VENGANZA, la hija de itachi uchiha [NARUTO - BORUTO] (Demoro en Actualizar)

Capitulo 54

La luz llegaba levemente a mis ojos cerrados y me avisaba que ya había amanecido.

-Buenos días pequeña- susurro una voz en mi oído que me hizo finalmente despertar.

Apenas abrí los ojos lo vi sonriéndome, al instante me tape de pies a cabeza, mi rostro estaba completamente rojo por los nervios y vergüenza que sentía.

Se escucho una caracajada que inundó la habitación – No debes tener vergüenza al final no hay nada que no haya visto– dijo divertido y burlonamente. – Saldré un momento para que te cambies, hay toalla limpias en el segundo cajón por su gustas bañarte. Claro si quieres también puedo acompañarte, kore.– dijo pícaro riendo - No tardes que el desayuno se enfria. – me avisó para luego retirarse.

Se escuchó la puerta y por fin salí de mi escondite, tomé mi ropa, una toalla y fui hacia el baño a darme una ducha. Terminé de alistarme y con toda mi valentía abrí la puerta con cautela. Lo vi de espaldas poniendo la mesa, se encontraba ya cambiado la camisa le queda pegado al cuerpo y sin dejar a la imaginación, no tenía nada de que estar inseguro simplemente era perfecto. Volteo al escuchar mis torpes pasos y me sonrió coquetamente al encontrarme comiéndolo con la mirada sin ninguna vergüenza.

 -Supongo que te gusta lo que ves, aprovecha que es todo tuyo – dijo con esa sonrisa pícara que tanto me encantaba.

-Bue.. buenos días – dije bajando la cabeza algo avergonzada por ser descubierta, con solo mirarlo a los ojos todas las imágenes de anoche volvían a mi mente e inevitablemente mi piel se erizaba.

- No estés nerviosa, anoche fue perfecto, kore. – dijo levantando mi rostro para que lo mire y posó un dulce beso en mis labios. – Te amo Izumi, eres increíble. – dijo tomando mi mano y guiándome a la mesa para desayunar. – Quiero disculparme ayer no usamos condon debí estar preparado.

- Maldición es cierto – dije asustada, que idiota ni siquiera me acordé que par de irresponsables.

 - No te preocupes me levanté temprano y compré la pastilla. Bueno no me molestaría ser padres sabes… - dijo nervioso aunque feliz. – Aquí dice que debes…

-Aun no- rápidamente tome ambas pastillas, al menos las charlas sobre sexualidad de Sakura sirvieron para algo.

 -Supongo que no – dijo con algo de desilusión – Prometo que la próxima vez seré más cuidadoso – dijo sincero sin embargo yo solo logré sonrojarme.

El desayuno lo pasamos hablando y bromeando como siempre, los nervios se habían ido y solo podía verlo con profundo amor.

-Mierda ¿que hora es?

-Son las 2- dije mirando el reloj frente nuestro

- Prometí que te llevaría donde el Mizukage a las 1. Ya debió terminar la reunión, va a matarme. – dijo nervioso

Me reí levemente era divertido verlo preocupado y sin tener todo perfectamente calculado – Tranquilo, solo vamos de una vez.- dije con calma.

Llegamos caminando hasta el hotel donde se encontraba el Misukage, Kagura y otros Anbu con él.

-Mizukage Sama disculpe la demora – dijo con un gesto de respeto y arrepentimiento.

-No se preocupen, hubo contratiempos y acabamos de terminar la reunión hace unos minutos, justo nos dirigimos a la estación.

Caminamos hacia la misma, los ninjas entregaron los boletos y nos dejaron pasar. Hacia mis pasos cada vez más lentos no quería que nos separarnos así duraron algunos minutos hasta que ya era momento de despedirse.