cuando Mikoto se quedó embarazada de Itachi, la otra pareja fue la primera en saberlo, incluso antes que los ancianos del Clan Uchiha, como dictaba la tradición. Fugaku le pidió a Minato que fuera el padrino de su heredero y Mikoto le pidió a Kushina que fuera la madrina del bebé, y ambos, con los ojos llorosos y honrados, fueron los primeros en estar allí cuando nació Uchiha Itachi, meses después, un niño perfectamente sano.

Y así, la amistad forjada en la más dura de las situaciones se fortaleció para siempre, sólo cortada por la muerte, cinco años y medio después.

Pero, antes de ese trágico suceso, Itachi había sido el orgulloso ahijado del Yondaime Hokage. Claro que, en realidad, Minato-sama sólo había sido Hokage durante un año, más o menos, antes de que diera su vida para sellar al Kyuubi, pero había pasado tiempo de vez en cuando tratando con su ahijado todo lo que podía, y uno de sus juegos favoritos había sido el del escondite. Minato había sido el primero en ver el potencial en el pequeño prodigio de cuatro años, el primero en ver el cambio que había provocado en su sobrino honorífico ver el campo de batalla. No sabía cuál era el cambio, no del todo, pero aun así había sido el primero en verlo. Y había sido el primero en actuar.

Había parecido bastante inocente y discreto para el resto del mundo, el Yondaime Hokage queriendo jugar a un juego inocente con su pequeño ahijado, un juego en el que podía percibir fácilmente si Itachi se acercaba demasiado a algo peligroso, una forma fácil de entretener la mente de un niño. Pero en su pequeño juego del escondite, era cualquier cosa menos un pequeño juego tonto, ya que Minato se había quejado con un Itachi de cuatro años de que era tan buen sensor que siempre que jugaba con alguien más, no era divertido ya que los encontraba fácilmente. Como había esperado, Itachi se lo tomó como un reto. Su primera partida fue patética, en realidad, con lo fácil que Minato encontró al pequeño cuervo. Sin embargo, Itachi también había sorprendido a Minato con la facilidad con la que lo encontró, incluso cuando Minato suprimió su chakra casi por completo.

La siguiente vez que jugaron, la apuesta había subido. Itachi podía encontrar a Minato con facilidad por mucho que Minato suprimiera su chakra, pero el chico seguía sin poder esconderse lo suficientemente bien de su padrino. Le costó dos meses de práctica hasta que un día Minato se encontró perplejo al no poder percibir a su sobrinito en ninguna parte. El niño parecía haber desaparecido de la faz de la tierra. Incluso extendiendo y esforzando sus sentidos al máximo no pudo detectar la posición del niño hasta que Itachi se lo permitió. El nivel de control del chakra de Itachi había asombrado al rubio. Era la primera vez que un sensor, y más aún uno del calibre de Namikaze Minato, no había sido capaz de localizar la posición exacta de un ninja.