Como ya era costumbre, caminábamos por las desoladas calles de la ciudad en busca de cualquier cosa que nos ayudará a sobrevivir en este mundo hecho ruinas. Hasta que mi atención se centró en un aparador en específico, era una boutique de novias, casi intacta, con hermosos vestidos blancos en la vitrina, velos de novia, anillos y cientos de fotografías que mostraban la boda perfecta.
Lawrence
+ ¿Te gusta alguno? — preguntó el castaño en mi oído.
— ¡¿Lawrence?! — dije asustada, dando unos cuantos pasos hacia adelante, alejándome de él.
+ El matrimonio es algo maravilloso, ¿no lo crees? Dos personas se juran amor eterno y deben permanecer juntas para siempre — decía esbozando una sonrisa.
— Con esas palabras lo haces sonar como un contrato.
+ ¿En serio? No lo había notado... ¿Te gustaría casarte algún día? Serías una hermosa novia — los pasos de Lawrence se aproximaron hacia mí hasta que mi espalda chocó con el mismo aparador.
+ Y una fantástica esposa — dijo jugueteando con mi cabello.
Harry
+ Entremos — dijo Harry, jalando mi brazo.
Parece que las personas de la tienda se habían ido tan rápido que olvidaron cerrar la puerta, por lo que fue fácil entrar. Recorrí los pasillos, maravillada de cada vestido que vestía, hasta incluso probarme un velo a modo de juego, busqué rápidamente a Harry para mostrárselo, pero lo descubrí viendo varios anillos de compromiso.
+ Sabes, cuando era niño decía que quería crecer rápido para ser un adulto — comenzó a contarme en un tono melancólico.
+ Porque así podría casarme y tener mi propia familia... Una familia feliz — de repente su tono de voz comenzó a quebrarse.
— Harry...
+ Aún quiero cumplir ese sueño — decía mientras me mostraba un anillo.
Zion
+ ¿No me digas que eres de esas? — dijo Zion empezando a molestarme.
— ¿Esas? — pregunté extrañada.
+ De esas mujeres que sueñan con tener una gran boda con miles de invitados, platillos carísimos que a nadie le gustan, toda pomposa — decía mientras fingía hacer un abanico con sus manos.
— La verdad no, estaría satisfecha de que el hombre que amo esté a mi lado — respondí con una sonrisa, mientras me alejaba del lugar.
+ Eres fácil de complacer — dijo Zion para sí mismo, antes de correr hasta mí.
Ethan
Me quedé viendo el aparador un par de segundos, hasta que note la presencia de Ethan a mi lado, quien también lo observaba sin decir ni una palabra, pudimos quedarnos toda la tarde así, pero una turba de zombies apareció en la calle, obligándonos a huir de ahí. Me sentí un poco decepcionada de no poder entrar, aunque sea a dar un pequeño vistazo. Cuando me levanté a la mañana siguiente había una enorme caja en mi aula.
"Creo que te verías linda con uno puesto"
Decía una pequeña nota escrita a mano, que fácilmente reconocí como la letra de Ethan, al abrir la caja, estaba llena de vestidos de novia que no dude en probarme.
Eugene
+ Me repites ¿Por qué entramos a esta tienda? — preguntó el rubio con molestia.
— Quizás haya algo bueno, si mal no recuerdo las boutiques de prestigio solían regalar champán y chocolates a las futuras novias — respondí, siendo más bien una excusa para mirar el interior.
Aunque se suponía que la más emocionada debía ser yo, Eugene encontró un piano y comenzó a tocar la "Marcha nupcial" emocionado; contagiada por su entusiasmo, tome un vestido y simule caminar hacia el altar.
+ ¿Caminarás con esa canción hacia el altar?
— ¿Qué tiene de malo? Es un clásico — explique jugando un poco con el vestido.
+ Puedo componer algo mejor para nuestra boda — presumió Eugene.
— ¿Nuestra boda?
Feliz día de San Valentín, recuerden que los chicos y la escritora, las amamos.
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Sextember Compañeros Peligrosos (En corrección ⚠️)
FanfictionBienvenida~ El reto del sextember sale de la palabra sexo y septiembre combinadas, donde cada día implica un nuevo e interesante desafío. Entra, da un vistazo y diviértete ;) ⚠️ Si no has jugado el juego, te advierto que este libro está lleno de s...