Narra Harry
Desde que escapamos de la escuela y llegamos a la zona segura, he notado a (t/n) muy deprimida, me duele tanto verla así, sin embargo, la entiendo perfectamente, también eran mis amigos y saber que se sacrificaron por nosotros, me atormentara por el resto de mis días, pero al ver que ella está a salvo, hace que mi conciencia pueda estar tranquila. Debo mantenerme fuerte, como lo hice en el pasado, para que la muerte de nuestros compañeros no fuera en vano. Diariamente, mantengo esta sonrisa en mi rostro solo por ella, aun cuando estoy cansando, doy lo mejor de mí mismo para mantener esa chispa de esperanza que se refleja en sus ojos, inclusive recuerdo estar en su misma posición hace tiempo, mi madre para animarme me dio este anillo, que me ha ayudado en mis peores crisis y ahora voy a dárselo a ella, ya que deseo que permanezcamos juntos para siempre, quiero que sea mi esposa.
Hubiera deseado brindarle una mejor propuesta, pero confiaba en que mi corazón fuera honesto y recitara aquellas palabras de amor que estaban atrapadas en mi pecho, dejándome totalmente a su merced una vez que puse el anillo en su dedo con una cálida sonrisa en mi rostro, llore de alegría cuando su respuesta fue un seguro si, atrapándome en sus brazos, dejando que nuestros labios se encontraran una y otra vez. Nos casamos por lo civil y gracias a la ayuda de los otros sobrevivientes de la zona segura, pudimos tener una pequeña cena con un delicioso pastel incluido, la mayoría parecían felices por nosotros, felicitándonos y dándonos sus mejores deseos, celebraron a nuestro lado, cuando los veo, creo que todos perdimos algo para llegar aquí, pero al final lo importante en como usaremos esta nueva oportunidad para vivir nuestras vidas.
Nuestra primera noche, la cargo entre mis brazos para entrar juntos, dejándonos caer en la cama, su rostro está cubierto por un hermoso velo blanco que levanta para besarme, adoro la suavidad de sus labios y como sus manos se sujetan a mi cuello, desacomodando mi cabello, me separo de ella viendo sus mejillas sonrojadas mientras jadea levemente en busca de aire, no puedo evitar sonreír, sintiéndome el hombre más afortunado del mundo.
— ¿En qué piensas? — pregunta con dulzura acariciando mi mejilla.
+ En nosotros, como a partir de ahora, me levantaré cada mañana y lo primero que veré será tu rostro, también qué podre llamarte de otras formas: cariño, mi tesoro, corazón, mi esposa~
Vuelves a atraparme entre tus brazos, besando mis labios, mis manos se escabullen hasta el cierre de tu vestido, bajándolo, hasta que este cae por tus hombros, dejando tu pecho descubierto, termino por desnudarte viendo como tímidamente intentas esconder tu cuerpo, no podría haber visto algo más magnífico en toda mi vida. Me deshice de mi ropa tan rápido como pude y me arrodille ante ti, abriendo tus piernas, temblaste ligeramente, pero eso no te impidió empujar mi cabeza, haciendo que mis labios besaran tu clítoris, empezando a chuparlo, hasta que estuviste lo suficientemente húmeda para dejar que entrara mi pene.
+ Tranquila, no voy a lastimarte — dije besando tu frente para tranquilizarte.
— Te amo Harry — dijiste sosteniendo mi mano.
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Sextember Compañeros Peligrosos (En corrección ⚠️)
FanfictionBienvenida~ El reto del sextember sale de la palabra sexo y septiembre combinadas, donde cada día implica un nuevo e interesante desafío. Entra, da un vistazo y diviértete ;) ⚠️ Si no has jugado el juego, te advierto que este libro está lleno de s...