El diario de Nikholay

Capítulo 9

Aria

    ~No veo la hora de poder largarme de una vez de este lugar... ¿Cómo puede existir gente que derroche tanto amor por cada poro de su piel? Esta familia exceptuando a la Sra. Smith, que parece solo sentir un poco de afecto por su nieto, la menor de las Smith que solo mira su ombligo, el mismísimo Sr. Cook (cuando cruza su mirada conmigo puedo leer claramente en sus ojos que no confía ni un gramo en mí y no lo puedo culpar por eso, es parte de su trabajo también mantener los ojos abiertos.) Y por supuesto el más frío de todos, el agente Taylor, que en ocasiones hasta he llegado a dudar de que su propio ahijado le caiga bien. Ese niño debería haber comprendido su mirada de advertencia cuando le decía que no fuera hacia mis brazos y por cómo lo miró después mientras yo festejaba su hazaña y lo llenaba de besos si no supiera que es malditamente imposible, hasta creería que sentía celos de la pobre criatura.~

    -Muchas gracias por recibirme en tu hogar Katherine, pero de verdad ya tengo que irme. Tengo mucho trabajo y lamentablemente en los próximos días tendré que volver a molestarte para realizarles a tu esposo y a ti, algunas preguntas.- le digo mientras hago todo lo posible porque esta vez me deje marchar, ya se lo he pedido dos veces y con la excusa de que tenía que cortar el pastel me lo ha pospuesto para más adelante.

    -Oh, lamento oír eso Aria, pero supongo que tienes razón con respecto a tu trabajo. Y en cuanto a las preguntas te espero mañana por la mañana a primera hora, podemos desayunar antes de que vaya a la oficina, porque después lo veo difícil y mi esposo también tiene un día complicado en el trabajo así que no tendremos tiempo libre hasta la cena. ¿A menos que quieran venir a cenar mañana por la noche?- dice mirando a mis espaldas y no hace falta que me gire para saber de quién se trata si no se ha despegado de mí en toda la tarde.

    -¡No!- respondimos al unísono como si hubiéramos sospechado al mismo tiempo que eso no sería una buena idea.

    -Quiero decir, agradezco su hospitalidad, pero no podemos hacer de esto una relación más personal. Necesito mantenerme fuera de eso para ser completamente objetiva con el caso no permitiré que las cosas se compliquen a futuro y termine siendo un círculo de nunca acabar.- le digo y parece comprender perfectamente lo que le estoy diciendo cuando gira instintivamente a mirar a su esposo que se acerca con su pequeño hijo en brazos.

    -Comprendo perfectamente detective.- dice adquiriendo un tono de voz frío y distante como creo que debe usar con las personas ajenas a su familia y casi hace que una sonrisa se dibuje en mis labios por la facilidad que tiene para cambiar el chip y pasar de ser una agradable ama de casa y mamá a ser un muro de piedra impenetrable. -Será hasta mañana entonces, le agradecería que fuera puntual si no quiere que tengamos que reprogramar una cita para más adelante.-

    -No se preocupe que seré puntual. Fue un placer señora Cook.- le digo estrechando su mano para luego dirigirme hacia su esposo a su lado. -Señor Cook.- estreché su mano devolviéndole el fuerte apretón que me dio y salí de su casa.

    Pero lo que me encontré afuera... Eso sí que me sorprendió completamente. Mi coche alquilado había desaparecido de donde lo había estacionado esta mañana cuando llegué, y en su lugar solo había una nota que decía: "¡Vuelve a tu país!" escrito sobre una servilleta con lápiz delineador de ojos. Perfecto, lo único que me faltaba para terminar de complicarme la estadía en Londres...

    Una mujer despechada buscando venganza...

    -¿Qué sucede?- siento la profunda voz de Taylor a mi espalda cuando se acerca a mí.

    -Creo que tu novia ha decidido tomar venganza y llevarse mi coche por si acaso le mentí con lo que dije sobre ti.- le digo y parece estudiar detenidamente la nota como si reconociera la letra aunque estuviera casi irreconocible por los trazos irregulares del lápiz con el que se escribió.