Ainhoa y Nayra merendaban en la terraza de un bar, situadas en el rincón más aislado por si algún insistente les estropeaba las horas de relax. La bandeja repleta de donuts, cafés y zumo de naranja indicaba que no tenían prisa por regresar a sus respectivas casas.
AINHOA: Pues me va a dar pena acabar con estas actuaciones.
NAYRA: Puedes seguir, independientemente de los resultados. Te veo futuro.
AINHOA: Pero no se sentiría igual. Hoy hay que estar a tope, que hay que eclipsar a Sotogrande en Barcelona.
NAYRA: Imposible.
AINHOA: Aunque sea, que seamos nosotras dos la que en esta tarde-noche de domingo demos la imagen de sensatas. No sé cómo les habrá ido a estos.
NAYRA: Llama.
AINHOA: ¿Crees que ya habrán acabado? Voy a probar.
Antes de que la melodía predeterminada eclipsara el discurso de Morlaye, Jordan tapó el altavoz de su teléfono. Yéndose a un lado del escenario, sorteó las escaleras y, en voz baja, respondió a Ainhoa.
JORDAN: Estamos a punto de terminar.
AINHOA: ¿El de los gritos es Morlaye?
JORDAN: Se ha venido arriba. Lo importante es que el público le mira con orgullo.
AINHOA: ¿Y tú qué tal?
JORDAN: Bien, bien, pero lo estoy pasando mal con el calor.
AINHOA: Es que Valencia no es Bolton.
Ainhoa se dio cuenta de que Nayra, por cada vez que se iluminaba su teléfono, lo apagaba y lo ponía bocabajo en la mesa.
AINHOA: ¿Y Navia?
Jordan miró hacia los baños portátiles.
JORDAN: Bien, bien. Como siempre.
AINHOA: Cero novedades. Mejor.
Ainhoa colgó. Nayra cedió ante las insistencias y respondió a las llamadas que estaban recibiendo.
NAYRA: ¡Que te he dicho que no! No voy a pasar por casa. Y no me esperes despierta.
Nayra guardó el teléfono en el bolso. Ainhoa removía su zumo de naranja, a la espera de que se iniciara una conversación.
NAYRA: ¿Todo bien?
AINHOA: Se la han puesto en bandeja a Morlaye. Es que lo que ocurrió ayer...
NAYRA: Me vas a contar...
AINHOA: ¿De verdad pensabas que Leticia estaba en un ambiente moderado? El amor te cegaba.
NAYRA: Porque no me quiero creer que ella sea como el resto de sus compañeros.
AINHOA: Al menos, ella no ha provocado un derrame cerebral a un manifestante. Yo también estoy afectada, créeme.
NAYRA: ¿El tiparraco ese era así cuando estaba contigo?
AINHOA: No. Ni en broma.
Ainhoa acabó con el zumo de naranja con tan solo dos sorbos.
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Leviatana
Historical FictionQueda menos de un año para que España celebre nuevas elecciones generales; PSOE y PP rompieron su gran gobierno de coalición. Tres nuevos partidos políticos son los que encabezan las encuestas: Progresivas (izquierda), Unión Española (derecha), y Al...