NARRA ERICK
"No existe peor acto de cobardía que callar una injusticia y ver cómo engañan a un alma inocente."
Aquella frase llevaba varias semanas rondando por mi cabeza y con cada día que pasaba me sentía más cobarde que el anterior.
No podía ver a Elizabeth a la cara y no sentirme mal por el tremendo engaño en el que ha vivido todos estos años, pero tampoco era capaz de decirle la verdad, no era capaz de traicionar la confianza de Jake.
Cuando eres joven haces muchas cosas estúpidas, pero llegas a una edad en la que maduras y comprendes que la vida se basa en el respeto.
Eso nos ocurrió a todos, a mí, a Jake, Jonathan, Christopher y los demás. Apostábamos por chicas, creyéndonos lo mejor del mundo, hasta que nuestras acciones nos pasaron factura y nos hicieron madurar, pero una de esas facturas no terminaba de cobrarse.
Por años había visto a Jake ahogándose en la intranquilidad de su conciencia. La culpa lo atormentaba cada día y aunque lo disimulaba bastante bien, por dentro lo estaba consumiendo y lo peor de todo es que a mí también.
Elizabeth era una buena chica y no se merecía tal cosa. Ella era demasiada mujer para sufrir por alguien o fingir un noviazgo falso para recuperar a alguien que no la merece. Desde que me enteré del novio falso de Elizabeth y sus razones, la culpa creció más en mí.
-Erick, te toca- Jake me sacudió por los hombros.
-¿En qué piensas?- preguntó Jonathan, entregándome el control del videojuego.
-En nada-
Jake, Dylan, Zac y yo continuamos jugando, mientras Jonathan esperaba a que uno perdiera.
-¿Qué les parece si vamos mañana a los casinos? A lo mejor andamos de suerte y ganamos un par de millones-
-Apoyo la idea de Zac. No creo que ganemos algo, pero seguro la pasamos bien- habló Jonathan acostado sobre la cama.
-Lo siento, yo no puedo mañana-
Oír eso de Jake me pareció muy extraño, pues desde que Elizabeth terminó con él no había tenido ni un solo plan más que salir con nosotros.
-¿Qué carajos es más importante que nosotros?- preguntó Dylan en forma de reclamo, a lo cual todos reímos.
-Saldré con Lizi- una sonrisa de tonto enamorado se formó en su cara -le pediré que regrese conmigo-
Hubo un corto silencio, mientras procesábamos la información.
-¿Y qué hay de su novio?- preguntó Zac.
-Pues espero que lo deje-
-Por favor, no te aceptó cuando estaba soltera, ¿qué te hace creer que te aceptará ahora que tiene novio?-
Jonathan como siempre molestándolo y como siempre Jake le dio un puñetazo.
-No ayudas, amigo-
-¡Maldito Jake! Mi brazo-
Todos reímos y luego de varios quejidos Jonathan le devolvió el golpe.
-Espera, no entiendo- hablé confundido -¿cómo que no te aceptó cuando estaba soltera?-
Jake soltó una risa amarga, pasó la partida y viendo hacia el suelo respondió:
-Nunca gané la apuesta, les mentí. Lizi me rechazó una y otra vez y cuando se terminó el tiempo de la apuesta simplemente dije que lo había logrado-
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Un Juego de Amor
RomanceEnamorarse de dos hombres a la vez no estaba en los planes de Elizabeth, pero una serie de eventos crearon las condiciones perfectas para que lo hiciera. Todo parecía ser perfecto en su vida, sobre todo con su novio, hasta que un par de mentiras y s...