Sextember Compañeros Peligrosos (En corrección ⚠️)

Sex Toys - Ethan

~Continuación del capítulo 1.

Ethan se deleitaba con los gemidos de la fémina, llevaba rato penetrándola, sintiendo como sus paredes internas lo succionaban de manera espectacular, como si ella hubiera sido hecha específicamente para él, lo único malo es que la joven oji-(-) no dejaba de gemir, por más que disfrutaba escucharla, tenía que silenciarla, de lo contrario serían comida de zombies. Es entonces que los ojos del peli negro se concentraron en un objeto en específico, haciendo que saliera estrepitosamente del interior de la mujer.

— ¿P-Porque te detienes? — pregunto (t/n) meneando su cintura.

Dirige su mirada a donde se encontraba el más alto, viendo como este observaba las diferentes mordazas de un estante, parece interesado primero en una mordaza de anillo, de aquellas que impiden cerrar tu boca perfecta para el sexo oral, pero no era lo que Ethan necesitaba, jamás se imaginó que existieran tantos modelos, ni siquiera pensar en la cantidad de juguetes sexuales que podían existir, le gustaría probar algunos con (t/n), quizás podrían regresar después o llevarse unos cuantos para probarlos en su salón de clases cuando estén solos. De repente, la imagen de la fémina usando todos esos trajes eróticos, o jugueteando en sí misma con algún dildo, lo hizo excitarse más, era una suerte que ya tenía a su amada (t/n) abierta de piernas para él, pero no podía continuar sin esa mordaza, hasta que la encontró, casi oculta en la pared, sonriendo inconscientemente.

Con cuidado saco el objeto de la caja y volvió a acercarse por detrás a la chica, sacando aquel juguete que parecía un collar de cuero con una pelota roja, lo coloco en su boca y lo ajusto para que no se moviera, (t/n) tembló un poco ante el acto, pero las repentinas penetraciones de Ethan eliminaron toda incomodidad y sin el miedo de ser descubiertos pudo gemir sin vergüenza, sabiendo que la mordaza hacia su trabajo, para su sorpresa no fue lo único que tomo el chico, pues sintió como un líquido frío y espeso se deslizó en su interior.

+ Es lubricante — dijo Ethan cambiando de posición a la chica, terminando de romper las bragas de esta para levantar una pierna sobre su hombro.

En esta posición al chico se le hacía más fácil penetrarla, aprovechando su mano libre para masajear los pezones de la oji-(-), soltando leves gemidos de placer, que lograba ocultar, escondiendo su rostro en el cuello de (t/n), aspirando su aroma, Ethan sentía como si tuviera el mundo en sus manos y ella era eso para él, pronto su pene empezó a temblar, señal de que estaba cerca de su límite.

+ (t/n) ¿Puedo correrme en tu interior? — pregunto apenado Ethan bajando la intensidad de sus embestidas.

La oji-(-) movió su cabeza de forma afirmativa, dejando que Ethan siguiera con sus estocadas rápidas, justo en su punto dulce. A (t/n) ya no importaba que le dolieran las caderas o que apenas podía mantener el equilibrio, realmente quería sentir aquel líquido blanquecino llenando su interior. Y como si hubiera leído sus pensamientos, término por correrse adentro, sacando su pene para apreciar como el semen escurría entre sus piernas. El oji azul recostó a la chica sobre su pecho, quitando la mordaza de su boca para volver a escuchar sus dulces gemidos de satisfacción. Ethan acariciaba la cabeza de (t/n) feliz de estar a su lado, ambos se quedaron así brindándose calor corporal hasta que cayeron en un profundo sueño.