Quien eres ✓

Capítulo 22.- Trato

Emma Brigitte Stronge:

Caminé hasta el cuarto de Asher mientras guiaba a los policías. Al llegar a la puerta, entré yo primera y vi que sólo entraba Bruce y el otro policía le cortó el paso a la hermana de Asher.

–Creo que deberían de hablar ellos solos –dijo el otro que ni me sé su nombre ni me importa una mierda.

–Yo creo que –habló la hermana preocupada, pero la interrumpí.

–Tranquila, estaré bien, si necesitamos alguna cosa lo sabrás y estarás ahí en la puerta, no pasará nada –le sonreí para que se calmara, mirándome insegura, pero finalmente cerrando la puerta, dejándonos solos.

–¿Ellos lo saben? –preguntó finalmente Bruce, sentado en la mesa del escritorio mientras me sentaba en la cama, sin mirarle.

–Sólo Asher, es quién estaba conmigo.

–Siento no poder haber parado aquello.

Con 'aquello' se refería a la muerte de mis padres.

–Lo sé, por alguna extraña razón, pero ¿por qué vuelves aquí y haces este papel cuando tienes esta doble vida? –pregunté, dejándose notar una mezcla de rabia y tristeza. –¿Por qué te uniste a ellos para matar? ¿Qué objetivo hay conmigo? ¿Por qué mierda la estúpida notita que dejaste pone 'GEDA no es mala al fin y al cabo, pronto lo verás'? ¿¡Qué mierda significa esa estúpida palabra que lleva en mi cabeza desde que desperté del coma?!

Tantas preguntas y solamente me miró sin responder, como si de repente no tuviera lengua. Una que cómo no arregle pronto este asunto se lo meteré por el culo y le reventaré su estúpido cuerpo.

–Deja de pensar en matarme –dijo de golpe, y entendiendo mi mirada de confusión, aclaró. –Tu mirada me ha llevado al infierno mil veces.

–Y más veces irás cómo no me soluciones este problema, y créeme, no irás a cualquier infierno, irás al mío y ahí hasta suplicarás piedad.

–Sé de lo que eres capaz, no te preocupes, y siéntate, te has puesto tan nerviosa que hasta te has levantado y caminado por el cuarto sin darte cuenta.

Pues sí, por pensar en el dichoso tema no me percaté de mis actos. Respiré profundamente para relajarme y tomar el control del asunto, así sentándome de vuelta en la cama.

–Verás Emma –empezó de nuevo. –Tus padres no debieron estar en ese momento, aparecieron sin más, y no pude detenerles, querían salvarte y a lo tonto... Bueno, ya sabes.

–Pues me parece tremenda gilipollez que sigas aquí, así que quiero que te largues y dejes hacer mi vida.

–La que te dure ¿verdad? –respondió sarcástico, ganándose una mala mirada mía. –¿Qué? Es la verdad, si no me ayudas vas a morir en poco tiempo.

–Si es que podéis, porque créeme que cómo os atreváis a acercaros a mí, vais a morir.

–Como al grupo ese, ¿no? –hizo un silencio con una risa nasal, que al notar que yo no reía, siguió. –Y antes que respondas, fui yo quien no dejó vuestras pruebas y así no os pillaran, panda de idiotas.

–Al menos yo no voy matando familias para saber qué.

–Eso venía, quiero que me ayudes a matar a alguien.

–¿Familiar?

–Depende cómo lo mires.

–No me interesa.

–Quiere matarte.

–Vete.

–Va a matar a Asher.

–¿Dónde se encuentra?

Sonrió ganador mientras giré los ojos, no quiero que le pase nada a Asher así que mejor meterme ahora por medio.

–Primero tienes que matar a alguien inferior a ella, y ahí entonces podrás matarme y matarla a ella.

¿Cómo?

–Vaya, prefieres que te mate yo, buena manera para no tener mal karma.

–La verdad que sí, pero es sólo para que puedas salvarte tú, si me dejas explicarte lo sabrás, sólo...

Alguien entró de golpe a la habitación interrumpiendo, que sin mirarla ya sabía que era la hermana de Asher.

–Será mejor que se vaya ya, señor –habló mientras ocultaba su enfado.

Se nota muy poco que no le gusta la policía ¿por qué será? Él asintió y entonces se levantó del asiento, sacando su mano del bolsillo y ofreciéndomela.

–Un placer señorita, ya hablaremos –dijo manteniendo la cortesía.

Puto gilipollas, ahora bien que finge. Le devolví el apretón de manos notando una tarjeta de cartón, dónde supongo estaría su número de teléfono o yo que sé qué.

–Espero que no –me despedí seria.

Al quitar el apretón de manos, quedó el trozo de papel en mi mano y al girarlo, pude distinguir su número de teléfono y una dirección a su supuesta oficina (que ya veremos si es una o no). Salió del cuarto devolviéndome la mirada de reojo y salió finalmente, y cuando quedé sola en el cuarto junto la hermana de Asher, Alice, entonces pensé en algo.

~Hola a todxs!! Esta parte tenía pensado subirlo el lunes, pero al ver que llegamos a las 700 visitas pues quise celebrarlo, muchísimas gracias!!~