Parte 44

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Hubo silencio por varios minutos, hasta que...

- ¿Como estás? - pregunté casi en susurró.

- Bien. - voltee mi rostro hacia la ventana.

No dijimos nada más, hubiera silencio eterno...
Llegamos al aeropuerto y rápidamente subimos al avión.
Me senté sola, puse mis audífonos, me hice bolita en el asiento y me puse a leer un libro de patologías.
Estaba perdida en la lectura pero de la nada a parte mi vista del libro y voltee hacia adelante, tenía la mirada de Namjoon encima de mi, permanecía en su asiento volteado completamente para poder observarme.
Baje mi mirada de nuevo a mi libro y pase mi mano por mi cuello, ya que me puso nerviosa por alguna extraña razón. Coloqué mi libro entre mis piernas sin quitar mi vista de la lectura y empecé a tronar mis dedos, para después sostenerlo con una de mis manos y morder mis uñas de una mano.

- No las muerdas. - quitó mi mano suavemente.

No quería verlo a los ojos así que trate de seguir con mi lectura.

- Abrígate. - me cubrió con una de sus calientes cobijas.

- Gracias. - dije con indiferencia.

Se quedó de pie, enfrente de mí, con sus manos en los bolsillos de su pantalón.

- Te amo. - suspiró. - ¿Puedo? - señaló el asiento que estaba a mi lado.

Quité mis audífonos y solo levante mi mirada para verlo a los ojos.

- Namjoon, no creo que sea... - mis palabras se quedaron cortas al ver qué pasó por el pequeño hueco que había entre mis piernas y el asiento de enfrente.

- ¿Qué lees? - preguntó mientras se dejaba caer en el asiento de a lado y recargaba su cabeza en mi hombro.

Le enseñe la portada del libro sin decir nada y volví a la lectura.

- Escúchame, por favor.- detuvo mi acción para ponerme mis audífonos.

No dije nada, solo esperaba a que siguiera hablando.

- Perdón por ser un idiota y tratarte de esa manera, yo se que mi enojo no lo justificara, también estoy consciente qué tal vez puedas seguir molesta conmigo y lo entenderé, en serio, pero solo quiero decirte cuanto te extraño y te amo. Era una completa tortura no hablarnos, no tenerte entre mis brazos, no poder besarte, no sentir tus manos en mi cuerpo, tus besos antes de dormir, entre infinidad de cosas que extrañe pero quiero también decir que discutir se nos está haciendo costumbre, no se que jodido problema hay que está arruinando todo, y lo sabes, porque todo empezó desde que nos casamos.

Se apartó de mi y puso sus manos en mis piernas, mientras cerraba sus ojos y pegaba un profundo suspiro y tiró su cabeza hacía atrás.
Me levante de mi asiento y me senté en sus piernas, mientras pasaba mi mano por su cuello, acariciando delicadamente.

- Namjoon. - di un profundo suspiro.- Tú también perdóname por perder a nuestro...

- Disculpen, les traigo algunas bebidas y snacks para el vuelo, espero y lo disfruten, con permiso.- habló la azafata, quitándome las palabras de mi boca.

Gracias mujer, arruinaste mis segundos de valentía para poder decirle a Namjoon que perdimos a un hijo y el cuál era mi razón por tener esos comportamientos tan repentinos.

- ¿Que ibas a decir, cariño? - preguntó mientras me prestaba toda su atención.

Me abrazo con un brazo por la cintura y su otra mano la colocó en mis piernas mientras las acariciaba.

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